Ulrich Thomsen: ¡°El creciente aislamiento de las naciones no es una soluci¨®n ante los problemas mundiales actuales¡±
El actor dan¨¦s, grande del cine europeo, encarna en ¡®The Good Traitor¡¯ al diplom¨¢tico Henrik Kauffmann, un personaje poli¨¦drico que logr¨® convertirse en la voz de Dinamarca en la Segunda Guerra Mundial incluso contra su Gobierno
Se enciende la pantalla del ordenador y aparece en las islas Feroe Ulrich Thomsen (Ordese, 57 a?os), uno de los grandes int¨¦rpretes del cine europeo, actor dan¨¦s de t¨ªtulos como Celebraci¨®n, Luces parpadeantes, P.O.V., Hermanos, En un mundo mejor o La comuna y, en su paso por Hollywood, El mundo nunca es suficiente, El peso del agua, El protector o El reino de los cielos. Lleva una barba poblada, melena peinada hacia atr¨¢s y gafas de culo de vaso. Los dos primeros detalles guardan rel...
Se enciende la pantalla del ordenador y aparece en las islas Feroe Ulrich Thomsen (Ordese, 57 a?os), uno de los grandes int¨¦rpretes del cine europeo, actor dan¨¦s de t¨ªtulos como Celebraci¨®n, Luces parpadeantes, P.O.V., Hermanos, En un mundo mejor o La comuna y, en su paso por Hollywood, El mundo nunca es suficiente, El peso del agua, El protector o El reino de los cielos. Lleva una barba poblada, melena peinada hacia atr¨¢s y gafas de culo de vaso. Los dos primeros detalles guardan relaci¨®n con su rodaje actual, la serie Trom. ¡°Las Feroe son ahora un para¨ªso. Incre¨ªble, 100% libre de covid, un lujo. Todo abierto, como en los viejos buenos tiempos¡±, advierte feliz. ¡°Ni mascarillas¡±. Al menos as¨ª estaba el pasado lunes por la tarde, cuando Thomsen se sent¨® a charlar sobre The Good Traitor, en la que, desde luego, se muestra con afeitado apurado y peinado con gomina.
Porque en The Good Traitor, que se estrena hoy en Espa?a, encarna a un personaje poli¨¦drico, fascinante en su complejidad: el diplom¨¢tico dan¨¦s Henrik Kauffmann. Tras un recorrido por Asia ¡ªdonde hasta rob¨® armas y fue esp¨ªa¡ª, Kauffmann fue tan habilidoso a la hora de lograr contactos como amante de la vida de lujos que mitifican el d¨ªa a d¨ªa en las embajadas (langosta, champ¨¢n, martinis...) y acab¨® encabezando la legaci¨®n danesa en Washington. Casado con la hija de un almirante estadounidense, ten¨ªa acceso directo a Franklin Delano Roosevelt. Cuando el ej¨¦rcito nazi entr¨® en Dinamarca, el pa¨ªs se rindi¨® sin luchar, para no ser devastado. Y empezando por el Gobierno dan¨¦s y el rey, todos se postraron ante Hitler. Menos Kauffmann, que en Washington decidi¨® declararse independiente y encabezar una Dinamarca libre y democr¨¢tica. ¡°?Era un patriota? ?Un oportunista? Tal vez todo, pero es cierto que si hubiera vuelto a su pa¨ªs, como reclamaba su ministro, le habr¨ªan ejecutado¡±, explica Thomsen.
Por eso le pidi¨® a Roosevelt que reconociera ese nuevo estatus, que adem¨¢s le servir¨ªa para tener acceso directo a la reserva de oro de Dinamarca, que se almacenaba en Nueva York (cerrado el grifo econ¨®mico desde Copenhague, necesitaba ingresos urgentes). Roosevelt fue reticente ante las peticiones del diplom¨¢tico, hasta que los mismos Estados Unidos entraron en guerra. ¡°Entonces necesit¨® una base en la que repostaran sus aviones y Kauffman cedi¨® la base de Groenlandia, en un acuerdo en el que a sabiendas regala para la eternidad ese terreno a EE UU¡±, recuerda su int¨¦rprete. ¡°Como le echa en cara su esposa, Kauffmann significa comerciante en alem¨¢n. As¨ª pudo seguir con su vida de lujo y a la vez su lucha por la libertad¡±. Sin olvidar su agitada vida sentimental: enga?aba a su esposa con su cu?ada, lo cual provoc¨® un obvio conflicto entre las hermanas. ¡°No quisiera desvelarla, pero hasta su muerte es fascinante¡±.
Con todo lo anterior, ?c¨®mo es considerado Henrik Kauffmann en su pa¨ªs natal? ¡°Sorprendentemente, en Dinamarca no se conoce mucho a Kauffmann. Sabemos su nombre, sabemos que es el responsable de la base estadounidense en Groenlandia, pero poco m¨¢s¡±, reconoce Thomsen. ¡°Nadie conoce su historia en particular. Te pongo un ejemplo. Con el estreno fui a un programa de televisi¨®n dan¨¦s a hablar de la pel¨ªcula y coincid¨ª con la primera ministra danesa, que estaba explicando medidas contra la covid. Conozco a su marido, que es director de fotograf¨ªa, as¨ª que charlamos antes de empezar, y le cont¨¦ que yo estaba de promoci¨®n de un biopic [filme biogr¨¢fico] sobre Kauffmann. Y en sus ojos pude ver que estaba intentando recordar qui¨¦n era Kauffmann a toda velocidad¡±. Tras la correspondiente carcajada, Thomsen cuenta que le ha parecido un personaje fascinante por ¡°su complejidad, y porque a¨²n hoy debatimos sobre si hizo bien o mal¡±.
En lo que no hay debate es en la base. ¡°No tenemos mala relaci¨®n con Estados Unidos¡±, cuenta el actor. ¡°Y no nos preocupa mucho esa base, m¨¢s all¨¢ del resbal¨®n de Trump¡±. Con ese gui?o, Thomsen se refiere al intento de Donald Trump, entonces presidente estadounidense, de comprar el pasado mes de agosto Groenlandia, terreno con bastante autogobierno, pero de soberan¨ªa danesa.
Thomsen acepta reflexionar qu¨¦ es patria o qu¨¦ es ser patri¨®tico, porque Kauffman tens¨® esa definici¨®n: para ¨¦l, Dinamarca como esencia estaba por encima de un Gobierno democr¨¢ticamente elegido, aunque maniatado por los nazis. ¡°Tenemos un problema actual con ese concepto, porque cada d¨ªa los pa¨ªses se a¨ªslan m¨¢s, cierran sus puertas a los inmigrantes. Y el aislamiento creciente no es una soluci¨®n ante el calentamiento global, las guerras, los refugiados, la covid-19...¡±, aduce. ¡°Por eso me parece que la pel¨ªcula es valiente, ya que encara ese momento de dudas de EE UU al final de los a?os treinta, cuando no quiere saber nada de los nazis en Europa. ?Sabes? Soy pesimista, y creo que van a aumentar las repatriaciones de inmigrantes, que no encararemos el problema de origen¡±.
Llega la ¨²ltima pregunta: habiendo sido un actor clave en la carrera de Thomas Vinterberg en pel¨ªculas como Celebraci¨®n o La comuna, ?le ha perdonado que no le llamara para Otra ronda? Desde las Feroe estalla una carcajada a la que seguir¨¢ un rostro serio. ¡°Es mi amigo, y cada vez que me llame ir¨¦. No me puede hacer m¨¢s feliz el recorrido triunfal de su pel¨ªcula, que empez¨® a rodar marcado por una tragedia tan dolorosa¡±.