Qu¨¦date en casa por Navidad
La jungla legal de per¨ªmetros y allegados es opaca e in¨²til. Renunciad a las fiestas por una vez
Ante la manifiesta incompetencia de nuestras Administraciones p¨²blicas para llegar a un acuerdo no digo ya racional, sino al menos inteligible, sobre la gesti¨®n pand¨¦mica de las navidades, tendremos que ser los ciudadanos los que nos comportemos con sensatez en esas fechas se?aladas. Hay una contradicci¨®n evidente entre los par¨¢metros, per¨ªmetros, cu?ados y allegados que dice la norma, por un lado, y las meras recomendaciones de los pol¨ªticos que la han...
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Ante la manifiesta incompetencia de nuestras Administraciones p¨²blicas para llegar a un acuerdo no digo ya racional, sino al menos inteligible, sobre la gesti¨®n pand¨¦mica de las navidades, tendremos que ser los ciudadanos los que nos comportemos con sensatez en esas fechas se?aladas. Hay una contradicci¨®n evidente entre los par¨¢metros, per¨ªmetros, cu?ados y allegados que dice la norma, por un lado, y las meras recomendaciones de los pol¨ªticos que la han redactado. La norma dice que puedes viajar para reunirte con tus allegados, pero sus firmantes te aconsejan no hacerlo. Dice que os pod¨¦is reunir 10 en Nochebuena y otros 10 en A?o Viejo, lo que da al virus 20 oportunidades de contagio, pero sus firmantes recomiendan no hacerlo. Dice que puedes formar aglomeraciones en espacios cerrados sin ventilar como el sal¨®n de tu casa, pero sus firmantes te aconsejan no hacerlo.
Muchos medios han buscado ¡°allegado¡± en el diccionario con la esperanza de entender algo. Vana pretensi¨®n. Por lo que se refiere a esta norma, ¡°allegado¡± significa cualquier persona, cosa o excusa que te sirva para hacer lo que d¨¦ la gana, y esa es una acepci¨®n que no recoge el diccionario. No es f¨¢cil encontrar un cient¨ªfico satisfecho con esa norma acordada fatigosamente en el Consejo Interterritorial de Salud. Lo que los epidemi¨®logos aconsejan se parece mucho m¨¢s a lo que los pol¨ªticos recomiendan que a lo que han firmado.
Este pa¨ªs, que fue capaz de anular la feria de abril y las fallas, de vaciar los teatros y los estadios y de confinarnos a todos en casa salvo para salir a aplaudir al balc¨®n, est¨¢ atado de manos a la hora de suprimir las navidades. Ni el Gobierno ni las comunidades se atreven a tanto, algunos por respetar las tradiciones familiares y todos por salvar la principal campa?a comercial del a?o. Son objetivos comprensibles, pero inoportunos. Nos llevar¨¢n de cabeza a la tercera ola poco despu¨¦s de Reyes, y eso significa m¨¢s muerte y penalidad. Tambi¨¦n implica poner un parche ef¨ªmero a los graves problemas de las empresas y prolongar su sufrimiento durante mucho m¨¢s tiempo del necesario. La ansiedad econ¨®mica mezclada con un vago fervor religioso nos est¨¢n conduciendo a un error garrafal. Uno m¨¢s, por si nos hiciera alguna falta.
La impaciencia de la industria farmac¨¦utica por presentar resultados a los inversores es l¨®gica, pero emite el mensaje enga?oso de que las vacunas ya est¨¢n aqu¨ª, quiz¨¢ la semana que viene, quiz¨¢ en enero. Eso estimula las gl¨¢ndulas salivares del sector financiero, pero implanta en la gente ¨Cy en los Gobiernos¡ª un cuento de hadas donde los excesos de Navidad quedar¨¢n redimidos el mes que viene. Pero no ser¨¢ as¨ª en absoluto. Las dosis que llegar¨¢n ahora no dar¨¢n ni para un 1% de la gente, y necesitamos un 70% para alcanzar la inmunidad de reba?o. La poblaci¨®n occidental se ir¨¢ vacunando a lo largo de 2021, y estaremos inmunizados para las navidades de ese a?o. Por ahora, lo que debes hacer es quedarte en casa.
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