Madrid, abril de 1963

Mientras le¨ªa Rodaje, me sent¨ªa como si estuviera en una sala de cine asistiendo a la proyecci¨®n de una pel¨ªcula. Una pel¨ªcula estupenda, en blanco y negro, que recrea maravillosamente seis d¨ªas de Madrid, durante los cuales el joven cineasta Pelayo Pelayo ultima los preparativos para filmar su guion La estrategia del amor, Garc¨ªa Berlanga rueda El verdugo y el militante del P...

Mientras le¨ªa Rodaje, me sent¨ªa como si estuviera en una sala de cine asistiendo a la proyecci¨®n de una pel¨ªcula. Una pel¨ªcula estupenda, en blanco y negro, que recrea maravillosamente seis d¨ªas de Madrid, durante los cuales el joven cineasta Pelayo Pelayo ultima los preparativos para filmar su guion La estrategia del amor, Garc¨ªa Berlanga rueda El verdugo y el militante del PC Juli¨¢n Grimau aguarda el desenlace de su sentencia de muerte.

La primera l¨ªnea argumental despliega un amplio abanico de elementos e incidencias relativas al mundo cinematogr¨¢fico: las fricciones con el productor Midas Merl¨ªn ¡ª¡±el mayor estafador del cine, el n¨²mero uno de los falsos progres de mierda¡±¡ª; la interpretaci¨®n del actor Juan Luis Ma?ara, elegido para encarnar al protagonista: ¡°Un personaje perteneciente a la burgues¨ªa m¨¢s rancia, seductor y varonil, dominante pero generoso, soberbio pero agradable¡±; y, sobre todo, las discusiones de ¨ªndole est¨¦tica que se desencadenan, en parte propiciadas por las dudas del propio Pelayo. As¨ª, se discute sobre la mezcla de g¨¦neros, la voz en off, que al productor le parece ¡°como si quisieras juzgar lo que est¨¢ sucediendo¡±, el punto de vista y el foco, los di¨¢logos ¡ª¡±lo que le va a una escena con toques costumbristas es un di¨¢logo picadito, muy picadito¡±¡ª, las im¨¢genes y la naturaleza est¨¦tica espec¨ªfica del cine, frente a otras artes. Se aborda tambi¨¦n el debate muy de ¨¦poca e intergeneracional sobre el realismo, en una escena repleta de rasgos casi bufones. Adem¨¢s, en Rodaje est¨¢ representado el cine como espacio f¨ªsico ¡ªen concreto, el cine Carretas¡ª, muy en la l¨ªnea de la representaci¨®n que hallamos en algunas novelas de Juan Mars¨¦. En ese extenso cap¨ªtulo, Manuel Guti¨¦rrez Arag¨®n plasma la vida oscura y turbia que all¨ª se desarrolla mediante un gran despliegue de personajes, y en diversas escenas que en conjunto revelan el negativo de la vida diurna o exterior. Me ha conmovido recuperar aqu¨ª la silueta de un anciano Azor¨ªn que acud¨ªa asiduamente a la doble sesi¨®n del Carretas, experiencia de la que dej¨® constancia en dos tomitos que re¨²nen su ¡°cr¨ªtica¡± cinematogr¨¢fica: El cine y el momento (1953) y El ef¨ªmero cine (1955).

Igual de estimulante es la visita de Pelayo a los estudios CEA y el relato de la filmaci¨®n de El verdugo, con los retratos del director y los actores ¡ªIsbert, Manfredi¡ª justo cuando se rueda la escena en la que el verdugo novato ¡°se resiste a ejercer su trabajo de dar garrote al condenado a muerte. Y guardias, funcionarios y el director de la c¨¢rcel le presionan para que cumpla de una vez su deber de verdugo¡±. La recreaci¨®n de las figuras de Berlanga y Bardem, con sus discrepancias mutuas, es otro valor a?adido, al que se le suma la cr¨®nica del activismo ¡ªasambleas, protestas, recogida de firmas, la permanente vela en el Colegio de Abogados madrile?o¡ª en defensa del indulto a Juli¨¢n Grimau.

Esta triple acci¨®n que narra Rodaje est¨¢ protagonizada por un estupendo elenco de personajes secundarios, a los que se suma un lujoso despliegue de tipos muy de la ¨¦poca ¡ªcamareros, porteros soplones, estudiantes, periodistas, secretarias¡ª, y se desarrolla en un Madrid recreado con extrema fidelidad a los detalles y repleto de matices, aun por ef¨ªmeros que sean. En conjunto, todo ello nos deja la imborrable sensaci¨®n del fluir de la vida, aunados el marco hist¨®rico-pol¨ªtico-social, la visi¨®n intrahist¨®rica y la epifan¨ªa existencial.

Y eso es lo que esperamos de una buena novela: que nos entregue la expresi¨®n de un tiempo, a la par que un placer est¨¦tico.

Puedes seguir a BABELIA en Facebook y Twitter, o apuntarte aqu¨ª para recibir nuestra newsletter semanal.