El Gobierno de Milei amenaza la b¨²squeda de los ni?os robados durante la dictadura

Son 300 vidas, 300 historias, 300 identidades a¨²n desaparecidas y a las que las Abuelas de Plaza de Mayo siguen buscando. Son 300 nietos, seg¨²n estiman los organismos de derechos humanos, son los hijos de v¨ªctimas de la ¨²ltima dictadura militar (1976-1983) que a¨²n falta encontrar. Las pol¨ªticas e instituciones p¨²blicas que desde hace d¨¦cadas sostienen esa b¨²squeda en Argentina est¨¢n ahora bajo amenaza de clausura o desfinanciamiento por la administraci¨®n de Javier Milei. Este jueves, organizaciones pol¨ªticas, sociales, sindicales y de derechos humanos se sumaron a la tradicional ronda de las Madres de Plaza de Mayo, frente a la Casa Rosada, para protestar contra las medidas negacionistas del terrorismo de Estado que impulsa el Gobierno ultraderechista.

¡°Hoy estamos ac¨¢ por nuestro pa¨ªs, querido pa¨ªs que est¨¢ siendo desestimado, ofendido por quien tendr¨ªa que cuidarnos, pero va a salir de esta sombra m¨¢s temprano que tarde¡±, dijo Estela de Carlotto, la presidenta de Abuelas, que a sus 93 a?os y con su bast¨®n en la mano derecha volvi¨® a rodear la Plaza de Mayo, remedando la manifestaci¨®n que hace 47 a?os inauguraron las madres que no encontraban a sus hijos secuestrados o asesinados por la dictadura.

¡°Esto que estamos viendo hoy ac¨¢ es un pueblo que no olvida, un pueblo que tiene alma y coraz¨®n con el recuerdo, que dice y asiente que son 30.000 [los desaparecidos] y que adem¨¢s falta encontrar a los que viven, que son los nietos¡±, dijo Carlotto desde el escenario montado en un extremo de la plaza, en una helada tarde de invierno en la ciudad de Buenos Aires. Le respondieron aplausos y el grito de siempre: ¡°?Madres de la plaza, el pueblo las abraza!¡±.

El principal reclamo que est¨¢n realizando las Abuelas de Plaza de Mayo, con la manifestaci¨®n de este jueves y con una solicitada que aspira a conseguir apoyos internacionales, es contra una medida que prepara el Gobierno pero a¨²n no concret¨®: un inminente decreto del Poder Ejecutivo le quitar¨ªa a la Comisi¨®n Nacional por el Derecho a la Identidad (Conadi) la potestad de investigar los casos de apropiaciones de beb¨¦s durante la dictadura y de acceder a los archivos de distintas ¨¢reas del Estado, una pr¨¢ctica ininterrumpida desde hace dos d¨¦cadas.

¡°Volvemos aqu¨ª, a nuestro lugar de protesta, donde nos ayudamos entre nosotras, con la lucha de casi 50 a?os a cuestas por nuestros desaparecidos, por nuestros beb¨¦s robados, con el coraz¨®n abierto, sin violencia, porque el Gobierno nacional est¨¢ destruyendo todo lo que hemos construido para esta b¨²squeda¡±, dice la declaraci¨®n de las Abuelas, que este jueves ley¨® en Plaza de Mayo la diputada Victoria Montenegro, una hija de desaparecidos que recuper¨® su identidad en 2001. ¡°Las pol¨ªticas de derechos humanos de la Argentina son admiradas por todo el mundo, que nos ve como un pa¨ªs que pudo acceder a la verdad con juicios ejemplares, con campos de concentraci¨®n convertidos en espacios para la memoria, para educar a las nuevas generaciones en los valores democr¨¢ticos y para que los cr¨ªmenes atroces cometidos por el Estado terrorista no se repitan¡±, a?ade el texto y destaca: ¡°Ning¨²n gobierno democr¨¢tico, hasta hoy, puso en cuesti¨®n la b¨²squeda de ni?os y ni?as desaparecidas¡±.

¡°No lo podemos permitir¡±

Hasta hoy, las Abuelas de Plaza de Mayo consiguieron recuperar la identidad de 137 nietos. Guillermo Amarilla Molfino es uno de ellos desde 2009, cuando conoci¨® su verdadero nombre tras haber nacido en cautiverio en 1980. ¡°Dentro de esas tres patas de nuestra historia que son memoria y verdad y justicia, nos encontramos con un ataque claro a la memoria. Los procesos judiciales todav¨ªa se est¨¢n sosteniendo y la verdad la sostenemos nosotros, con esta militancia¡±, dice Amarilla Molfino mientras camina por la plaza. ¡°Pasamos por leyes de Obediencia Debida, de Punto Final [normas que limitaban la responsabilidad de los militares en los cr¨ªmenes], por los indultos y con el andar de las Abuelas, de las Madres, de los organismos, se pudo revertir eso. Se tuvieron que sostener esos tres elementos necesarios para formar la historia de nuestro pa¨ªs, nuestra propia identidad como pa¨ªs. Ahora no podemos permitir que se borre todo lo trabajado durante los ¨²ltimos m¨¢s de 40 a?os¡±, avisa.

¡°Busco junto a las Abuelas un hermano o hermana que deber¨ªa haber nacido en noviembre de 1977¡å, cuenta Esteban Lisandro Herrera Zimmerman durante la ronda. ¡°Hoy estamos ac¨¢ defendiendo no solamente la Conadi y su unidad de investigaci¨®n especial, que es una herramienta que permite la b¨²squeda de los nietos y nietas que nos faltan, sino tambi¨¦n todas las pol¨ªticas p¨²blicas sobre derechos humanos. La Secretar¨ªa de Derechos Humanos est¨¢ siendo desmantelada por los despidos, est¨¢n vaciando ¨¢reas completas.¡±

Paula Eva Logares ten¨ªa 23 meses, en 1978, cuando la secuestraron junto con sus padres, quienes permanecen desaparecidos. En 1984 se convirti¨® en la primera nieta recuperada mediante un an¨¢lisis de sangre como prueba de filiaci¨®n. Este jueves, desde la Plaza de Mayo, llama la atenci¨®n sobre el abandono que est¨¢n sufriendo los sitios de memoria, donde acaba de producirse el despido de 50 trabajadores. ¡°Tom¨® mucho tiempo reconocerlos como tales, en distintos juicios y con distintos testimonios... Si eso se cierra porque no hay quien lo mantenga y lo habilite a diario, eso no le da ganancia ni nada positivo al Estado, no hay manera de entenderlo como una cuesti¨®n positiva¡±, dice Logares.

Desmantelamiento general

Adem¨¢s de amenazar con bloquear la b¨²squeda de ni?os apropiados durante la dictadura, en sus primeros meses de gesti¨®n el Gobierno de Milei ya ha desmantelado las principales pol¨ªticas de derechos humanos relacionadas con el terrorismo de Estado. Una combinaci¨®n de recortes de fondos p¨²blicos, despidos de personal y vaciamiento de instituciones ha impactado en programas vinculados con el juzgamiento de los responsables de delitos de lesa humanidad; la desclasificaci¨®n de los archivos militares y policiales; las reparaciones a las v¨ªctimas del terrorismo de Estado; y la conservaci¨®n y expansi¨®n de los memoriales. Un informe realizado por el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) y el grupo de organismos de derechos humanos que integran Memoria Abierta dio cuenta de ese retroceso y detall¨® sus distintas aristas.

Entre otras medidas, el Gobierno ¡°puso fin a la labor del Equipo de Relevamiento y An¨¢lisis documental de los archivos de las Fuerzas Armadas¡± que funcionaba en el Ministerio de Defensa desde 2010 y cuyos aportes la Justicia fueron claves para ¡°conocer estructuras y cadenas de mando del sistema represivo, as¨ª como identificar personal militar involucrado en acciones ilegales¡±, indica el informe. Del mismo modo, en la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) se discontinu¨® el espacio creado para analizar documentaci¨®n de inteligencia vinculada a violaciones a los derechos humanos. Tambi¨¦n fue desarmado el Programa Memoria Colectiva e Inclusi¨®n Social (MECIS), que se dedicaba a filmar las audiencias de los juicios por delitos de lesa humanidad en todo el pa¨ªs. Hab¨ªa sido creado en 2009, a partir un reclamo de la Corte Suprema de Justicia para que se diera publicidad a esos juicios.

¡°La interrupci¨®n de estas pol¨ªticas p¨²blicas¡±, advierten el CELS y Memoria Activa, ¡°ocurre en el contexto de reiteradas declaraciones del presidente de la Naci¨®n, la vicepresidenta [Victoria Villarruel] y diferentes ministros contra el proceso de justicia y en favor de lo actuado por las Fuerzas Armadas¡±.

En Argentina existen cuarenta espacios de memoria donde funcionaron campos de concentraci¨®n de la dictadura. Desde que asumi¨® Milei, la Direcci¨®n Nacional de Sitios y Espacios de Memoria est¨¢ vacante y las obras de infraestructura proyectadas fueron suspendidas. Para el CELS y Memoria Abierta, ¡°el nuevo gobierno promueve una cultura de desprecio al proceso de memoria, verdad y justicia, al mismo tiempo que descarta las lecciones aprendidas en las ¨²ltimas d¨¦cadas y estigmatiza a los actores que la han impulsado y llevado adelante. Como sociedad, este cambio de paradigma busca colocarnos en las ant¨ªpodas de lo que hemos construido desde la recuperaci¨®n de la democracia en 1983, bajo diferentes gobiernos y con el compromiso de todos los poderes del Estado¡±.

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