Usos m¨¢s eficientes del hidr¨®geno verde
Espa?a puede ser un actor importante en este tipo de energ¨ªa, pero hay que evitar destinarla a fines equivocados: cuando es posible electrificar, resulta mucho m¨¢s eficiente esta opci¨®n
?ltimamente se han publicado muchos art¨ªculos sobre si la guerra de Ucrania va a acelerar o ralentizar la transici¨®n energ¨¦tica, pero una cosa es segura: el mundo est¨¢ apostando fuertemente por el hidr¨®geno verde, elaborado a partir de la energ¨ªa e¨®lica y solar, para sustituir muchos de los usos actuales de los combustibles f¨®siles. Tenemos que hacerlo tanto para dejar de financiar la guerra como para evitar un cambio clim¨¢tico catastr¨®fico.
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?ltimamente se han publicado muchos art¨ªculos sobre si la guerra de Ucrania va a acelerar o ralentizar la transici¨®n energ¨¦tica, pero una cosa es segura: el mundo est¨¢ apostando fuertemente por el hidr¨®geno verde, elaborado a partir de la energ¨ªa e¨®lica y solar, para sustituir muchos de los usos actuales de los combustibles f¨®siles. Tenemos que hacerlo tanto para dejar de financiar la guerra como para evitar un cambio clim¨¢tico catastr¨®fico.
En la Hydrogen Science Coalition, ofrecemos orientaci¨®n de expertos independientes basada en pruebas sobre el papel del hidr¨®geno en la transici¨®n energ¨¦tica. No estamos vinculados a ninguna gran empresa, ni nos beneficiamos de la industria. Creemos que, dado el actual auge de las inversiones en hidr¨®geno, es fundamental garantizar que se utilice el hidr¨®geno adecuado de la forma correcta.
El mundo ya usa y consume una enorme cantidad de hidr¨®geno, en sectores como el de los productos petrol¨ªferos y la producci¨®n de productos qu¨ªmicos y fertilizantes. En la actualidad, casi todo se fabrica a partir de combustibles f¨®siles sin captura y almacenamiento de carbono, lo que se denomina hidr¨®geno gris. El uso actual del hidr¨®geno gris produce casi la misma cantidad de emisiones que la industria de la aviaci¨®n mundial.
El mundo est¨¢ cambiando lentamente hacia una nueva perspectiva geopol¨ªtica como consecuencia de la necesidad de desprenderse no s¨®lo de los hidrocarburos rusos, sino de todos los f¨®siles, y los pa¨ªses que puedan desplegar m¨¢s energ¨ªa e¨®lica y solar y otras tecnolog¨ªas renovables, se encontrar¨¢n con una ventaja econ¨®mica.
Espa?a tiene una gran ventaja en la producci¨®n de hidr¨®geno verde. Dispone de los recursos energ¨¦ticos renovables necesarios para su producci¨®n, adem¨¢s de contar con grandes empresas energ¨¦ticas con capacidad financiera para invertir en el desarrollo de infraestructuras de hidr¨®geno verde.
Sin embargo, la proximidad de Espa?a a los mercados energ¨¦ticos europeos de Francia, Alemania, Pa¨ªses Bajos y Reino Unido significa que la electricidad renovable tambi¨¦n puede transmitirse directamente al norte a trav¨¦s de interconectores de alta tensi¨®n de corriente continua. Esta es una forma m¨¢s eficiente de exportar energ¨ªa y ser¨¢ mucho m¨¢s lucrativa que el env¨ªo de hidr¨®geno verde.
La inversi¨®n en la transici¨®n energ¨¦tica consiste en sopesar la mejor opci¨®n. Hay riesgos en este nuevo bum del hidr¨®geno, y es importante que Espa?a y otros pa¨ªses tomen las decisiones correctas sobre d¨®nde utilizar el hidr¨®geno verde que se cree.
En primer lugar, es urgente sustituir el hidr¨®geno fabricado a partir de combustibles f¨®siles por el hidr¨®geno verde hecho a partir de energ¨ªas renovables. El hidr¨®geno gris que se utiliza actualmente para las materias primas qu¨ªmicas y los fertilizantes en todo el mundo representa aproximadamente el 3% de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero, una cantidad enorme. Sustituirlo se ha considerado un reto porque el hidr¨®geno verde era mucho m¨¢s caro de producir que el gris, pero la invasi¨®n de Rusia a Ucrania ha hecho que el coste del hidr¨®geno producido a partir de gas f¨®sil sea mucho mayor que el del H2 hecho a partir de energ¨ªa renovable, lo que convierte al hidr¨®geno verde en una soluci¨®n energ¨¦tica relativamente asequible y segura.
En segundo lugar, es fundamental no desperdiciar el hidr¨®geno verde en usos finales equivocados. Recordemos que s¨®lo es un portador de energ¨ªa, no una fuente de energ¨ªa, y que debe producirse con combustibles f¨®siles o con energ¨ªa renovable, lo cual es un proceso muy ineficiente. As¨ª que cuando es posible electrificar directamente algo, esta opci¨®n resulta mucho m¨¢s eficiente. Por ejemplo, no tiene sentido utilizar mucha energ¨ªa renovable para fabricar hidr¨®geno verde para el transporte, cuando se pueden electrificar directamente los coches y autobuses. La investigaci¨®n ha demostrado que se utiliza de dos a tres veces m¨¢s energ¨ªa renovable para alimentar un autob¨²s con hidr¨®geno verde que para alimentarlo directamente con electricidad. Eso significa de dos a tres veces m¨¢s parques e¨®licos y solares. No deber¨ªamos imponer a las comunidades instalaciones de energ¨ªa renovable innecesarias para un transporte por carretera con hidr¨®geno innecesario. Los veh¨ªculos el¨¦ctricos son una soluci¨®n m¨¢s barata y eficiente.
Del mismo modo, se habla mucho de las calderas de hidr¨®geno para la calefacci¨®n, pero las investigaciones han demostrado que para calentar los edificios con calderas que utilizan hidr¨®geno verde se necesita la asombrosa cantidad de seis veces m¨¢s electricidad que para utilizar bombas de calor el¨¦ctricas. Eso supone 6 veces m¨¢s instalaciones e¨®licas y solares, cada una con un complicado proceso de aprobaci¨®n e impactos en las comunidades. No tiene sentido.
Muchas compa?¨ªas de gas abogan ahora por la ¡°mezcla¡± de hidr¨®geno verde en las redes de gas como forma de reducir las emisiones y construir el mercado del hidr¨®geno. Sin embargo, los gasoductos actuales no son aptos para el hidr¨®geno m¨¢s all¨¢ de una mezcla del 20%, y los estudios demuestran que inyectar un 20% de hidr¨®geno verde en los gasoductos de gas natural existentes s¨®lo ahorrar¨¢ alrededor del 7% de las emisiones de carbono. La mezcla de hidr¨®geno con gas natural reduce el contenido energ¨¦tico, lo que significa que se necesita m¨¢s de la mezcla para suministrar la misma cantidad de energ¨ªa al consumidor. Adem¨¢s, existen dudas sobre la seguridad del hidr¨®geno en los hogares. Es explosivo, y cuando el hidr¨®geno se quema en una cocina o caldera de gas, sigue generando emisiones de NOx. Por eso no apoyamos ninguna mezcla de hidr¨®geno con gas. Todos los usos dom¨¦sticos del gas, como la calefacci¨®n y la cocina, pueden ser electrificados, utilizando en gran medida la infraestructura existente, y los usos industriales deben ser electrificados o utilizar hidr¨®geno verde puro.
Espa?a puede ser un actor importante en la nueva econom¨ªa del hidr¨®geno. Pero centrarse en los sectores de demanda de hidr¨®geno equivocados, como la calefacci¨®n y el transporte, ser¨ªa un costoso error que puede evitarse con otras alternativas m¨¢s baratas. Dar prioridad a la electrificaci¨®n, la eficiencia energ¨¦tica y centrarse en el hidr¨®geno verde para las industrias pesadas, reducir¨¢ las emisiones que causan el cambio clim¨¢tico y traer¨¢ puestos de trabajo a Espa?a y a la UE.
David Cebon es profesor de Ingenier¨ªa Mec¨¢nica en la Universidad de Cambridge (Inglaterra).
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