La ampliaci¨®n de la licencia de paternidad se abre paso en Colombia e impulsa un cambio cultural
La extensi¨®n de dos a cuatro semanas promueve el cuidado, desde el nacimiento, como una responsabilidad compartida
Colombia tiene ante sus ojos la posibilidad de avanzar en un cambio cultural que rompe con la idea tradicional sobre los roles de g¨¦nero en la crianza y el cuidado. La propuesta de duplicar la licencia de paternidad de dos a cuatro semanas ¨Dque aprob¨® la C¨¢mara de Representantes en los primeros dos de los cuatro debates de la reforma laboral¨D llevar¨ªa a los padres a tener la oportunidad de involucrarse m¨¢s en el cuidado de sus hijos e hijas desde su nacimiento. Adem¨¢s, las madres podr¨¢n estar mejor acompa?adas en una etapa en la que se dispara la carga dom¨¦stica sobre sus espaldas.
En el fondo est¨¢ un desbalance que se refleja en el tiempo destinado a asumir actividades cotidianas de cuidado no remunerado. Mientras las mujeres pasan ocho horas en promedio al d¨ªa cocinando, limpiando o haciendo compras para el hogar ¨Duna jornada completa de trabajo¨D los hombres destinan tres horas, seg¨²n datos de la encuesta nacional de uso del tiempo del Departamento Administrativo Nacional de Estad¨ªsticas (DANE). Esa brecha se acent¨²a cuando hay hijos a cargo, y es m¨¢s evidente si son menores de cinco a?os. En ese escenario, mientras en promedio las mujeres consagran 12 horas y 45 minutos al d¨ªa a las labores del cuidado, para los hombres la cifra es de apenas 5 horas y 15 minutos.
Ese peso lleva a un agotamiento que sufren las madres en privado. Adem¨¢s de los riesgos que esa sobrecarga supone para el bienestar f¨ªsico y emocional, quedan expuestas a la discriminaci¨®n laboral. Por cada 100 hombres ocupados en Colombia se calcula que hay 67 mujeres, de acuerdo con cifras de 2022 reportadas por ONU Mujeres y el DANE.
Esa realidad refleja una sociedad en la que imperan modelos preconcebidos de responsabilidades divididas seg¨²n el g¨¦nero, que tambi¨¦n han dejado a los padres por fuera del descubrimiento de la crianza. La misma encuesta oficial sobre el uso del tiempo revela que m¨¢s de la mitad de los ciudadanos se declara ¡°muy de acuerdo¡± con una afirmaci¨®n que, tradicionalmente, ha distanciado a los hombres de las labores del hogar: ¡°Las mujeres son mejores para el trabajo dom¨¦stico que los hombres¡±. Es una creencia arraigada no solo entre el 51,3% de los hombres, sino entre el 50,1% de las mujeres, y que ha fracturado cualquier asomo de equidad.
La ampliaci¨®n de la licencia de paternidad que se abre paso en el Congreso encierra una oportunidad para replantear esas creencias, destaca la representante a la C¨¢mara del Pacto Hist¨®rico y coordinadora ponente de la reforma laboral, Mar¨ªa Fernanda Carrascal. ¡°Ampliar la licencia de paternidad supone una acci¨®n de pol¨ªtica p¨²blica para impulsar la redistribuci¨®n del cuidado. Hoy en d¨ªa vemos a padres m¨¢s involucrados en la crianza de sus hijos y este ajuste busca profundizar ese cambio cultural¡±, afirma la congresista gobiernista.
Antes de la expedici¨®n de la Ley 2114 de 2021, la licencia de paternidad era de apenas ocho d¨ªas. Esa misma actualizaci¨®n cre¨® una licencia parental compartida, que permite que las ¨²ltimas seis semanas de la licencia de 18 semanas a las que tiene derecho la madre se divida entre ambos padres, si as¨ª lo deciden de mutuo acuerdo. Con la reforma laboral, a la que le resta la aprobaci¨®n del Senado de la Rep¨²blica, se buscaba, originalmente, extender la licencia del padre a 12 semanas. Sin embargo, en el transcurso de las discusiones se negoci¨® un tiempo menor como camino para evitar un naufragio del proyecto que defiende el Gobierno de Gustavo Petro y que contempla un paquete m¨¢s amplio de cambios relacionados con derechos de los trabajadores.
Uno de los argumentos para oponerse a una licencia m¨¢s larga fue el de los costos, que se cubren con las cotizaciones que hacen los trabajadores formales y sus empleadores al sistema de salud. ¡°Demasiados derechos, pero no hay de d¨®nde sacar la plata¡±, sostuvo el representante opositor Jhon Jairo Berr¨ªo, quien demostr¨® c¨®mo afloran las divisiones de roles. ¡°No podemos desconocer de d¨®nde nace la licencia de maternidad, no es solamente el derecho de la madre, es m¨¢s el derecho del ni?o a ser cuidado y a ser alimentado¡ no podemos asimilar la licencia de paternidad a una licencia de maternidad¡±, agreg¨® el congresista del Centro Democr¨¢tico.
Esa tesis, que ata el cuidado de los reci¨¦n nacidos a la lactancia, gener¨® el rechazo de Carrascal, madre de una beb¨¦ de cuatro meses. ¡°Hay una responsabilidad compartida. Te dicen que tienes que parir, pero que no importan las condiciones sociales. Las mujeres no solamente estamos para lactar. Es la sociedad la que debe hacerse cargo de las maternidades, no solo las mujeres¡±, respondi¨® la representante que no tom¨® su licencia. De haberlo hecho, habr¨ªa tenido que ceder su curul al siguiente en la lista de su partido, un modelo que tambi¨¦n refleja desigualdades y que ella y otras congresistas de distintas corrientes pol¨ªticas buscan cambiar, haciendo que se autoricen las participaciones virtuales durante la licencia.
Pese a los ajustes frente a la propuesta inicial, Colombia se ubica como uno de los pa¨ªses de la regi¨®n con m¨¢s d¨ªas de licencia de paternidad, aunque sigue lejos del promedio de ocho semanas de los pa¨ªses de la OCDE. En todo caso, una mayor licencia ayuda a moldear una paternidad m¨¢s activa. Las videollamadas o el encuentro de un padre con su hijo o hija despu¨¦s de la fatiga de un d¨ªa de trabajo no reemplaza el v¨ªnculo que genera su presencia, subrayan algunos expertos. ¡°La interacci¨®n cercana sincroniza el cuerpo, el cerebro, las hormonas de los reci¨¦n nacidos. Los beb¨¦s que comparten con ambos padres suelen desarrollar mejor control de las emociones, se tranquilizan con m¨¢s facilidad. La cercan¨ªa crea una trayectoria de mejor salud f¨ªsica y psicol¨®gica¡±, explica el doctor en Psicolog¨ªa Diego Armando Le¨®n, profesor de la Universidad Externado.
Luis Ren¨¦ Bautista, doctor en Ciencias del Comportamiento y docente de la Universidad EAN, agrega que la biolog¨ªa favorece a la madre, por lo que a los hombres les corresponde empe?arse en fortalecer la relaci¨®n. ¡°Es muy importante que el pap¨¢ pueda pasar tiempo con su hijo incluso desde antes de que nazca. Eso le va a ayudar a generar compromiso, a ubicarse y a posicionarse como pap¨¢¡±, se?ala. Asumir la crianza hombro a hombro tambi¨¦n favorece la salud de la madre y las relaciones de familia presionadas por nuevos factores de estr¨¦s. Y, ante todo, descompone los estereotipos que alteran el desarrollo de hijos e hijas, incluso desde el nacimiento.