¡°No queremos que hablen por nosotras¡±

De los 22 montajes que el Centro Dram¨¢tico Nacional (CDN) tiene previsto estrenar esta temporada, 10 surgen de textos escritos por mujeres y dos m¨¢s son adaptaciones de autores cl¨¢sicos (Shakespeare y Albert Camus) versionadas tambi¨¦n por autoras. Nina Raine y Lola Blasco tienen estos d¨ªas sus nombres ya grabados en la fachada del Teatro Valle Incl¨¢n de Madrid, donde van a compartir los escenarios, apenas separadas por una planta. Tribus, de la prestigiosa dramaturga brit¨¢nica Nina Raine y Siglo m¨ªo, bestia m¨ªa de la alicantin...

De los 22 montajes que el Centro Dram¨¢tico Nacional (CDN) tiene previsto estrenar esta temporada, 10 surgen de textos escritos por mujeres y dos m¨¢s son adaptaciones de autores cl¨¢sicos (Shakespeare y Albert Camus) versionadas tambi¨¦n por autoras. Nina Raine y Lola Blasco tienen estos d¨ªas sus nombres ya grabados en la fachada del Teatro Valle Incl¨¢n de Madrid, donde van a compartir los escenarios, apenas separadas por una planta. Tribus, de la prestigiosa dramaturga brit¨¢nica Nina Raine y Siglo m¨ªo, bestia m¨ªa de la alicantina Lola Blasco, Premio Nacional de Literatura Dram¨¢tica en 2016, son dos de las obras que el CDN ha decidido retomar tras la suspensi¨®n por el confinamiento de la pasada primavera. Tribus es un montaje inquietante y misterioso sobre la incomunicaci¨®n en el que trabajan dos actores sordos, que se estrena este viernes bajo la direcci¨®n de Juli¨¢n Fuentes Reta en la sala grande del Valle Incl¨¢n de Madrid. Siglo m¨ªo, bestia m¨ªa, una obra muy po¨¦tica sobre los descorazonadores y terribles cambios en el mundo, se representar¨¢ a partir del 11 de noviembre en la sala Francisco Nieva del mismo teatro, bajo la direcci¨®n de Marta Pazos. La voz de las dramaturgas tambi¨¦n se escuchar¨¢ estos d¨ªas en el Teatro Espa?ol, donde se estrena un ciclo de siete lecturas dramatizadas de obras de Gald¨®s, dirigidas y versionadas todas por mujeres.

¡°No queremos que hablen por nosotras. En momentos de crisis se necesitan m¨¢s que nunca otro tipo de discursos. Las mujeres venimos a ofrecer nuestra forma de ver un universo lleno de referentes masculinos. La voz de la maternidad y la de los cuidados se tienen que escuchar¡±, asegura Lola Blasco (37 a?os), tras un ensayo de Siglo m¨ªo, bestia m¨ªa, obra protagonizada por Bruna Cus¨ª (Goya a mejor actriz revelaci¨®n en 2018 por Verano, 1993) y en la que ella misma trabaja junto a los seis int¨¦rpretes que conforman el reparto. Es Siglo m¨ªo, bestia m¨ªa, en palabras de Blasco, una cartograf¨ªa emocional de una ¨¦poca. Tres personajes, tres civilizaciones y tres formas de entender la religi¨®n se dan cita en un barco ballenero, desde el que se asiste a un mapa del desamor profundo, la falta de empat¨ªa hacia el diferente y el rechazo hacia otras formas de cultura. ¡°La xenofobia y los fascismos surgen de no aceptar al otro. Estamos en un barco en el que tenemos que remar todos o si no se hunde¡±, explica Blasco que ha querido contar el horror a trav¨¦s de la poes¨ªa. ¡°Hay que mirar a la belleza como a un cabo del barco al que nos tenemos que agarrar todos para salir a flote¡±, a?ade la autora. Fue ella misma la que envi¨® el texto ganador del Premio Nacional de Literatura Dram¨¢tica a la dramaturga Marta Pazos, cofundadora de la compa?¨ªa Voadora.

Pazos, vestida de alegres colores, es una mujer que desprende una actitud positiva y en¨¦rgica, que brinca y salta divertida de un sitio a otro durante los ensayos, y que confiesa que necesita que las im¨¢genes de un texto exploten en su cabeza para poder dirigirlo. Esa explosi¨®n se produjo con Siglo m¨ªo, bestia m¨ªa. ¡°Cada proyecto encierra para m¨ª un misterio que tengo que resolver porque salpica mi vida. El texto es muy doloroso, es un material inflamable que la pandemia me ha hecho entender de manera m¨¢s clara. Es un texto m¨¢s actual que hace un a?o. Estamos en plena tempestad, en la que tenemos que ir haciendo nudos que son nuestras herramientas para colocarnos en la vida y aprender de este momento doloroso¡±, explica la dramaturga, feliz de ver la programaci¨®n de los teatros con nombres de mujeres. ¡°Nuestra mirada est¨¢ en nuestra vida. Cuantas m¨¢s mujeres estemos en los escenarios m¨¢s se naturalizar¨¢ este hecho que esperemos que pronto no se tenga que resaltar. Creo que nuestras voces vienen a aportar diversidad y a mostrar otro espejo de la vida diferente al de los hombres. Faltaba esa mirada revolucionaria que no tiene que ver con el resultado, sino con el proceso. La gran revoluci¨®n es entender que se puede dirigir sin reproducir esquemas patriarcales y que no est¨¢ re?ido en absoluto con alcanzar la excelencia. Estamos en el lugar que nos pertenec¨ªa, gracias a las anteriores generaciones que nos han desbrozado el camino¡±.

Esta ¡°revoluci¨®n femenina¡± en el teatro la siente Juli¨¢n Fuentes Reta como ¡°un cambio muy necesario¡±. ¡°Y que no termine¡±, desea, ¡°porque hemos llegado al agotamiento de las historias del hombre blanco de mediana edad¡±. ¡°Estas nuevas autoras vienen a revolucionar y refrescar el paisaje contando cosas que suceden y que no se cuentan¡±, a?ade Fuentes Reta, que acomete por primera vez un texto de Nina Raine, una autora de 45 a?os perteneciente a una familia de larga trayectoria en la dramaturgia de Gran Breta?a. ¡°Tribus nos conquista por su inteligencia, su luminosidad y tambi¨¦n su oscuridad, y por la manera de abordar a un colectivo, el de los sordos, con el que normalmente no se cuenta. Es un texto inquietante en el que cada personaje guarda profundos fantasmas¡±, asegura Fuentes Reta, que gan¨® el Max a mejor director en 2015 por Cuando deje de llover.

Una bella escenograf¨ªa de diferentes capas y espacios acoge la funci¨®n de Tribus, con un reparto de seis actores, dos de ellos sordos, que ser¨¢ accesible todos los d¨ªas para personas con discapacidad auditiva, ya que el texto se va leyendo en los sobret¨ªtulos. ¡°Nos habla directamente del lenguaje y de c¨®mo la incomunicaci¨®n va creando clanes y grupos. Raine muestra que el lenguaje, ya sea el oral o de signos, es solo una herramienta que puede servir para unir, pero tambi¨¦n para separar¡±.