¡°Latinoam¨¦rica necesita que la reparen por los da?os clim¨¢ticos. Pr¨¦stamos, ya tenemos suficientes¡±
A una semana de que comience la Conferencia de Cambio Clim¨¢tico de las Naciones Unidas (COP27), Adri¨¢n Mart¨ªnez Blanco, director y fundador de La Ruta del Clima, una ONG de Costa Rica, explica por qu¨¦ hablar de p¨¦rdidas y da?os es tan importante para la regi¨®n
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El cambio clim¨¢tico ya le pas¨® factura a Latinoam¨¦rica y el Caribe. Las lluvias y sequ¨ªas han alterado sus patrones, afectando una regi¨®n que es rica por su agricultura. Cada vez son m¨¢s frecuentes los incendios, huracanes, r¨ªos desbordados y especies que dejaron de verse en los p¨¢ramos y valles. La regi¨®n ya est¨¢ asumiendo las p¨¦rdidas y da?os del cambio clim¨¢tico. Incluso hoy estamos viendo nuestra infraestructura colapsar, gente que se queda sin empleo o personas que deben abandonar su hogar porque los cultivos de los que antes subsist¨ªan se volvieron impredecibles. Y lo peor: la mayor¨ªa est¨¢n pagando las consecuencias de esto de sus mismos bolsillos.
Durante la Conferencia de Cambio Clim¨¢tico de las Naciones Unidas (COP27), que se realizar¨¢ entre el 6 y el 18 de noviembre de 2022, se discutir¨¢ la creaci¨®n de un fondo para asumir las p¨¦rdidas y da?os del cambio clim¨¢tico como algo prioritario. En entrevista con Am¨¦rica Futura, Adri¨¢n Mart¨ªnez Blanco, director y fundador de La Ruta del Clima, una ONG de Costa Rica que ha seguido de cerca estas discusiones y que busca que las personas puedan hacer parte de la toma de decisiones clim¨¢ticas, explica la importancia de este tema para la regi¨®n. ¡°En Centroam¨¦rica, donde la mayor¨ªa de pa¨ªses son responsables de menos del 0.3% de las emisiones hist¨®ricas, no creemos en pedirles que participen por los carros el¨¦ctricos o siendo veganos, sino con lo que afecta su d¨ªa a d¨ªa¡±, asegura. ¡°En c¨®mo les est¨¢ costando a las poblaciones m¨¢s vulnerables y con una huella de carbono m¨¢s peque?a, como la de Latinoam¨¦rica en general, el ¨¦xito de las econom¨ªas intensivas en carbono¡±.
Pregunta. Todo indica que durante la COP27 el tema de p¨¦rdidas y da?os finalmente ser¨¢ protagonista. ?Espec¨ªficamente qu¨¦ es lo que se est¨¢ pidiendo?
Respuesta. Este es un ciclo que hemos vivido ya varias veces: pedir financiamiento para p¨¦rdidas y da?os y que no termine en nada. Lo vivimos en Bali (Indonesia) en 2007, durante la COP13, y en la COP25, en 2019, en Madrid (Espa?a). Finalmente, el a?o pasado, durante la COP26, que se hizo en Glasgow (Inglaterra), se volvi¨® a tratar el tema y hubo un gran consenso de la mayor¨ªa de pa¨ªses para que estuviera en el documento de decisi¨®n. La idea era que apareciera una peque?a oraci¨®n en donde se dec¨ªa que se creaba un mecanismo de financiamiento para p¨¦rdidas y da?os. Pero lastimosamente en ¨²ltimo momento Estados Unidos y sus aliados pidieron eliminarlo y se borr¨® del texto. Entonces para esta COP27 se est¨¢ buscando que el tema vuelva a ser parte de la agenda. Desde ya sabemos que algunos pa¨ªses, como Suiza, se van a oponer. Otros hablan de ayudas humanitarias, pero eso no tiene sentido. Es muy distinto cuando se da plata por compromiso o por donaci¨®n, que cuando se compensa a alguien por da?os que se generaron, que es lo que estamos pidiendo con el cambio clim¨¢tico. Tampoco queremos que se hable de pr¨¦stamos, porque de esos ya tenemos suficientes en Latinoam¨¦rica, sino que sea una forma de reparaci¨®n por da?os ambientales transfronterizos.
P. P¨¦rdidas y da?os implica cosas sobre las que ha sido dif¨ªcil hablar en las distintas COP. Una es la atribuci¨®n, es decir, c¨®mo saber que las emisiones de ¡°X¡± o ¡°Y¡± pa¨ªs generaron esos da?os en otra parte. ?C¨®mo ve ese panorama para esta COP27?
Creo que es un argumento un poco absurdo porque el cambio clim¨¢tico ha transformado tanto nuestro clima, con solo ese incremento de 1.1¡ãC que ya llevamos, que es m¨¢s bien dif¨ªcil decir que los eventos que estamos viviendo no est¨¢n relacionados con el cambio clim¨¢tico. Por ejemplo, en Centroam¨¦rica ver dos huracanes con semanas o d¨ªas de separaci¨®n ya es algo que la gente sabe que viene. Y cuando hablamos con gente del campo tambi¨¦n nos comentan de cambios del clima que se reportan desde hace m¨¢s de dos d¨¦cadas. Y esas personas son las que, sin ser mayores responsables del cambio clim¨¢tico, est¨¢n pagando por las p¨¦rdidas y da?os de sus bolsillos.
P. Tambi¨¦n implica hablar sobre responsabilidades legales. ?Es posible hacerlo en el marco de la COP27?
R. Hay que recordar que pa¨ªses como Estados Unidos metieron una triqui?uela en la primera decisi¨®n del Acuerdo de Par¨ªs en la que se dice que no se puede hablar sobre compensaci¨®n y responsabilidad legal. Entonces, no solo pa¨ªses como ellos son los que generaron el da?o, sino que son los que pueden detener el cambio clim¨¢tico y los que tienen el poder econ¨®mico y geopol¨ªtico, aprovech¨¢ndose para que no se hable de responsabilidad legal. Pero, la verdad, es una regla que no tiene mucha solidez, porque no concuerda con hacia donde va el derecho internacional.
P. ?Y no cree entonces que un mejor escenario para las p¨¦rdidas y da?os sean los litigios clim¨¢ticos internacionales, como ya est¨¢ sucediendo en algunos casos?
R. Creo que los litigios clim¨¢ticos internacionales pueden presionar para que los pa¨ªses rompan ese consenso de que el Acuerdo de Par¨ªs no habla de decisiones legales. Pero m¨¢s all¨¢ de que las cortes internacionales nos est¨¢n dando esta se?al, la soluci¨®n s¨ª sigue estando en espacios multilaterales como la COP, porque es un problema de una escala tan grande que estamos hablando de entre 500.000 y 300.000 millones de d¨®lares anuales. Es que no se trata solo de los da?os y p¨¦rdidas de infraestructura, sino lo que pasa, por ejemplo, cuando tras una inundaci¨®n los ni?os y ni?as no pueden regresar a sus escuelas, a la educaci¨®n, por meses. Lo vimos en la pandemia: son costos alt¨ªsimos. Necesitamos una respuesta sincera de la comunidad internacional.
P. Recientemente La Ruta del Clima public¨® un informe sobre p¨¦rdidas y da?os en Centroam¨¦rica. ?Qu¨¦ encontraron?
R. Junto a Oxfam hicimos una visita a Honduras, Guatemala y El Salvador en la que hablamos con comunidades de diferentes sectores geogr¨¢ficos para conocer las afectaciones clim¨¢ticas. Y s¨ª, no solo hay una afectaci¨®n econ¨®mica, sino tambi¨¦n en su bienestar. No es algo nuevo, porque es algo tan sencillo como que, si el cambio clim¨¢tico afecta la intensidad y frecuencia de las lluvias, las personas que se dedican a la pesca no podr¨¢n salir a pescar si llueve demasiado. Y si no hay pesca, no se come ese d¨ªa. En temas de g¨¦nero, adem¨¢s, se incrementa la carga relacionada con el cuidado. Estamos viendo un ¨¦xodo de personas del campo que se van a la ciudad o a otros pa¨ªses, donde se abandonan a las comunidades y son las mujeres las que quedan a cargo de todo: la siembra, mantener su cultura y la carga dom¨¦stica. S¨ª, falta m¨¢s investigaci¨®n y datos sobre p¨¦rdidas y da?os, pero las historias de las personas que lo est¨¢n viviendo cuentan. Y los pa¨ªses de Latinoam¨¦rica no estamos siendo lo suficientemente fuertes con eso: no estamos poniendo una l¨ªnea sobre la arena para defender nuestra tierra, nuestro derecho a existir y a permanecer en nuestro territorio.
P. Ustedes tambi¨¦n hablan de p¨¦rdidas y da?os culturales en Centroam¨¦rica. ?A qu¨¦ se refieren?
R. Tiene que ver con el tema de la identidad, la tierra y las costumbres. Las pr¨¢cticas alimenticias, por ejemplo, que tambi¨¦n est¨¢n relacionadas con ciclos del clima y son culturales, est¨¢n cambiando. Adem¨¢s, se est¨¢ dando un cruce de fronteras hacia al norte del mundo, donde se genera esta idea de que mi territorio, mi pueblo, es peligroso, lo que tambi¨¦n implica un trauma intergeneracional, porque las personas que se quedan atr¨¢s se quedan solas. Se rompe un contacto con la tierra, con la familia, con los lazos psicol¨®gicos. Se est¨¢ destruyendo la identidad de qu¨¦ es ser centroamericano y latinoamericano, de poder vivir de la tierra y sus tradiciones. El cambio clim¨¢tico nos est¨¢ negando la posibilidad de ser un pueblo en la regi¨®n en donde nacimos y eso es muy importante recordarlo.
P. Justo en Am¨¦rica Latina han llegado este a?o nuevos Gobiernos con discursos m¨¢s fuertes sobre la acci¨®n clim¨¢tica, como el de Gabriel Boric (Chile) o Gustavo Petro (Colombia). ?Podr¨¢ eso generar un nuevo arreglo geopol¨ªtico en la COP27?
R. Eso depende de qu¨¦ tanto el discurso de una presidencia cala en el equipo t¨¦cnico que llega a la COP27. En algunos pa¨ªses incluso a¨²n no ha cambiado el cuerpo diplom¨¢tico. As¨ª que, si ese discurso llega a calar en esos equipos y logran llevar esto hasta las ¨²ltimas consecuencias, arriesgar su capital pol¨ªtico para hacerlo, puede que haya un resultado m¨¢s favorable para la regi¨®n. Pero si quieren hacer cambios deber¨¢n formar un bloque de negociaci¨®n latinoamericano, como el que tienen en otras regiones, en el que sepan cu¨¢les son sus l¨ªneas rojas, en el que puedan soportar las olas de los equipos diplom¨¢ticos de pa¨ªses desarrollados que se llevan preparando por a?os para hacernos dar vueltas y no avanzar. Los discursos de los pol¨ªticos pueden ser muy bellos. Sin embargo, hay que asegurarse que no salgamos de esta COP27 con las manos vac¨ªas y sonriendo.