La nueva ley de migraci¨®n cubana abre la puerta al despojo de la ciudadan¨ªa a opositores pol¨ªticos

Un nuevo proyecto de Ley de Migraci¨®n abre la puerta al Gobierno cubano para despojar de la ciudadan¨ªa a quienes disienten del sistema, siguiendo el modelo de pa¨ªses como Nicaragua, donde cientos de opositores pol¨ªticos a Daniel Ortega han sido privados de su nacionalidad. El documento, publicado esta semana por la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP) y que ha causado pol¨¦mica, dice que los cubanos ¡°no pueden ser privados de su ciudadan¨ªa, salvo por causas legalmente establecidas¡±, entre las que est¨¢n ¡°alistarse en cualquier tipo de organizaci¨®n armada con el objetivo de atentar contra la integridad territorial del Estado cubano, sus ciudadanos y dem¨¢s personas residentes en el pa¨ªs, o desde el extranjero realizar actos contrarios a los altos intereses pol¨ªticos, econ¨®micos y sociales de la Rep¨²blica de Cuba¡±.

Ahora estar¨ªa en manos del presidente y del Ministerio de Interior de Cuba (Minint) la decisi¨®n de qui¨¦n puede estar privado o no de su condici¨®n de ciudadano, ya que ¡°son las autoridades en materia de ciudadan¨ªa, competentes para resolver los expedientes administrativos sobre adquisici¨®n, p¨¦rdida, privaci¨®n, renuncia y recuperaci¨®n de la ciudadan¨ªa cubana¡±. De ser as¨ª, el gobernante Miguel D¨ªaz-Canel estar¨ªa facultado y amparado ante la ley para decidir qui¨¦n mantiene o no el estatus de ciudadano cubano, algo que podr¨ªa perjudicar particularmente a muchos de los que disienten por motivos pol¨ªticos, y que integran una larga lista activistas, periodistas, artistas o personal m¨¦dico o deportivo, entre otros.

La propuesta legislativa, cuyo borrador ya ha sido publicado pero que est¨¢ pendiente de ser aprobada, pone sobre la mesa otra posibilidad hasta ahora negada a los cubanos: la de renunciar a la ciudadan¨ªa. Hasta hoy, los cubanos que poseen ciudadan¨ªas extranjeras est¨¢n prohibidos de entrar al pa¨ªs con otro pasaporte que no sea el cubano, por lo que, de ser posible, se har¨ªa realidad el reclamo de muchos en el exterior. No obstante, el documento aclara que quienes opten por esta decisi¨®n ¡°no pueden identificarse en Cuba como ciudadanos cubanos, y a los efectos de la entrada y salida al pa¨ªs est¨¢n sujetos a la presentaci¨®n del pasaporte extranjero correspondiente, exigencia de visado y los documentos de viaje que correspondan¡±. Ante las dudas y temores de muchos, directivos del servicio de Inmigraci¨®n y Extranjer¨ªa del MININT insistieron en la Televisi¨®n Nacional que ¡°el principio establece que los cubanos no pierden la ciudadan¨ªa cubana por tener otra. No se va a tomar ninguna medida en el pa¨ªs en relaci¨®n con eso¡±.

La futura Ley de inmigraci¨®n cubana aviva el debate en varios sentidos: ?en realidad beneficia o perjudica a los cubanos?; ?qui¨¦n podr¨¢ ser despojado de su condici¨®n de ciudadano?; ?se vienen m¨¢s restricciones de derechos? Estas son algunas preguntas sobre la mesa en el espacio p¨²blico. Lo que es indudable, en medio de la mayor crisis migratoria en la historia de la isla, que alcanza la cifra de m¨¢s de medio mill¨®n de cubanos en los ¨²ltimos tres a?os, es que el Gobierno quiere empezar a fiscalizar su di¨¢spora. ¡°Ha llegado el momento para determinar d¨®nde residen los cubanos¡±, dijo a la prensa oficial un alto funcionario del MININT sobre una ley que busca ¡°regular un sistema migratorio actualizado¡±, pero que hasta hoy se hace confusa incluso para los expertos.

Aunque la nueva ley sigue haciendo una clara distinci¨®n entre los cubanos que viven dentro de Cuba y los que viven en el extranjero, el documento insiste en que busca ¡°un tratamiento a los cubanos [residentes en el exterior] cuando se encuentran en el territorio nacional similar al de los cubanos residentes¡±. Es una manera a la que podr¨ªa estar acudiendo el Gobierno para acercar al pa¨ªs a su di¨¢spora, por tantos a?os vilipendiada, pero que ha sido un importante emisor de remesas y podr¨ªa jugar un papel decisivo en el impulso del sector privado, el ¨²ltimo reducto del pa¨ªs para salvar la econom¨ªa, que vive una fuerte crisis.

Para algunos cubanos fuera de la isla, sin embargo, la ley tambi¨¦n supone un respiro. En 2020, ante las restricciones en los aeropuertos de todo el mundo por la crisis de coronavirus, el Gobierno de Cuba puso en pausa una ley que despojaba de su condici¨®n de residente cubano a cualquier ciudadano que permaneciera en el exterior por m¨¢s de dos a?os. Si un cubano demoraba m¨¢s de ese tiempo en regresar al pa¨ªs, perd¨ªa autom¨¢ticamente su estatus de residente, lo que supon¨ªa la p¨¦rdida de varias garant¨ªas como la obligaci¨®n del Estado de proporcionarle atenci¨®n m¨¦dica o educaci¨®n gratuitas, o el derecho al sufragio electoral, o la posibilidad de tener patrimonio en el pa¨ªs. Esta nueva ley, a primera vista, beneficiar¨ªa a aquellos que alarguen su estancia, suprimiendo ¡°el tiempo de estancia de 24 meses en el exterior y la designaci¨®n de migrante por esta raz¨®n, a partir de la nueva definici¨®n de residencia efectiva migratoria¡±. Por a?os, miles de cubanos perdieron su estatus de residente y fueron a ocupar la condici¨®n de ¡°emigrados¡±, un hueco en el que ca¨ªan todos los que estuvieran fuera por m¨¢s de dos a?os y que se extingue con la nueva ley.

El derecho a propiedad, tantas veces puesto en riesgo, es otro tema que preocupa a los cubanos y puede dejar de ser una amenaza, como s¨ª lo ha sido en ¨¦pocas pasadas. Familias enteras, por a?os, perdieron tierras, casas, autos y otras propiedades al permanecer fuera del pa¨ªs por m¨¢s tiempo del autorizado. Seg¨²n puede verse en la futura ley, los cubanos podr¨¢n heredar y tener propiedades en la isla, siempre que cumplan con lo establecido. Pero qu¨¦ beneficios reales tendr¨¢n, o c¨®mo perjudica a los ciudadanos cubanos esta ley, es algo que muchos no se atreven a asegurar hasta que se ofrezcan m¨¢s detalles.

Siga toda la informaci¨®n de El PA?S Am¨¦rica en Facebook y X, o en nuestra newsletter semanal.