Riesgos de la vanidad

Es sabido que la literatura no surge del vac¨ªo, sino que comparte caracter¨ªsticas con los discursos que promueve la sociedad. Y hoy nos hallamos instalados en el descr¨¦dito. A la cr¨ªtica cada d¨ªa se le restringe m¨¢s su prerrogativa, avasallada por la publicidad. Esto deja el campo libre a los autores, que se mueven en la promoci¨®n como agentes de ventas. No le queda otra al novelista, si se quiere mantener en el mercado. De manera que, m¨¢s que obras literarias, el autor elabora productos sobre asuntos que nos conciernen, pero sin importar si ofrece una creaci¨®n digna de cr¨¦dito. Es suficiente la reputaci¨®n del autor.

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Recomienda en Librotea 'La seducci¨®n', de Jos¨¦ Ovejero

Viene a cuento lo anterior tras la lectura de la ¨²ltima obra de Jos¨¦ Ovejero, La seducci¨®n, una novela que, si admite alguna estimaci¨®n como juego, apenas logra sobreponerse para alcanzar un calibre m¨¢s valioso. Incluso el t¨ªtulo resulta desenfocado. Seducci¨®n es un t¨¦rmino atractivo, prestigioso, pero aqu¨ª se habla m¨¢s bien de manipulaci¨®n y vanidad. Hasta el punto de que el mismo manipulado, Ariel Hern¨¢ndez, escritor de ¨¦xito en crisis, egoc¨¦ntrico, c¨ªnico, ya en el pre¨¢mbulo de la decadencia f¨ªsica, es el narrador de la historia, articulada a ra¨ªz de la brutal paliza que unos desconocidos propinan a David, un joven para quien Ariel es una suerte de mentor. David quedar¨¢ lisiado tras la paliza e implicar¨¢ a Ariel en una venganza violenta, a la que el escritor no sabr¨¢ oponerse para no defraudar su admiraci¨®n y, de paso, salir de la r¨¦mora de las horas bajas. La violencia como terapia de la inspiraci¨®n.

Las estrategias del chico son bastantes toscas, pero Ariel es igualmente burdo, y si bien, en tanto que narrador, podemos dudar de su versi¨®n, lo cierto es que la parodia que hace de s¨ª mismo acaba siendo convincente gracias a su exceso de vanidad. Pero ah¨ª termina el calado de su silueta. Pues apenas es m¨¢s que una suma de t¨®picos donde tambi¨¦n la autocompasi¨®n se lleva la palma con dudosas apelaciones al lector de quien quiere pasar por gracioso. La novela, en definitiva, expone con ruidosa exhibici¨®n la frustraci¨®n del halago. Un prop¨®sito que tal vez hubiera exigido menos costumbrismo y mayor esmero en la psicolog¨ªa de los personajes.

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Autor: Jos¨¦ Ovejero.

Editorial: Galaxia Gutenberg (2017).

Formato: versi¨®n Kindle y tapa blanda (224 p¨¢ginas).

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