Abdelwahab Meddeb, poeta m¨ªstico e intelectual franco¨¢rabe
El escritor abog¨® por el entendimiento entre Occidente y un Islam inspirado por la Ilustraci¨®n
Son ya varios los escritores magreb¨ªes de graf¨ªa francesa que murieron en el pasado siglo y en nuestros d¨ªas, y que ahora inundan mi memoria: Mouloud Feraoun, Jean Amrouche, Jean S¨¦nac, Malek Haddad, Mouloud Mammeri, Kateb Yacine, Anna Gr¨¦ki, Taos Amrouche, Josie Fanon, Bachir Hadj Ali, Tahar Djaout, Youssef Sebti, Abdelkader Alloula, Rachid Mimouni, Mohammed Dib, Driss Chra?bi o Abdelkebir Khatibi: Unos debido al terrorismo o de pena por ¡°exiliados¡±. Otros, porque a su puerta llam¨® la Parca.
Hoy hay que a?adir al escritor, poeta y ensayista Abdelwahab Meddeb quien, v¨ªctima de un c¨¢ncer de pulm¨®n, cierra sus ojos para siempre en Par¨ªs, a los 68 a?os, el pasado d¨ªa seis.
Profesor de Literatura Comparada en la Universidad de Nanterre, director de la revista internacional D¨¦dale. Y procediendo de una familia de ulemas, interven¨ªa semanalmente en la emisi¨®n Cultures d¡¯Islam, en France Culture, as¨ª como era cronista de Leaders, donde se p¨²blico su ¨²ltimo art¨ªculo, ¡°Je vote¡±, el pasado mes de octubre.
Perteneci¨® a la ¨²ltima generaci¨®n del prestigioso Colegio Sadiki de T¨²nez, creado a finales del siglo XIX, que form¨® estudiantes biling¨¹es en dos lenguas y en dos culturas: el ¨¢rabe y el franc¨¦s, la magreb¨ª y la europea, la isl¨¢mica y la mediterr¨¢nea.
De ah¨ª que, en una hermosa lengua francesa que fluye de la sintaxis ¨¢rabe, en cohabitaci¨®n armoniosa enriquecida por numerosas lenguas -lo que permite interrogar a la modernidad ¨¢rabe pero tambi¨¦n a la occidental-, el poeta imagina encuentros, lazos y di¨¢logos, con Ibn Arabi, Al Bistami, Al Ghazali, Al Hallach, Ibn Jald¨²n, Rum¨ª, Dante, Nerval, Rilke, H?lderlin, Rilke, Artaud¡
Sus textos po¨¦ticos son de inspiraci¨®n m¨ªstica. Recurre a Eulesis y a Suhraward¨ª, fundador de la doctrina iluminativa (israaq) y que fue ejecutado por orden del hijo de Saladino en 1191. As¨ª como se hace eco de las palabras del fil¨®sofo y hombre de ciencia Emp¨¦docles de Agrigento.
Sus obras, escritura-b¨²squeda, donde lo bello se al¨ªa a la preocupaci¨®n por la verdad, deben ser le¨ªdas, aunque puedan ser discutidas por otros interrogantes o an¨¢lisis. Pues, precisamente a esos planteamientos, a esas brechas abiertas -lejos de toda violencia y fanatismo y entre lenguas y razas-, dese¨® convocarnos el escritor.
Tal vez en ese esp¨ªritu de fe -que es confianza- hay que beber, con el fin de evitar la intolerancia y rechazar todos los anatemas en un di¨¢logo donde cada hombre debe profundizar el contacto fraternal con el Otro. Pues el hombre se conoce a medida que hace al Otro un lugar en su identidad. El yo situado en el universo -solidario con otros- es aprehendido como nosotros.
Y el gran mensaje del Islam es que para transformar el mundo, es necesario, previamente, transformarse uno mismo en una ¡°pacificaci¨®n interior¡±. Y as¨ª lo expres¨® el escritor: ¡°El Islam se convierte en una cuesti¨®n que es deber de todos llevar¡±, llamando a su conocimiento por parte del mundo occidental. Y tambi¨¦n en favor de un Islam de las Luces, alejado de una visi¨®n reductora.
Sus obras: Phantasia (1986); Talismano (1987); Les Dits de Bistami (1989. Dichos po¨¦ticos de una de las mayores figuras del sufismo que vivi¨® en Persia entre los siglos VIII y IX); Tombeau d'Ibn Arabi (1987); R¨¦cits de l'exil occidental (1993); Les 99 Stations de Yale (1995); Aya dans les villes (1999).La Maladie de l'islam (2002. Prix Mauriac 2002); L¡¯Exil occidental (2005); Contre-Pr¨ºches (2006); Sortir de la mal¨¦diction. L¡¯Islam entre civilisation et Barbarie (2008); Pari de civilisation (2009); Printemps de Tunis. La m¨¦tamorphose de l¡¯Histoire (2011); Histoire des relations entre Juifs et Musulmans (escrito con Benjamin Stora).
Leonor Merino, arabista, es doctora por la Universidad Aut¨®noma de Madrid y autora de Encrucijada de Literaturas Magreb¨ªes y La mujer y el lenguaje de su cuerpo. Voces literarias del Magreb.
?
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.