Historias de ¡®playback¡¯ y de ¨ªdolos de adolescentes
La novena edici¨®n del Primavera Pop casi abarrota Vistalegre en la tarde del futbol madrile?o

Que a los 15 a?os todo pasa muy r¨¢pido y en unos d¨ªas se olvida todo lo que se ha hecho en unas horas o en una noche es la ¨²nica explicaci¨®n que se puede encontrar a fen¨®menos como el de las fans y el culto por sus ¨ªdolos. A eso se suma que la palabra adolescencia quiere decir que se carece de casi todo, de recuerdos y de experiencia.
Bendita edad en la que nada parece que deja poso, y as¨ª se explica tambi¨¦n que un encuentro como el Primavera Pop, que promueve desde hace nueve a?os la cadena musical 40 Principales, l¨ªder de oyentes en ese sector de edades, siga teniendo tanto ¨¦xito. El Palacio de Vistalegre estaba pr¨¢cticamente lleno la tarde del s¨¢bado, cuando solo unas pocas horas despu¨¦s iba a jugarse en Lisboa el trascendental partido entre los dos equipos de f¨²tbol m¨¢s importantes de la ciudad.
Quitando esa cita con la Champions, la edici¨®n de 2014 del Primavera Pop fue exactamente igual que la del 2013, y que la de a?os anteriores: un resuelto maestro de ceremonias, Tony Aguilar, locutor estrella desde hace a?os la emisora que organizaba, y un desfile trepidante de estrellas del pop comercial del momento. De la mayor¨ªa de los del a?o pasado, ya casi nadie se acuerda; los que anteayer hac¨ªan llorar y temblar de emoci¨®n a miles de quincea?eras, pasar¨¢n casi todos al olvido dentro de muy poco. Es la magia y grandeza del pop banal e intrascendente: lo ef¨ªmero. Un bucle que se repite, con caras y nombres distintos, desde hace d¨¦cadas.
Donde el a?o pasado estaba, por ejemplo, Auryn, est¨¢ ahora Abraham Mateo. Es la estrella espa?ola del a?o, un p¨²ber de quince a?os natural de San Fernando (C¨¢diz) que no levanta un palmo del suelo pero que en el escenario sus seguidoras ven muy grade, como una especie de Michel Jackson m¨¢s blanquito a¨²n y m¨¢s tierno que un osito de peluche. Un ¨ªdolo destinado a ser olvidado en menos que canta un gallo, en el mejor de los casos, o un juguete roto fotografiado dentro unos a?os en un control de polic¨ªa por conducir pasado de vueltas, a lo Justin Bieber y otros tantos.
El s¨¢bado se llev¨® todos los desmayos, gritos y aspavientos de sus jovenc¨ªsimas seguidoras, muchas de las cuales llevaban desde el martes haciendo guardia en la puerta del palacio para ser las primeras en amarrarse a las vallas de seguridad m¨¢s cercanas al escenario. Un precio que hay que pagar (los 20 euros de la entrada son una peque?ez) para que te salpique una gota de sudor de tu ¨ªdolo y acaso un roce con sus yemas de los dedos.
Cant¨® Abraham primero una dulce baladita, L¨¢nzalo, en plan ac¨²stico acompa?ado de un pianista, cuyos derechos, seg¨²n dijo, ha donado enteramente a Unicef. Y luego, ya en playback total ese baile de estribillo qued¨®n, "sexy se?orrrita" que ha reventado en las radiof¨®rmulas de habla hispana. Lo bueno de un festival como el Primavera Pop es que, como cada artistas solo canta una canci¨®n y generalmente en playback, se aprovechan mucho los cinco minutos que cada uno tiene en el escenario para darlo todo sin atisbo de cansancio. Casi ninguno recurri¨® al sonido directo.
S¨ª lo hicieron Mr. Kilombo, que fue de los pocos que cant¨® dos canciones, Al norte y Qu¨¦ bien se te, Antonio Orozco y Pablo L¨®pez. Asombra lo de Mr. Kilombo, el proyecto personal de un cantautor, Miki Ram¨ªrez, que hasta hace nada era habitual del B¨²ho Real y otros garitos underground del circuito madrile?o canalla. "Alucinante estar aqu¨ª arriba", dijo cuando se vio de frente con un espacio tan grande casi abarrotado.
Tony Aguilar ha captado muy bien el esp¨ªritu del sentimiento de lo que es un fan (o m¨¢s bien una fan) por definici¨®n. "El que no entienda lo que es ser fan, ¨¦l se lo pierde. Yo soy fan de los fans", dijo en una de sus trepidantes presentaciones: "Un fan es alguien que est¨¢ muy agradecido a su ¨ªdolo porque una canci¨®n suya le hace que la vida sea mejor", sentenci¨®.
Debe ser as¨ª, visto lo que se vio la otra tarde en la que miles de ni?as se emocionaban por ver mover los labios a sus ¨ªdolos mientras un apabullante playback de fondo oculta todos los errores posibles, si es que los hubiera.
Y as¨ª pasaron si respiro ni tregua por el escenario la joven chilena Maria Sangana, con 16 a?os, pero toda una estrella con maneras de lolita sexy; Soraya, que es de las pocas que ya ha visto unos cuantos Primavera Pop; la brasile?a Anitta, Mario Jefferson, David Pop, Wayne Beckford, Xuso Jones, Clover, Sophia del Carmen o Sweet California, entre otros muchos. Algunas de las propuestas eran calcadas unas de otras. Hermosos chicos y chicas peinados a la ¨²ltima, exhibici¨®n de m¨²sculo, coreograf¨ªa y gestos similares. Puro espect¨¢culo sin matices, todo a martillo pil¨®n una y otra vez. Clones de los clones.
Pero hab¨ªa un fondo solidario, algo noble entre tanta banalidad. Ayuda en Acci¨®n es la destinataria de parte de los beneficios del macroconcierto enlatado. Tony Aguilar se encarg¨® de recordarlo varias veces a lo largo de las tres horas largas que dur¨®. ¡°Vamos a decirle al hambre que no se meta con los ni?os peque?os¡±, dijo cuando sali¨® con una de las camisetas con el logo de ese monstruo que encabeza la campa?a de la web dilealhambre.org que canaliza esa ayuda. ¡°Ya tenemos 2000 becas de comedor para familias sin recursos¡±, anunci¨® euf¨®rico.
En lo que s¨ª se nota un cambio de paradigma es que casi todos los artistas, aunque espa?oles en su mayor¨ªa, cantaron (o hicieron como) en ingl¨¦s. Por eso son¨® curioso la arenga de Antonio Orozco al finalizar su tanda: ¡°Gracias a emisoras as¨ª, por hacer que la m¨²sica en espa?ol siga arriba¡±. Y, ya repetido de los ¨²ltimos a?os, el recurso a las redes sociales y cifrar en ¨¦xito de los cantantes por el n¨²mero de visitas de sus v¨ªdeos en la red.
Qued¨® espectacular que una de las presentadoras que acompa?¨® a ratos a Tony Aguilar, Daniela Blume, pidiera al p¨²blico que encendiera las linternas de sus m¨®viles y las dirigieran al escenario. De alguna manera record¨® a lo de los mecheros encendidos que se estilaba hace unas d¨¦cadas en conciertos masivos. Era inevitable la alusi¨®n. Cuando termin¨® la rumana Inna, estrella del dance pop europeo y ¨²ltima artista sobre el escenario, que lleg¨® incluso a asustarse cuando dispararon los fuegos de la traca final, Tony Aguilar sali¨® corriendo a animar a que la gente fuera al ver el previsible partidazo: "Viva la unidad del f¨²tbol madrile?o" fue casi lo ¨²ltimo que dijo adem¨¢s de los consabidos deseos de paz y amor, de que ganara el mejor y esa frase rotunda como mejor cierre: "Los 40 te aman".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.