El refugio de las legiones del general Sertorio

Entre los a?os 82 y 72 a. C., Roma viv¨ªa una contienda civil conocida como guerras sertorianas, y que en Hispania enfrentaba a muerte a los generales Pompeyo y Sertorio. Ahora, expertos del Instituto de Arqueolog¨ªa, de la Universidad de Extremadura y de la Complutense de Madrid han contrastado que tropas de este ¨²ltimo - un militar al que apoyaban las tribus celt¨ªberas y lusitanas- convivieron con los ind¨ªgenas en las calles del asentamiento fortificado levantado a las afueras del actual municipio de Botija, en C¨¢ceres. Por primera vez, se ha confirmado la existencia de un campamento romano dentro de un poblamiento vet¨®n, algo completamente ins¨®lito. ?Su nombre? Posiblemente, Tamusia, pero hasta marzo, cuando se retomar¨¢n las excavaciones, no se tendr¨¢n m¨¢s datos.

De momento, toda la prospecci¨®n se ha realizado combinando cuatro avanzados sistemas de detecci¨®n. Y as¨ª han aparecido las estructuras, adem¨¢s de la ciudad, del acuartelamiento romano adherido a las murallas. De todas formas, el escaso 1% del yacimiento excavado hasta el momento ha dado ya sus frutos arqueol¨®gicos materiales. Se ha recuperado una mezcla de utensilios de la vida cotidiana de la poblaci¨®n ind¨ªgena con objetos que son propios de los militares: proyectiles de honda, ¨¢nforas importadas de Italia, vajillas de mesa y otros adornos personales que son caracter¨ªsticos de los sitios donde han vivido soldados de esa ¨¦poca.

En los a?os sesenta del pasado siglo, se llevaron a cabo las primeras investigaciones en la parte la parte alta de un promontorio formado en la confluencia del r¨ªo Tamuja y el arroyo Verraco. Se trataba de una ciudad celt¨ªbera dividida en dos n¨²cleos adyacentes, uno de 4,7 hect¨¢reas y otro de 2,4, levantados en torno a los siglos IV y III a.C.

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Benidorm, en la ¨¦poca de Quinto Sertorio

El llamado Proyecto Minarq -en el que participa el Instituto Arqueol¨®gico (CSIC y Gobierno de Extremadura) y la Universidad Complutense- investiga ahora este yacimiento denominado Villasviejas de Tamuja, en el que se han empleado avanzadas t¨¦cnicas de teledetecci¨®n no destructivas. Adem¨¢s de georradar, se han utilizado m¨¦todos magn¨¦ticos, tomograf¨ªa el¨¦ctrica e inducci¨®n electromagn¨¦tica, seg¨²n explica Cristina Charro, arque¨®loga de la Junta de Extremadura.

Con estos sistemas, los expertos han logrado ¨Csuperponiendo los resultados- una radiograf¨ªa casi perfecta de lo que oculta el terreno. As¨ª se ha confirmado la existencia de una avenida de siete metros de anchura, que serv¨ªa de espina dorsal de la ciudad, bocacalles de cuatro metros, una gran plaza y numerosas edificaciones para la poblaci¨®n, ¡°ejemplos del urbanismo ind¨ªgena de la ¨¦poca¡±, tal y como detalla Victorino Mayoral, investigador del Consejo Superior de Investigaciones Cient¨ªficas (CSIC).

En uno de los dos centros urbanos del asentamiento, el que se ubica m¨¢s al sur, dos edificaciones llamaron su atenci¨®n: una cuadrangular con tres estancias en torno a un pasillo, de ¨¦poca tardorrepublicana y posiblemente destinada a almacenaje, y otra adherida a las murallas que rodeaban el asentamiento. Esta construcci¨®n estaba dividida en numerosas habitaciones en bater¨ªa de hasta cinco metros de anchura cada una y que correspond¨ªan, seg¨²n los expertos del equipo que dirige el arque¨®logo Pedro Salgado, a barracones militares. ¡°Es la primera vez¡±, a?ade Victorino Mayoral, ¡°que se detecta un cuartel romano dentro de una ciudad vetona¡±. ¡°Los cuarteles para las legiones sol¨ªan establecerse fuera. De hecho, a unos 25 kil¨®metros de Botija est¨¢ documentado el llamado C¨¢ceres el Viejo, que proteg¨ªa la Ruta de la Plata, pero nunca en el interior de un asentamiento urbano¡±.

Los especialistas creen que Sertorio lleg¨® a un pacto con las tribus locales y negoci¨® ¨C¡°los generales eran los aut¨¦nticos representantes de Roma¡±, dice el historiador- construir el cuartel dentro de la poblaci¨®n.

En marzo, los arque¨®logos del CSIC y de la Junta de Extremadura tienen previsto retomar las excavaciones en el asentamiento que, seg¨²n las primeras investigaciones, fue abandonado de forma precipitada y olvidado durante m¨¢s de 2000 a?os. ¡°Estamos muy animados, adem¨¢s de por la completa implicaci¨®n del Ayuntamiento de Botija, por la combinaci¨®n de m¨¦todos no destructivos para determinar las caracter¨ªsticas del yacimiento sin da?arlo. Ahora, ya vamos sobre seguro y a intentar descubrir m¨¢s sobre c¨®mo era la vida de los soldados de Roma y de los ind¨ªgenas en el gran poblado fortificado¡±, concluye Mayoral.