Muere Tatiana Andia, la soci¨®loga experta en salud que le ense?¨® a Colombia a morir
Fue una de las m¨¢s respetadas acad¨¦micas sobre el sistema sanitario y la econom¨ªa de la medicina. Ha fallecido despu¨¦s de conmover al pa¨ªs con varias columnas sobre el c¨¢ncer que padeci¨® y su defensa del derecho a morir dignamente

La soci¨®loga Tatiana Andia ha fallecido este jueves, a sus 45 a?os, despu¨¦s de m¨¢s de dos a?os de padecer c¨¢ncer. De acuerdo a uno de sus conocidos, la acad¨¦mica falleci¨® ¡°en sus t¨¦rminos¡±. Investigadora experta en el sistema de salud y profesora de la Universidad de los Andes, hizo carrera como experta en regulaci¨®n de precios de medicamentos desde el sector p¨²blico. De padre m¨¦dico, pocas personas en Colombia cuestionaron y buscaron mejorar el sistema de salud tanto como ella, quien lo conoc¨ªa y lo vivi¨® en su complejidad burocr¨¢tica y humana. En 2023, comparti¨® en una columna del portal Raz¨®n P¨²blica su diagn¨®stico: un c¨¢ncer de pulm¨®n que ya hab¨ªa hecho met¨¢stasis. Agreg¨®, en una entrevista con este diario, que sab¨ªa que ten¨ªa opciones de alargar su vida pero no de curarse, y que no estaba dispuesta a vivir a cualquier precio. ¡°Yo no le tengo miedo a la muerte pero s¨ª le tengo mucho miedo a la mala vida, a la vida de sufrimiento¡±, explic¨® en un podcast. Con varias entrevistas y conmovedoras columnas sobre su camino hacia una muerte cercana, Tatiana Andia le ense?¨® a los colombianos a morir.
¡°Saber vivir es tambi¨¦n saber morir, aunque la sociedad contempor¨¢nea nos ense?e muy poco de esto ¨²ltimo¡±, escribi¨® en una columna. La ¨²ltima, que ha publicado El Espectador este mismo jueves de forma p¨®stuma, revela su estado de ¨¢nimo tan solo tres semanas antes de su muerte: ¡°Al final, b¨¢sicamente, extra?o estar en el mundo plenamente, como sol¨ªa estar, como la gente que me conoce y me quiere, dice recordarlo. Extra?o que mi vida no sea un simulacro, que no sea el ensayo de una obra de teatro. Estoy exhausta y quiero levantar el tel¨®n¡±.
Andia cont¨® en varias columnas c¨®mo se prepar¨® para una muerte que sab¨ªa cercana. Habl¨® de sus emociones, de sus relaciones, pero tambi¨¦n de los tr¨¢mites. Firm¨® un documento conocido como ¡°voluntad anticipada¡±, en el que dej¨® expl¨ªcito que, de tener un paro respiratorio o cardiaco, ped¨ªa ¡°no resucitar, no entubar, no quimioterapias¡±. Es decir, rechaz¨® los procedimientos usuales ante una emergencia. Tramit¨® los papeles necesarios para acceder a la eutanasia, en caso de que fuera necesaria. Su c¨¢ncer, que fue contando poco a poco, se expandi¨® a su cabeza, a su cadera, a su pelvis. Sus sentidos se empezaron a afectar. En 2024 accedi¨® a una cirug¨ªa para remover los tumores de su cerebro, que luego describi¨® como tortuosa, en parte porque termin¨® en peligrosas convulsiones.
¡°Perd¨ª el equilibrio y luego la fuerza o la capacidad de respuesta de la pierna, el pie y la mano izquierdas. Entre eso y la ceguera parcial del ojo izquierdo¡±, escribi¨® en enero pasado, con frustraci¨®n. All¨ª comparti¨® tambi¨¦n que, ante la posibilidad de una nueva radiocirug¨ªa en su cabeza para alargar su vida, ¡°mi respuesta es un no rotundo. No porque no est¨¦ abierta a las posibilidades, sino porque ya no creo que me ofrezca nada m¨¢s que riesgos¡±.
Andia, sin embargo, se despidi¨® con sencillez y sabidur¨ªa; tambi¨¦n con lo que en su columna p¨®stuma llam¨® ¡°mi humor c¨¢ustico¡±. Lo hizo no en privado, sino ante todos los colombianos, ante todos quienes la quisieran leer o escuchar. Hizo homenajes su padre y a su pareja, Andr¨¦s El¨ªas, dos hombres que la cuidaron y acompa?aron en su camino hacia la muerte: ¡°Estos hombres, mis hombres, se han dedicado tiempo completo a mi cuidado. Con el amor, la empat¨ªa y la paciencia que eso implica¡±. Tambi¨¦n a sus amigos, que le leyeron libros en audios de WhatsApp cuando empez¨® a perder la vista, y al Instituto Cancerol¨®gico, una entidad de su querido sistema p¨²blico de salud y uno de los mejores centros del pa¨ªs para tratar el c¨¢ncer.
La enfermedad de Andia coincidi¨® con el inicio del desmoronamiento del sistema de salud, cuando el presidente Gustavo Petro convirti¨® en su gran bandera pol¨ªtica una reforma legislativa para modificarlo. Su deterioro se dio en paralelo con el de un sistema que, ante el fracaso del proyecto en el Congreso, el Gobierno ha ido cambiando a cuentagotas, con ¨®rdenes ejecutivas, intervenciones a entidades y retrasos en los pagos. ¡°Espero que el sistema de salud no se derrumbe antes de que mi tratamiento deje de funcionar¡±, dijo a EL PA?S en el 2023, cuando apenas empezaba su camino.
¡°Se acab¨® la fiesta, justamente porque dej¨® de ser una fiesta y se convirti¨® en un suplicio. Y no tengo que demostrarle a nadie cu¨¢nto sufro. No es menester que la gente vea que, incluso en mi deca¨ªda, sigo con el bal¨®n en la mano. Simplemente, se acab¨® la fiesta. Me apagaron la m¨²sica. Me retiro con dignidad¡±. Con esas palabras cierra su columna final la economista, historiadora y soci¨®loga que no dej¨® de ense?ar ni al escribir esa columna, la que pidi¨® que solo fuera publicada tras su muerte. ¡°Se me olvida que es mi vida, y es mi derecho decidir cu¨¢ndo termina¡±.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.