El grupo de expertos de la ONU se?ala a Ortega, Murillo y al r¨¦gimen sandinista de ¡°coordinar¡± un aparato de represi¨®n
Los expertos acusan al Gobierno de ¡°ejecutar graves violaciones y abusos¡± y critican la instrumentalizaci¨®n del Poder Judicial: ¡°Hoy por hoy, Nicaragua no cumple ni con el m¨¢s m¨ªnimo est¨¢ndar razonable de independencia judicial¡±
Un grupo de expertos de Naciones Unidas que ha seguido de cerca la crisis pol¨ªtica de Nicaragua ha hecho p¨²blico este lunes en Ginebra un duro informe en el que acusan al presidente Daniel Ortega y su vicepresidente y esposa, Rosario Murillo, de ¡°coordinar¡± un aparato represivo dirigido desde el Estado para instaurar un sistema de terror con ¡°graves violaciones y abusos a los derechos humanos¡±. Los expertos de la ONU han podido constatar ¡°a primera vista¡±, dice el informe, de que en el pa¨ªs centroamericano se han cometido cr¨ªmenes de lesa humanidad, entre ellos persecuci¨®n por motivos pol¨ªticos, privaci¨®n de la nacionalidad y encarcelamientos injustos, que han quedado impunes y sin reparaci¨®n alguna. El informe se centra en la instrumentalizaci¨®n del Poder Judicial nicarag¨¹ense, convertido en el principal ¨®rgano de represi¨®n del r¨¦gimen. ¡°Hoy por hoy, Nicaragua no cumple ni con el m¨¢s m¨ªnimo est¨¢ndar razonable de independencia judicial¡±, ha alertado Jan-Michael Simon, presidente del Grupo de Expertos en Derechos Humanos sobre Nicaragua (GHREN).
Mientras Simon presentaba el informe en Ginebra, en Managua la Corte Suprema informaba a trav¨¦s de un comunicado de que despojaba de la nacionalidad nicarag¨¹ense a 135 presos pol¨ªticos que fueron liberados el pasado jueves por el r¨¦gimen y expulsados a Guatemala. La Suprema tambi¨¦n ordena la confiscaci¨®n de todos sus bienes por ¡°atentar contra la soberan¨ªa¡± nacional. Simon ha denunciado de que las violaciones a los derechos humanos contin¨²an incluso fuera de Nicaragua. ¡°Las v¨ªctimas fuera del territorio nacional siguen siendo privadas arbitrariamente de sus medios de vida. Se le niega tambi¨¦n arbitrariamente la entrada a su pa¨ªs, entre numerosos modos de denegaci¨®n de una nacionalidad efectiva. Las m¨¢s de 700 v¨ªctimas en el extranjero registradas por nosotros representan apenas una muestra de la dimensi¨®n de estas ¡°violaciones por extensi¨®n¡±, ha recalcado el experto.
El GHREN ha realizado para su informe al menos 1.200 entrevistas y ha analizado casi 5.000 documentos. ¡°Informamos haber establecido hechos y circunstancias que constituyen, prima facie, cr¨ªmenes de lesa humanidad, particularmente, persecuci¨®n por motivos pol¨ªticos; hechos que comportan graves violaciones y abusos de derechos humanos, y que incluyen la privaci¨®n de la nacionalidad por motivos pol¨ªticos; hechos que se han quedado impunes y sin reparaci¨®n alguna¡±, ha advertido Simon en su presentaci¨®n. Los expertos han afirmado ¡°tener motivos razonables para creer que el actual presidente de Nicaragua y la vicepresidenta son los principales responsables¡± de estos cr¨ªmenes, pero en su informe van m¨¢s all¨¢ y se?alan todo un aparato represivo que incluye a al menos 66 integrantes del Ejecutivo.
As¨ª lo ha explicado Simon: ¡°Hemos podido establecer que la concentraci¨®n de todos los poderes p¨²blicos en las manos del presidente y de la vicepresidenta sigue endureciendo, particularmente, respecto al poder judicial. Hoy por hoy, Nicaragua no cumple ni con el m¨¢s m¨ªnimo est¨¢ndar razonable de independencia judicial. Se instrumentaliza cada vez m¨¢s el Estado en su conjunto, incluso con el apoyo de elementos paraestatales. Al presente, hemos identificado al menos 66 personas en los niveles medio y superior del aparato organizado de poder bajo el mando de los dos gobernantes de Nicaragua. Este aparato sigue facilitando, coordinando y ejecutando graves violaciones y abusos de derechos humanos¡±.
Entre los abusos que el r¨¦gimen sigue cometiendo est¨¢n las detenciones arbitrarias, torturas y malos tratos y la instrumentalizaci¨®n del derecho penal para eliminar cualquier oposici¨®n ¡°real, potencial o percibida como tal¡±. Los expertos tambi¨¦n denuncian que ¡°las v¨ªctimas se ven obligadas a elegir entre la c¨¢rcel y la salida del pa¨ªs¡±, como ha sucedido la pasada semana con las 135 personas presas por motivos pol¨ªticos. ¡°Un patr¨®n particularmente grave de violaciones con alcance transfronterizo sigue siendo la ¡°violaci¨®n por asociaci¨®n¡±. En la actualidad, familiares de personas opositoras al Gobierno, o percibidas como tales, siguen siendo victimizadas ¨²nicamente por sus lazos familiares. Un aspecto muy grave de este patr¨®n es la afectaci¨®n de al menos un centenar de ni?as y ni?os¡±, ha resaltado Simon.
Lo que m¨¢s preocupa a los expertos es que estas continuas violaciones ¡°est¨¢n dejando sectores enteros de la poblaci¨®n en un estado de indefensi¨®n¡±, tras la expulsi¨®n del pa¨ªs de organizaciones de defensores de derechos humanos y la imposibilidad de organismos internacionales como Naciones Unidas de trabajar en el territorio nicarag¨¹ense. ¡°Se ha desmantelado cualquier esfuerzo de organizaci¨®n de la poblaci¨®n campesina. La toma forzosa de las universidades y las violaciones contra l¨ªderes estudiantiles y profesores han afectado masivamente la educaci¨®n superior de miles de estudiantes y su proyecto de vida, y han tenido un impacto grave en las perspectivas y el desarrollo del pa¨ªs¡±, ha agregado Simon.
Azahalea Sol¨ªs, abogada y defensora de derechos humanos exiliada en Costa Rica y a quien el r¨¦gimen tambi¨¦n despoj¨® de su nacionalidad, ha explicado a EL PA?S en entrevista desde Ginebra, donde est¨¢ para participar en las sesiones del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, de que el informe del GHREN comprueba que contin¨²a un estado de terror en Nicaragua, incluyendo las desapariciones forzadas. ¡°Hoy se ha reiterado el comportamiento violatorio de derechos humanos, la ausencia absoluta de las m¨ªnimas garant¨ªas procesales o sus derechos constitucionales¡±, ha explicado Sol¨ªs.
Uno de los casos que ha llamado la atenci¨®n de los expertos de la ONU es el del dirigente ind¨ªgena y diputado Brooklyn Rivera, detenido de forma arbitraria. ¡°Las autoridades se han negado incluso a reconocer el hecho de la detenci¨®n. Las pr¨¢cticas de detenci¨®n en r¨¦gimen de incomunicaci¨®n y desaparici¨®n forzada constituyen graves violaciones de los derechos humanos, y ponen en grave riesgo el derecho a la vida y la integridad f¨ªsica y mental de las personas detenidas. Estos tratos podr¨ªan, en algunas circunstancias, equivaler tambi¨¦n a tortura¡±, ha explicado Nada Al-Nashif, alta comisionada adjunta de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos.
Voces opositores al r¨¦gimen de Ortega han seguido de cerca la presentaci¨®n del informe. La l¨ªder pol¨ªtica Ana Margarita Vijil, detenida en Nicaragua, enjuiciada y liberada hace un a?o junto a un grupo de 222 personas expulsadas hacia Estados Unidos, ha recalcado la importancia del informe para que se conozcan a nivel internacional los cr¨ªmenes cometidos por el r¨¦gimen de Ortega y Murillo. ¡°Me duele much¨ªsimo ver lo que est¨¢ pasando en Nicaragua, pero tambi¨¦n me consuela saber que hay grupos internacionales que est¨¢n haciendo estas investigaciones a profundidad, porque me ratifica mi convicci¨®n de que va a haber justicia en Nicaragua, que se est¨¢n preparando las pruebas¡±, ha dicho Vijil a trav¨¦s de una entrevista telef¨®nica. A ella tambi¨¦n el Gobierno nicarag¨¹ense la ha despojado de su nacionalidad.
Vijil ha denunciado que a¨²n hay al menos 36 presos pol¨ªticos en las c¨¢rceles del r¨¦gimen de Ortega. Adem¨¢s del caso emblem¨¢tico del diputado Rivera, la activista pol¨ªtica ha mencionado el de Eliseo Castro, detenido y que est¨¢ en estado de coma en un hospital nicarag¨¹ense, vigilado constantemente por la Polic¨ªa, y el de Eddie Mel¨¦ndez, que sufre un Parkinson avanzado y est¨¢ preso en la c¨¢rcel de La Modelo, temido centro de torturas del r¨¦gimen. Debido a estos hechos represivos, el experto Simon ha dicho este lunes tras presentar su informe: ¡°Todos sabemos que, en una situaci¨®n tan grave, cada d¨ªa que contin¨²a, m¨¢s se profundizan las cicatrices en la sociedad, y tardar¨¢n generaciones en sanar¡±.