La SGAE reclama ¡°una remuneraci¨®n justa¡± para los creadores por la difusi¨®n de sus obras en internet
La asociaci¨®n se une a otras organizaciones de escritores, periodistas y dem¨¢s artistas ante la pr¨®xima adaptaci¨®n de la directiva europea de derechos de autor a la legislaci¨®n espa?ola
La Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) se une a la petici¨®n de la Conferencia de Asociaciones de Escritores y Escritoras de Espa?a ante el Ministerio de Cultura para que se protejan los derechos de autor de los creadores de contenidos culturales y period¨ªsticos de tal manera que sean ¡°conveniente y equitativamente retribuidos por la circulaci¨®n y distribuci¨®n de su trabajo a trav¨¦s de redes digitales, frente a posiciones puramente mercantilistas¡±. Ambas organizaciones, a las que tambi¨¦n se han sumado las entidades de gesti¨®n de derechos de autor espa?olas, reunidas en Adepi, que incl...
La Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) se une a la petici¨®n de la Conferencia de Asociaciones de Escritores y Escritoras de Espa?a ante el Ministerio de Cultura para que se protejan los derechos de autor de los creadores de contenidos culturales y period¨ªsticos de tal manera que sean ¡°conveniente y equitativamente retribuidos por la circulaci¨®n y distribuci¨®n de su trabajo a trav¨¦s de redes digitales, frente a posiciones puramente mercantilistas¡±. Ambas organizaciones, a las que tambi¨¦n se han sumado las entidades de gesti¨®n de derechos de autor espa?olas, reunidas en Adepi, que incluye las de los artistas visuales, cineastas, m¨²sicos, escritores y otras disciplinas, reclaman que se adapte a la legislaci¨®n espa?ola la directiva europea relativa a los derechos de autor que fue aprobada en 2019 y que Espa?a deber¨ªa aplicar en junio.
¡°Los autores son piezas fundamentales en el ejercicio de la creaci¨®n, pero tambi¨¦n las m¨¢s fr¨¢giles de una cadena que con la irrupci¨®n de las nuevas tecnolog¨ªas corren serio riesgo de quedar sepultadas bajo los intereses de las grandes empresas de la era digital¡±, ha se?alado la SGAE. La asociaci¨®n entiende que escritores o periodistas ¡°merecen recibir una justa e irrenunciable remuneraci¨®n por su trabajo, as¨ª como por la difusi¨®n y presencia de sus obras en los entornos digitales¡±. De esta manera, la entidad se ha adherido tambi¨¦n a la campa?a emprendida por la Asociaci¨®n de Medios de Informaci¨®n (AMI) para que el ministro de Cultura y Deporte, Jos¨¦ Manuel Rodr¨ªguez Uribes, ante la inminente adaptaci¨®n de la directiva europea ¡°reconozca la gesti¨®n colectiva obligatoria y la irrenunciabilidad del derecho de autor¡±. ¡°Solo de este modo se ver¨ªan salvaguardados los intereses de nuestras creadoras y creadores frente a las grandes plataformas tecnol¨®gicas que abogan por romper las reglas del juego europeas en su beneficio¡±, ha concluido la SAGE en un comunicado.
Conscientes de que hay ¡°posturas diferentes¡±, Cultura ha destacado que trabajan sobre tres principios: ¡°Protecci¨®n derechos de autor, que no haya posici¨®n dominante por parte de nadie y favorecer el pluralismo informativo, la libertad de prensa y preservar el ecosistema informativo espa?ol¡±.
La letra de la directiva
La letra de la norma dice que el art¨ªculo 17 insta a los portales que almacenan, organizan y difunden contenidos de usuarios con fines comerciales (por ejemplo, YouTube) a contar con una licencia previa de los creadores de esas obras. Y el 15 otorga a los editores de prensa el derecho a conceder o no el visto bueno a webs con ¨¢nimo de lucro para que compartan ¡°fragmentos significativos¡± de sus publicaciones. El legislador pretende as¨ª responder a las quejas de los autores, indignados con que sus obras lleguen a m¨¢s espectadores y lectores que nunca, pero los ingresos se desv¨ªen hacia otros bolsillos.
Hasta la fecha, se amparaban en que solo deb¨ªan reaccionar a posteriori, cuando se les comunicaba que alojaban un contenido no autorizado. Eran lo que se conoce como ¡°puertos seguros¡±. Ahora, se les exige un rol m¨¢s proactivo. Al menos, deben demostrar que han realizado ¡°los mayores esfuerzos¡± para alcanzar un pacto, impedir r¨¢pidamente el acceso a las obras denunciadas y encargarse de que no vuelvan a estar disponibles.