R¨¦cord de homicidios en Yungay, el barrio donde vive el presidente Boric en Santiago

El due?o de la casona que el presidente Gabriel Boric escogi¨® para vivir en el barrio Yungay, a calles del centro hist¨®rico de Santiago, la puso en arriendo porque se sent¨ªa inseguro. As¨ª lo cuenta la vecina y concejala independiente del municipio, Rosario Carvajal, quien fue una pieza clave para promover la residencia al mandatario y su pareja, Irina Karamanos. Ella, junto con otros vecinos de la pintoresca zona patrimonial, quer¨ªan que la autoridad se trasladara al sector para garantizar una robusta presencia policial. Carvajal vive dentro del per¨ªmetro de cuatro calles cerradas en la que se encuentra la casona presidencial, resguardada por Carabineros las 24 horas del d¨ªa. ¡°Ah¨ª se genera un c¨ªrculo de seguridad. Es como una isla, despu¨¦s viene la barbarie¡±, apunta. El barrio, junto con el Franklin, concentran casi un tercio de los homicidios registrados este a?o en todo el municipio de Santiago, que lidera la estad¨ªstica general de la capital chilena.

Arturo G¨®mez, nombrado en enero fiscal especial para homicidios de la Fiscal¨ªa Local de Santiago, desglosa en su oficina las cifras de la capital: 71 homicidios en 2022, de los cuales once se registraron en Yungay, el barrio de Boric. El a?o pasado hubo 30 asesinatos en el municipio; cinco a?os atr¨¢s, 21; y hace una d¨¦cada, seis, seg¨²n cifras del Centro de Estudios y An¨¢lisis del Delito de la Subsecretar¨ªa de Prevenci¨®n del Delito. M¨¢s de la mitad de los homicidios este a?o los han realizado extranjeros. ¡°Hace 10 a?os podr¨ªa decir que el 99% eran chilenos¡±, asegura G¨®mez, quien ense?a un v¨ªdeo donde dos sicarios colombianos disparan 12 veces a quemarropa a un hombre de la misma nacionalidad en una galer¨ªa comercial del barrio Franklin. ¡°Antes no exist¨ªa esto. Hoy en Chile se mata por un tel¨¦fono m¨®vil¡±, alerta.

Yungay, el primer barrio republicano, es un sector de contrastes. La revista brit¨¢nica Times Out, por ejemplo, lo eligi¨® este a?o como uno de los 10 barrios m¨¢s atractivos del mundo para visitar por ser ¡°el hogar de varios museos fascinantes¡±, a pasos del pulm¨®n verde del Parque Quinta Normal, con una escena gastron¨®mica ¡°prometedora¡±. Su colorida fisionom¨ªa provinciana, distribuida en cit¨¦s y grandes casonas antiguas del siglo XIX dejan en evidencia por qu¨¦ intelectuales y l¨ªderes pol¨ªticos de anta?o hicieron de ese hist¨®rico rinc¨®n su hogar. Sin embargo, detr¨¢s de las fachadas, principalmente en los bordes del sector, hoy operan bandas de crimen organizado que rompieron con la tranquilidad de los antiguos residentes que ahora viven sumidos en la nostalgia.

Jos¨¦ Osorio, de 51 a?os, presidente de la junta de vecinos que representa a 1.600 residentes, recuerda que organizaron la primera protesta por temas de seguridad en 2013. Vieron una intensificaci¨®n en los robos, asaltos y tr¨¢fico de drogas en espacios p¨²blicos. ¡°Eso fue creciendo explosivamente y las autoridades no han desarrollado un mecanismo de control. Nos dec¨ªan que el barrio era una taza de leche. Pero los delitos se han complejizado y ahora se ven armas de fuego y asesinatos por ajuste de cuentas¡±, relata en el restaurante del Espacio G¨¢rgola, ubicado en una de las arterias comerciales del barrio. ¡°El fen¨®meno del subarriendo abusivo es clave. En estas casonas se alquilan habitaciones a familias que viven en hacinamiento y donde, en muchos casos, se ven situaciones delictivas¡±, lamenta.

Para la concejala el problema se origina en los noventa, con el Plan de Renovaci¨®n Urbana (PRU) en Santiago Centro, que levant¨® edificios donde antes hab¨ªa casas para revertir el despoblamiento que sufr¨ªa el municipio. El centro de la ciudad pas¨® de tener 250.000 habitantes a m¨¢s del doble en dos d¨¦cadas. ¡°Eso significa una sobrecarga a los servicios municipales de salud, educaci¨®n y seguridad. No solo irrumpe con la destrucci¨®n violenta del patrimonio, sino tambi¨¦n del tejido social¡±, afirma Carvajal.

El fiscal dice tener claro cu¨¢ndo se produce el punto de inflexi¨®n: ¡°Es el movimiento migratorio, que se ha acentuado en los ¨²ltimos cuatro a?os. Muchos no cumplen sus expectativas de trabajo para sobrevivir y caen en la delincuencia¡±. En el barrio Yungay prima la delincuencia peruana, sostiene. Tienen tomadas cuatro calles donde trafican drogas, portan armas y no hay c¨¢maras de seguridad municipales, pero cuentan con unas propias. En ese cuadrante, a seis manzanas de la residencia de Boric, se han cometido siete homicidios este a?o. Las principales causas son cobros de habitaciones subarrendadas y disputas de territorios para el tr¨¢fico de droga.

Esta semana el Gobierno de Boric encabez¨® la destrucci¨®n de 17.590 armas de fuego, un 28% m¨¢s que en 2021, en el marco de la campa?a Menos Armas, M¨¢s Seguridad.

La alcaldesa de Santiago, Irac¨ª Hassler, flanco de cr¨ªticas de la oposici¨®n por su gesti¨®n, suele defenderse bajo el argumento de que los municipios no est¨¢n a cargo del orden p¨²blico o de Carabineros, pero que s¨ª colaboran con su funci¨®n. Hassler ha solicitado mayor dotaci¨®n de polic¨ªas y ha hecho llamamientos al ministerio del Interior, liderado por Carolina Toh¨¢ (alcaldesa de Santiago entre 2012 y 2016), para que hagan una ¡°intervenci¨®n profunda¡± en el centro de la capital. Este peri¨®dico no pudo realizar una entrevista a la edil para abordar el tema. Carvajal remarca que el problema del barrio no se va a solucionar solamente con m¨¢s polic¨ªas. ¡°Aqu¨ª se necesita una estrategia integral p¨²blico-privada. Como concejala no soy considerada en ninguna mesa de Gobierno para los planes, tampoco convocan a los vecinos¡±, afirma, una cr¨ªtica que comparte Osorio.

La Administraci¨®n est¨¢ impulsando un acuerdo nacional por la seguridad, la creaci¨®n de un Ministerio de Seguridad P¨²blica y en enero arrancar¨¢ un programa piloto en algunas comisar¨ªas de Santiago donde se actualizar¨¢n los equipamientos, entre otras medidas para frenar la mayor preocupaci¨®n de los chilenos. Esta semana, el presidente firm¨® un proyecto que busca recuperar y transformar el eje Alameda-Providencia, el que impactar¨¢ la avenida central de cuatro municipios en el coraz¨®n de la capital. La ministra Toh¨¢ tambi¨¦n adelant¨® un plan para intervenir las ciudades y centros regionales m¨¢s afectados durante el estallido social y la pandemia.

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