Mas y la sombra de Puigdemont

La renuncia de Artur Mas a la presidencia del PDeCAT hace pensar a muchos medios en divergencias con su heredero, Carles Puigdemont. Jordi Panyella en El Punt Avui titula su art¨ªculo ¡°El hombre contra la papelera¡± y considera que Mas ha hecho otra pirueta pol¨ªtica para ¡°continuar disparando desde otra trinchera pero sin cambiar de bando¡±. Para Xevi Xirgo, finalmente Mas ¡°se ha liberado de CDC, del PDeCAT y la hoja de ruta. Se ha liberado. Y al mismo tiempo, parece, ha mandado un mensaje claro a Puigdemont¡±.

El editorial del Ara considera que Mas se aparta para dejar a los nuevos liderazgos un espacio que aspira a seguir liderando el independentismo. ¡°Lo hace ahora con un mensaje de moderaci¨®n¡±. Esther Vera afirma que con su gesto reconoce que el nuevo artefacto para recuperarse del suicidio convergente es Junts per Catalunya. David Mir¨® cree que ahora se tiene que ver si Puigdemont y los suyos le hacen caso y aceptan trabajar codo con codo con los pedecats ¡°o los marginan¡±.

Mas no se ha arrepentido de haber cedido el paso al alcalde de Girona, reflexiona M¨¤rius Carol (La Vanguardia), ¡°pero es indudable que esta decisi¨®n ha marcado la historia del pa¨ªs (...) Lo mejor de Mas en pol¨ªtica no han sido nunca sus hombres de confianza¡±.

Francesc-Marc ?lvaro define Mas como un converso que siempre sacaba un conejo de la chistera, pero pasados los comicios del 2015 se acab¨® su magia. ¡°Apoy¨® las decisiones de Puigdemont pero, a la hora de la verdad, le recomend¨® evitar la DUI y convocar elecciones, un consejo que el de Girona no sigui¨®¡±. Seg¨²n Antoni Puigverd, ¡°el proceso ha tenido, para el pa¨ªs, las consecuencias que sabemos. A ¨¦l lo convirti¨® en un t¨ªtere de las circunstancias¡±. Pilar Rahola defiende que nadie podr¨¢ decir que Mas no ha puesto el cuello en defensa del pa¨ªs y de sus ideas. El editorial del diario recoge las razones explicadas por Mas de su renuncia. El texto subraya que Mas no cree que sea una buena idea bloquear la escena pol¨ªtica catalana como se ha mostrado dispuesto Puigdemont. Para Enric Juliana, muchas cosas empezaron la noche del 19 de septiembre del 2012 cuando un grupo muy reducido de personas decidi¨® el adelanto de elecciones en Catalu?a con la promesa soberanista. Y en las elecciones del 25 de noviembre, Mas perdi¨® 12 diputados. Seg¨²n Salvador Sostres (Abc) uno de quienes aconsej¨® a Francesc Homs que recomendara a Mas anticipar las elecciones para aprovechar el momento emocional fue el, entonces, director de La Vanguardia Jos¨¦ Antich.

El editorial de El Peri¨®dico contempla la renuncia como un buen reflejo de la situaci¨®n que vive el independentismo. ¡°Por un lado ejemplifica la disyuntiva abierta despu¨¦s del fracaso de la v¨ªa unilateral¡±: mantener la confrontaci¨®n con el Estado, como defiende Puigdemont, o acatar el marco legal y, sin renunciar a la independencia, gobernar (la tesis de Mas y de una parte de ERC). Para Enric Hern¨¤ndez, dimite el padre de una ¡°transici¨®n nacional¡± que ha mutado en regresi¨®n auton¨®mica. ¡°Dimite tambi¨¦n el l¨ªder que defendi¨® los tratos de CDC y F¨¨lix Millet (...), que neg¨® el cobro de 6,6 millones en comisiones v¨ªa Palau (...) Bajo la presidencia del cual se teji¨® la trama del 3%¡±. Emma Riverola afirma que mientras Puigdemont recurre a la imaginaci¨®n, Mas ¡°sorprende con un sobrevenido realismo: no hay mayor¨ªa suficiente para imponer nada¡±.

¡°Mas se va, incapaz de controlar el plan de ruptura de Puigdemont¡±, titula en portada El Mundo. Y comienza el editorial diciendo que ¡°el pol¨ªtico que provoc¨® el caos en el que vive instalada Catalu?a anunci¨® ayer que dejaba la presidencia del PDeCAT con el prop¨®sito de desatascar las consecuencias ¨²ltimas de sus propias decisiones. No parece una actitud muy coherente¡±. Para ?lex S¨¤lmon la duda es si esta decisi¨®n perjudica o fortalece Puigdemont. Javier Oms acaba su perfil de Mas diciendo que ayer escenific¨® su en¨¦sima muerte ¡°De momento, nadie se atreve a enterrarlo¡±.

Bieito Rubido (Abc) define Mas como ¡°hombre menguante¡±. ¡°Llamado a serlo todo, se ha quedado en nada¡±. En el editorial, el diario considera que el simple hecho de que ahora Mas admita que el independentismo no tiene bastante fuerza ¡°es el reconocimiento de un fracaso pol¨ªtico y personal¡±. Luis Ventoso, por su parte, a?ade otra definici¨®n del personaje: una m¨¢quina de equivocarse. La Raz¨®n, en el editorial, considera Mas el gran culpable del desastre.