Cosas que no sab¨ªa de Closas
Mucha gente no sabe que el actor era catal¨¢n, y con su familia tuvo que escapar a Francia para salvar el pellejo
He le¨ªdo ¨¢vidamente Alberto Closas, a un paso de las estrellas (C¨¢tedra), la biograf¨ªa del actor escrita por sus sobrinos, Francis Closas y Silvia Farriol. Hay tanta informaci¨®n en las 400 p¨¢ginas del libro que uno no sabe por d¨®nde empezar a recomendarlo. Mucha gente (como yo) no sabe que el actor era catal¨¢n, y con su familia tuvo que escapar a Francia para salvar el pellejo. Estudi¨® franc¨¦s, y con los suyos se exili¨® a Argentina, pero tambi¨¦n (y esto es menos sabido, sobre todo entre gente joven) que se form¨® en interpretaci¨®n con la soberbia Margarita Xirgu, su profesora en Uruguay....
He le¨ªdo ¨¢vidamente Alberto Closas, a un paso de las estrellas (C¨¢tedra), la biograf¨ªa del actor escrita por sus sobrinos, Francis Closas y Silvia Farriol. Hay tanta informaci¨®n en las 400 p¨¢ginas del libro que uno no sabe por d¨®nde empezar a recomendarlo. Mucha gente (como yo) no sabe que el actor era catal¨¢n, y con su familia tuvo que escapar a Francia para salvar el pellejo. Estudi¨® franc¨¦s, y con los suyos se exili¨® a Argentina, pero tambi¨¦n (y esto es menos sabido, sobre todo entre gente joven) que se form¨® en interpretaci¨®n con la soberbia Margarita Xirgu, su profesora en Uruguay. Tampoco sab¨ªa yo que Closas obtuvo su primer triunfo en el Teatro Avenida de Buenos Aires en 1944, 15 minutos de aplausos la noche del estreno de El adefesio, de Alberti, que tambi¨¦n dirigi¨® a Xirgu, como estaba mandado.
M¨¢s cosas que ignoraba: que la misma temporada tuvieron otro gran ¨¦xito de p¨²blico y cr¨ªtica con La dama del alba, de Alejandro Casona y, de nuevo en el Avenida, Yerma y Bodas de sangre: gran velada. A tan pocos int¨¦rpretes les sentaba de perlas el calificativo ¡°elegancia natural¡±. Y que, algo infrecuente en la ¨¦poca, detestaba a don Juan Tenorio, a quien siempre consider¨® ¡°un chulo insoportable¡±.
M¨¢s cosas que deb¨ªa de haber sabido: 1) que Xirgu y Closas interpretaron El zoo de cristal, de Tennessee Williams; 2) que, al parecer, Closas ten¨ªa simpat¨ªas tanto derechistas como republicanas; 3) que Maruja Asquerino (entonces todav¨ªa no se hac¨ªa llamar Mar¨ªa) hizo perder el oremus al actorazo. No fue la primera ni la ¨²ltima, desde luego.
Bastantes saben que Closas regres¨® a Espa?a en 1944 y tuvo el zambombazo de Muerte de un ciclista, con Luc¨ªa Bos¨¦, a las ¨®rdenes de Bardem, pero menos conocen que debut¨® en nuestra escena en la comedia madrile?a con ?De acuerdo, Susana? (1955), de Carlos Llopis, una intriga de guante blanco que protagoniz¨® con Carmen D¨ªaz de Mendoza. Que en la comedia tuvo un ¨¦xito tras otro. Ah¨ª van algunos m¨¢s: Mi adorado Juan (1956), de Mihura, que inaugura la Compa?¨ªa de Comedias Alberto Closas; Una muchachita de Valladolid (1957), de Joaqu¨ªn Calvo Sotelo, con 500 representaciones (para empezar), en la que despunta L¨®pez V¨¢zquez.
Dos musicales italianos: Buenas noches, Bettina (1958), de Garinei y Giovannini, con Mar¨ªa Cuadra, L¨®pez V¨¢zquez, y Closas cantando la obra entera, y El cumplea?os de la tortuga, de G & G, mano a mano con Concha Velasco. Nuevo exitazo en la comedia: Blas, de Claude Magnier, con L¨®pez V¨¢zquez y Lina Canalejas. 1962: Closas inaugura el Marquina como empresario, director y primer actor con Cartas credenciales (J. C. Sotelo); Edici¨®n especial (Hecht & MacArthur); Vivamos un sue?o (Sacha Guitry). Y en 1966, el gran ¨¦xito en el Marquina: Flor de cactus, de Barillet y Gredy, la mejor pareja de Julia Guti¨¦rrez Caba en todas las producciones de Closas, empujando a la fama a Jos¨¦ Sacrist¨¢n. Las colas que daban la vuelta al Lara eran descomunales. Queda mucho por contar del libro: mejor leerlo. ?nica pega: la letra, de un cuerpo un tanto reducido.