La obesidad infantil, un problema de toda una sociedad
Seguir enfrent¨¢ndola sin la mirada multifactorial y su etiolog¨ªa variada, que va desde lo biol¨®gico a lo sociocultural, seguir¨¢ retrasando una soluci¨®n efectiva. Ac¨¢ hay todo un sistema empujando este problema
A mediados de mayo se difundi¨® un estudio realizado en M¨¦xico por International Action Teens, que sentencia que la prevalencia de obesidad en ni?os y j¨®venes se duplicar¨¢ en Latinoam¨¦rica para el a?o 2030. Dentro de lo que se releva en este estudio est¨¢ la presencia de problemas de salud a largo plazo como diabetes, c¨¢ncer y sobre todo una disminuci¨®n importante en la calidad de vida. Adem¨¢s, se?ala que el 24% de los adolescentes no se da cuenta de su estado de obesidad y el 33% de los padres tampoco se percata de esta situaci¨®n en sus hijos. El estudio indica, adem¨¢s, que no existe una...
A mediados de mayo se difundi¨® un estudio realizado en M¨¦xico por International Action Teens, que sentencia que la prevalencia de obesidad en ni?os y j¨®venes se duplicar¨¢ en Latinoam¨¦rica para el a?o 2030. Dentro de lo que se releva en este estudio est¨¢ la presencia de problemas de salud a largo plazo como diabetes, c¨¢ncer y sobre todo una disminuci¨®n importante en la calidad de vida. Adem¨¢s, se?ala que el 24% de los adolescentes no se da cuenta de su estado de obesidad y el 33% de los padres tampoco se percata de esta situaci¨®n en sus hijos. El estudio indica, adem¨¢s, que no existe una detecci¨®n ni tratamientos temprano, lo que agudiza el cuadro ya que, finalmente, un 80% de estos pacientes llega a consultas m¨¦dicas cuando ya han desarrollado enfermedades asociadas a esta condici¨®n.
Este no es un tema nuevo para Chile. De hecho, desde 2011 se implementa en los colegios el programa Elige Vivir Sano precisamente por la preocupaci¨®n del aumento en las cifras de obesidad infantil. Pero hay datos m¨¢s recientes y preocupantes: en marzo de este a?o, la Federaci¨®n Mundial de la Obesidad present¨® ante las Naciones Unidas un informe en el cual se proyect¨® que m¨¢s del 50% de la poblaci¨®n mundial tendr¨¢ sobrepeso o sufrir¨¢ de obesidad hacia 2035, en relaci¨®n con las estad¨ªsticas de obesidad infantil y adolescente que hoy se est¨¢n presentando y que en Latinoam¨¦rica son muy elevadas. En esa l¨®gica, Chile es uno de los pa¨ªses con la mayor prevalencia de obesidad infantil y el Mapa Nutricional Junaeb 2020 establece que esta alcanza el 25,4% de los ni?os y las ni?as.
En mayo de 2022, el Instituto de Nutrici¨®n y Tecnolog¨ªa de los Alimentos (INTA) present¨® los resultados de una investigaci¨®n que les permiti¨® establecer un indicador al que denominaron IROBIC (?ndice de Riesgo de Obesidad Infantil Comunal). Lo interesante de este estudio es que tom¨® datos de diferentes fuentes con indicadores levantados en 2019 -es decir, antes de la pandemia- y consider¨® cuatro dimensiones: salud, nivel socioecon¨®mico, entorno educacional y comunal. Como era de esperarse, la mayor conclusi¨®n fue que la obesidad est¨¢ relacionada con los niveles de pobreza (que suele ser la primera relaci¨®n que se establece com¨²nmente). Dentro de los 10 municipios con mayor IROBIC, La Pintana y Cerro Navia encabezaban la lista y dentro de las 10 con menor IROBIC se encontraron las comunas que tradicionalmente presentan mejor nivel socioecon¨®mico.
Incluso desconociendo estos datos, podemos percatarnos de que la obesidad se apodera ya no tan silenciosamente de nuestra poblaci¨®n, especialmente preocupante en el tramo de nuestras infancias. Lo vemos en los colegios, en los malls, en la calle. Pareciera ser que la mirada sist¨¦mica y multidisciplinaria podr¨ªa aportar de manera importante en este problema. Por eso se destacan iniciativas como el seminario de Abordaje Transdisciplinario de la Alimentaci¨®n y Nutrici¨®n, realizada a fines del a?o pasado por la Vicerrector¨ªa de Investigaci¨®n y Desarrollo (VID) de la Universidad de Chile en la que participaron representantes del Ministerio de Salud, del Ministerio de Agricultura, entre otros, y que tuvo por objetivo reflexionar sobre las causas de la obesidad y las posibilidades para enfrentarla desde una mirada transdisciplinaria y social.
Seguir enfrentando la obesidad infantil sin la mirada multifactorial y su etiolog¨ªa variada, que va desde lo biol¨®gico a lo sociocultural, seguir¨¢ retrasando una soluci¨®n efectiva. Ac¨¢ hay todo un sistema empujando este problema: evidentemente las condicionantes socioecon¨®micas lideran los factores, sin embargo, hay elementos del ¨¢mbito social y emocional que deben incorporarse. La obesidad no propicia la aceptaci¨®n del propio cuerpo y fragiliza y disminuye la autoestima, lo que puede llevar a trastornos del comportamiento alimentario y depresi¨®n. Por otro lado, los contextos no facilitan una vida saludable, por ejemplo, las plazas y parques (antes espacios para moverse y promover el ejercicio) ya no son tan concurridos en los horarios posibles (antes o despu¨¦s del trabajo o la escuela), muchos padres no permiten a sus hijas e hijos ir por temor a que sean v¨ªctimas de alg¨²n hecho delictual o de violencia de alg¨²n tipo.
La incertidumbre, el estr¨¦s, la soledad, la competencia, las exigencias de rendimiento acad¨¦mico, las del mundo social y familiar, las de sus propios desaf¨ªos evolutivos, entre muchas otras realidades que viven los ni?os y ni?as, abren la puerta a la ansiedad y buscan disminuirla a trav¨¦s de la comida con el consiguiente aumento de peso. Esto incrementa el c¨ªrculo vicioso porque las y los ni?os con obesidad se transforman en el blanco de bromas, maltrato y aislamiento, en definitiva, el bullying forma parte de la realidad que experimentan. La obesidad infantil puede traer consigo dificultades en la adaptaci¨®n social, trastornos del sue?o y, por lo mismo, una interferencia relevante en su bienestar.
La publicidad dirigida al p¨²blico infantil y adolescente en relaci¨®n al consumo de productos altos en grasas, calor¨ªas y az¨²cares se siente protegida por cumplir con la ley del etiquetado. Pero esta medida se debe dar conjuntamente con un proceso formativo en el cual se les explique con claridad y honestidad los riesgos de consumir frecuentemente este grupo de alimentos, no solo a ni?os, ni?as y adolescentes, sino que tambi¨¦n a los adultos con los que se relacionan.
La obesidad infantil no es un problema de la casa ni de la escuela: es un problema de toda una sociedad que debe cautelar cada ¨¢mbito de la salud y el bienestar en una esfera integrada que se conecte con todas las otras dimensiones de nuestro desarrollo humano. Debemos educar y educarnos en la conciencia del cuidado, del derecho a una nutrici¨®n sana con pol¨ªticas p¨²blicas que lo garanticen con equidad, sentido y solidaridad. Empezar a considerar nuestros cuerpos como el albergue vital para todo lo que somos y podemos llegar a ser y hacer y, sobre todo, detener a esta obesidad que nos devora.