¡®Superestrella de las calles¡¯, de Will Hodgkinson: las canciones de Lawrence sobre gente horrible
El genio tr¨¢gico del pop ingl¨¦s, l¨ªder de los grupos Felt, Denim y Go-Kart Mozart, y estrella que nunca fue (ni ser¨¢) recorri¨® junto a un periodista su presente y su pasado
Josep Pla dijo del dramaturgo Alfred Jarry: ¡°Estaba dotado de todo aquello que no sirve para triunfar¡±. La frase es aplicable al m¨²sico ingl¨¦s Lawrence (sin apellido), l¨ªder de Felt, Denim, Go-Kart Mozart y Mozart Estate. Superestrella de las calles, la biograf¨ªa de su vida, nos pinta a alguien tan dotado para el pop como para el autosabotaje, incapacitado por numerosas man¨ªas y minusv...
Josep Pla dijo del dramaturgo Alfred Jarry: ¡°Estaba dotado de todo aquello que no sirve para triunfar¡±. La frase es aplicable al m¨²sico ingl¨¦s Lawrence (sin apellido), l¨ªder de Felt, Denim, Go-Kart Mozart y Mozart Estate. Superestrella de las calles, la biograf¨ªa de su vida, nos pinta a alguien tan dotado para el pop como para el autosabotaje, incapacitado por numerosas man¨ªas y minusval¨ªas, y con una tendencia patol¨®gica a inaugurar empresas catastr¨®ficas, producto de visiones inalcanzables.
El libro narra los ¡°recados¡± que Lawrence realiza a lo largo de un a?o, en Londres y las Midlands, junto al periodista Will Hodgkinson, y que le llevan a un viaje por su pasado y presente, incluso su futuro (el casopl¨®n que se comprar¨¢ cuando sea rico y famoso, por ejemplo). Mediante flashbacks dialogados se traza la inusual, o mejor dicho demencial, singladura del artista.
Sus traumas infantiles contribuyeron a la disfunci¨®n: una madre ad¨²ltera; un padre que le retir¨® la palabra a los 15 a?os; una familia que le dej¨® solo en casa, como en la pel¨ªcula navide?a, solo que para siempre. Al serial killer Jeffrey Dahmer le pas¨® lo ¨²ltimo y al poco tiempo estaba comi¨¦ndose a gente. Lawrence tiene demasiadas fobias alimentarias (¡°el queso le aterrorizaba¡±) para hacer algo parecido, pero no cabe duda de que sus chaladuras van m¨¢s all¨¢ de la saludable ¡°excentricidad inglesa¡± que acu?¨® Edith Sitwell. Para colmo, lleva deseando ser una pop star (peor, convencido de que su d¨ªa llegar¨¢) desde los 12, m¨¢s o menos.
La culpa es en parte de su idiosincrasia. A lo largo de la historia del pop han existido otros puristas dif¨ªciles, pero pose¨ªan un tipo de ambici¨®n y soltura de la que ¨¦l carece. Una figura af¨ªn como Jarvis Cocker, por ejemplo, hace del escenario su casa, mientras que Lawrence aparenta querer irse a su casa de verdad. ¡°No digo que haya decidido conscientemente no ser popular¡±, afirma Cocker, ¡°pero s¨ª que para ¨¦l es secundario, porque lo importante es seguir su propia creatividad¡±.
En el libro, el m¨²sico celebra al escritor noruego Knut Hamsun, porque ¡°prefiere morir de hambre que hacer algo tan banal como buscar un trabajo¡±. Alan McGee, de Creation Records, exm¨¢nager de Felt, confiesa el alivio que sinti¨® al descubrir a Oasis, quienes, al contrario que nuestro hombre y su ¡°absoluta intransigencia¡±, no ten¨ªan reservas a la hora de ¡°venderse¡± a la industria. La tragedia de Lawrence es que quiere ¡°hacer canciones sobre gente horrible que hace cosas horribles, pero de tal forma que [puedan] ser ¨¦xitos¡±. Para ¨¦l, comprometer su arte con pacater¨ªa es inconcebible, y a la vez quiere conquistar un sector que premia lo pacato. Su disco-glam hiperrealista canta a la Inglaterra Todo a Cien, la de la telebasura, los pubs de franquicia y la relative poverty (¡°vivo con 10 libras al d¨ªa¡±) sin suavizar la imagen. Hodgkinson afirma que, aunque White Stilettos in the Sand no es tan distinta del Girls & Boys de Blur, ¡°cuando Lawrence habla de chicas enfundadas en faldas demasiado estrechas que beben chupitos en Lloret de Mar¡±, habla de su propio mundo.
Las raras ocasiones en que Lawrence se ubica para triunfar tiene lugar una cat¨¢strofe ir¨®nica, con desenlace shakesperiano. En 1997, por ejemplo, cuando Summer Smash ten¨ªa todos los n¨²meros para ser canci¨®n del verano, Lady Di se estamp¨® en el t¨²nel parisiense, y EMI abort¨® el lanzamiento del single. A resultas de ello, Lawrence cay¨® en una depresi¨®n brutal, se enganch¨® al caballo y termin¨® en un centro psiqui¨¢trico.
A pesar de las desgracias, el libro se cierra con final feliz (o lo m¨¢s cerca de ello que puede estar la saga): ante un p¨²blico fiel, Lawrence descorre el velo del busto de m¨¢rmol que le realiz¨® un escultor reputado. La pregunta final es pertinente: ¡°Si Lawrence hiciera realidad el sue?o del que llevaba hablando desde su adolescencia, ?en qu¨¦ se convertir¨ªa? ?En un famoso m¨¢s? ?Y para qu¨¦ queremos un famoso m¨¢s?¡±.
Superestrella de las calles. Un a?o con Lawrence
Ibon Errazkin
Contra, 2024
336 p¨¢ginas
21,90 euros