¡°Hay que ser valiente y afrontar el nazismo como parte de nuestra historia¡±
La bisnieta del compositor defiende no cambiar notas ni textos de las obras del m¨²sico
El esperado Lohengrin en el Liceo no se estrenar¨¢ como estaba previsto el pr¨®ximo d¨ªa 19 debido a las normativas para evitar el coronavirus, pero el teatro intentar¨¢ salvar las ¨²ltimas funciones, programadas en abril. La directora de escena alemana Katharina Wagner (Bayreuth, 1978), art¨ªfice de este Lohengrin amenazado, sabe bien lo que supone estar siempre en el ojo del hurac¨¢n. Ser bisnieta de Richard Wagner y directora del Festival de Bayreuth la convierte en el blanco perfecto de las pol¨¦mica...
El esperado Lohengrin en el Liceo no se estrenar¨¢ como estaba previsto el pr¨®ximo d¨ªa 19 debido a las normativas para evitar el coronavirus, pero el teatro intentar¨¢ salvar las ¨²ltimas funciones, programadas en abril. La directora de escena alemana Katharina Wagner (Bayreuth, 1978), art¨ªfice de este Lohengrin amenazado, sabe bien lo que supone estar siempre en el ojo del hurac¨¢n. Ser bisnieta de Richard Wagner y directora del Festival de Bayreuth la convierte en el blanco perfecto de las pol¨¦micas que agitan cada edici¨®n del emblem¨¢tico festival, creado por su bisabuelo en 1876, que dirige desde 2008, los primeros a?os junto a su hermanastra Eva Wagner-Pasquier, y en solitario desde 2015. Bajo su mando, soplan aires de renovaci¨®n musical y dramat¨²rgica en la verde colina que cada verano recibe a peregrinos wagnerianos dispuestos a gozar la milagrosa ac¨²stica de la Feestpielhaus, el teatro dise?ado y so?ado por Wagner para interpretar sus ¨®peras. Su filosof¨ªa art¨ªstica, marcada por la excelencia musical de Christian Thielemann, director musical del festival, levanta ampollas entre la vieja guardia, pero Katharina Wagner, que iba a debutar en el Liceo la semana pr¨®xima, con Josep Pons en el foso, defiende con convicci¨®n y pasi¨®n las modernas dramaturgias que hoy reinan en Bayreuth.
Pregunta. En 2004 estren¨® en la ?pera de Budapest una puesta en escena que presentaba a Lohengrin como un pol¨ªtico triunfador del Partido del Cisne y a Elsa como una periodista obsesionada por descubrir su origen y sus verdaderas intenciones. ?La nueva producci¨®n para el Liceo tiene algo que ver con la de Budapest?
Respuesta. No, en absoluto. En Budapest la producci¨®n se estren¨® dos d¨ªas antes de que el pa¨ªs entrara en la Uni¨®n Europea y tratamos el tema sobre el escenario, lo que provoc¨® muchas tensiones, pues hab¨ªa ciertos interrogantes sobre el sistema occidental.
P. Hay una imagen rom¨¢ntica y estereotipada de Lohengrin como un personaje que viene a cambiar al mundo sin exigir nada a cambio, salvo que nadie sepa su origen, pero tambi¨¦n tiene muchos lados oscuros, de hecho, es como un pol¨ªtico manipulador que llega a vender sus ideas.
R. Estoy absolutamente de acuerdo con esa apreciaci¨®n y si tiene esa idea, seguramente le gustar¨¢ el planteamiento de la nueva producci¨®n. Muchas veces se ve a Lohengrin como un ser absolutamente positivo frente a Ortrud y Telramund, que son los malos de la historia. Pero tambi¨¦n puedes ver a Lohengrin como una persona dif¨ªcil con segundas intenciones pol¨ªticas y puede ser muy poco amistoso, incluso antip¨¢tico.
P. Y como perfilan a Elsa, un personaje a veces presentado como una muchacha muy ingenua y f¨¢cilmente manipulable
R. El problema con Elsa es la m¨²sica, que refleja una chica so?adora, muy sensible. Nosotros mostramos una Elsa que no ha entendido lo que ha pasado, se siente impotente, y que es tratada injustamente por todos.
P. En sus montajes siempre usa armas de una mujer de teatro, no intenta hacer cine, todo lo que hace tiene un sentido teatral, a veces radical, en la l¨ªnea de colegas como Calixto Bieito, que intenta sacudir al espectador
R. Bueno, no se hace con la intenci¨®n de provocar al espectador. Yo lo que hago es pensar en lo que me interesa a m¨ª hoy en d¨ªa de una obra. Seguramente s¨ª que acabo sacudiendo al espectador, pero esa no es la intenci¨®n, no es lo primero que quiero provocar. La primera pregunta que me formulo al dirigir una ¨®pera es ver si en esa obra hay algo a¨²n de interesante. Y cambiando un poco la perspectiva, pero tomando puntos que ya est¨¢n en la partitura, enfatizamos otros aspectos que ya tiene la obra. Y cuando uno enfatiza cosas distintas la obra acaba siendo distinta.
P. Wagner define los personajes con un instinto teatral y musical que penetra en la psicolog¨ªa de los personajes de forma admirable. La m¨²sica, de hecho, ayuda a definirlos
R. Es verdad, la m¨²sica ayuda mucho, te da un marco. Con Wagner puedes destacar determinados aspectos de un personaje o una situaci¨®n con los motivos que se repiten, o puedes ir en contra de esos leitmotiv y eso resulta muy interesante desde el punto de vista musical.
P. Wagner sigue teniendo un p¨²blico muy conservador que, en aras de la tradici¨®n, no acepta renovaciones dramat¨²rgicas
R. Ese p¨²blico existe, pero hoy en d¨ªa tambi¨¦n en Bayreuth hay p¨²blico nuevo, viene mucho p¨²blico joven al que le gustan nuevas dramaturgias que buscan otros puntos de vista. Las cosas han cambiado y es l¨®gico, porque somos un festival especializado que programa siempre Wagner y por ello es necesario dar entrada a nuevas batutas y nuevas concepciones teatrales. El inter¨¦s, la novedad, est¨¢ en la interpretaci¨®n, por eso viene el p¨²blico e intentamos dar el m¨¢ximo nivel de exigencia art¨ªstica.
P. Han cambiado muchas cosas en Bayreuth gracias a su gesti¨®n, muy valiente al afrontar temas que antes parec¨ªan vetados, como la relaci¨®n del festival con Hitler y el nazismo, o el antisemitismo
Para la gente de mi generaci¨®n, es una obligaci¨®n revisar y hacer frente a ese pasado del nazismo.Katharina Wagner
R. Era absolutamente necesario hacerlo. Para la gente de mi generaci¨®n, es una obligaci¨®n revisar y hacer frente a ese pasado. Est¨¢ ah¨ª y nadie puede negarlo, hay que ser valiente y afrontarlo como parte de nuestra historia.
P. El auge del racismo y la extrema derecha en Europa es caldo de cultivo para la intolerancia, el rechazo y el miedo a lo desconocido. En cierta forma, Lohengrin muestra el miedo a lo desconocido en un contexto violento
R. No necesariamente se trata de racismo. Lo que est¨¢ sucediendo en nuestra sociedad es que hay mucha gente que cuando quiere una cosa la coge, lo quieren todo y al momento, y lo cogen con violencia. Eso es algo que esta ocurriendo y es preocupante, y creo que Lohengrin es una persona de este tipo. Muchas veces la violencia viene del orgullo, no es solo cuesti¨®n de machismo, pensemos que el alcohol genera mucha violencia. No hay solo una explicaci¨®n para estas actitudes.
P. Lo que sorprende en las ¨®peras de su bisabuelo es que permite lecturas pol¨ªticas muy diversas sin necesidad de cambiar nada.
R. En efecto, no hay que cambiar una nota ni cortar el texto. Wagner permite hacer una lectura pol¨ªtica, cierto, pero el concepto de una dramaturgia deber¨ªa encajar en la obra y no al rev¨¦s. Una idea no es un concepto y no podemos imponerlo, sino todo el espect¨¢culo chirr¨ªa. Wagner permite nuevas ideas, pero tienen que encajar en la partitura.
P. ?Qu¨¦ es lo primero que hace cuando afronta la direcci¨®n de una ¨®pera?
R. Nos sentamos juntos, mi colaborador m¨¢s directo, el dramaturgo Daniel Weber (presente en la entrevista) y yo para hablar largamente de la obra y los aspectos que nos parecen m¨¢s interesantes. Pasamos horas y horas discutiendo un aspecto u otro. Es un proceso dificil de explicar, pues a veces nos centramos en algo distinto de lo que vamos a hacer al final. En ocasiones encontramos lo que buscamos en un par de tardes y en otras podemos pasar semanas hasta encontrar el punto de vista que queremos desarrollar, y entonces, tienes que ver la manera de controlar si funciona en cada uno de los puntos de la obra, porque una idea de 30 segundos no es capaz de llenar una ¨®pera de Wagner que dura cinco horas. Una idea no es un concepto de toda la dramaturgia. Daniel Weber siempre me dice que si tienes un concepto es que crees que no puede ser de otra manera Y es cierto, tienes que estar convencido, porque si hay la opci¨®n de que sea de otra manera, seguramente es que tendr¨ªas que seguir ese camino
P. ?C¨®mo se llega a un acuerdo con el director musical en este proceso?
R. El maestro viene a los ensayos, hablamos, vemos si necesitamos una pausa aqu¨ª o all¨¢, en funci¨®n del tempo, y vamos negociando. Pero a veces un director se presenta en el ¨²ltimo momento del proceso y entonces solo puedes decirle, mira, ¨¦sta es la dramaturgia, haga lo que pueda en el foso.
P. Le gusta controlarlo todo?
R. A ver, yo no soy una loca del control, pero el resultado tiene que ser bueno. Y duermo bien cuando s¨¦ que todo funciona a la perfecci¨®n.
P. Se siente una privilegiada llevando el apellido Wagner.
R. Como todo en la vida tiene dos caras. Por un lado es m¨¢s f¨¢cil porque la gente piensa que eres capaz de hacer cosas porque llevas ese apellido, pero tambi¨¦n te exigen m¨¢s y son mucho mucho m¨¢s cr¨ªticos con lo que haces por tu apellido.
P. Al principio de su carrera, los abucheos que recib¨ªa eran especialmente virulentos
R. En Alemania es muy normal que te reciban con gritos y abucheos cuando sales a saludar. Hay v¨ªdeos colgados en You Tube en los que puedes ver m¨¢s de veinte minutos de gritos en Bayreuth al acabar un montaje. De hecho, cuando desde el p¨²blico no te silban quiere decir que algo no va bien. La primera vez que no me abuchearon fue en Las Palmas de Gran Canaria - fue su deb¨² en Espa?a, en 2008, dirigiendo Tannh?user- sal¨ª al escenario y nadie me abucheaba. Y eso me puso muy nerviosa, porque estoy tan acostumbrada a los abucheos que me sorprendi¨® una reacci¨®n tan positiva. Los cantantes me miraban y me preguntaban si me encontraba bien, porque a pesar de los aplausos, ten¨ªa una cara casi descompuesta. No me lo esperaba.
P. La tradici¨®n wagneriana del Liceo, iniciada en 1883 con el estreno de Lohengrin, incluye jornadas hist¨®ricas como el estreno mundial fuera de Bayreuth de Parsifal en 1914 o las visitas de la compa?ia de Bayreuth en 1955 y 2012. ?C¨®mo valora la tradici¨®n wagneriana del coliseo barcelon¨¦s?
R. Me encanta Barcelona y la larga tradici¨®n wagneriana de este teatro. Para m¨ª la tradici¨®n es el inter¨¦s continuado que un teatro muestra por la obra de Wagner. La tradici¨®n no es que se ofrezcan siempre espect¨¢culos tradicionales, sino que se programen a menudo sus ¨®peras, como hace el Liceo.
P. Bayreuth re¨²ne a grandes directores y cantantes, pero tiene fama de ser un teatro que paga poco, lejos de los honorarios que algunos divos obtienen en otros escenarios
R. As¨ª es. Pagamos poco y pagamos por el papel, no por el nombre del cantante que va a interpretarlo. Si un cantante acepta cantar Lohengrin, cobra lo mismo que cualquier otro colega que contratemos, da lo mismo si es famoso o no. Lo mismo sucede con los directores, y as¨ª lo hemos hecho siempre en Bayreuth, mi padre (Wolfgang Wagner) ya lo hacia as¨ª, sino el dinero que tenemos no nos llegar¨ªa para nada. Vienen por el prestigio del festival.
Montajes rompedores y nuevos valores
Bajo la direcci¨®n art¨ªstica de Katharina Wagner, Bayreuth acapara la atenci¨®n medi¨¢tica con montajes rompedores que han levantado ampollas entre la vieja guardia. Su montaje de Trist¨¢n e Isolda, en el que no muere Isolda, condenada a vivir sin amor en el castillo del rey Marke; El anillo del nibelungo dirigido por Frank Castorf, con su feroz cr¨ªtica a la explotaci¨®n petrol¨ªfera y la ambici¨®n desmedida de Wall Street; Lohengrin con el Caballero del Cisne convertido por Hans Neunfelds en cazador de ratas de laboratorio; Tannh?user transformado en una comedia road movie con drag queens por Tobias Kratzer o la irreverente y genial puesta de Los maestros cantores de N¨²remberg firmada por Barrie Kosky, son algunos ejemplos de esa apuesta por las nuevas dramaturgias.
En su pr¨®xima edici¨®n, se estrenar¨¢ una nueva producci¨®n del Anillo a cargo de un joven equipo formado por el director de escena Valentin Schawrz y el director de orquesta Pietari Inkinen. Y se anuncia para el 2002 la actuaci¨®n en el foso de la primera mujer directora en la historia del festival, aunque no han revelado su nombre.