Juan Ortega, miradas sinceras e introspectivas de un torero artista
El diestro sevillano, ausente de San Isidro, reconoce que en 2022 le ha faltado regularidad: ¡°S¨¦ que hasta ahora no han encajado las piezas¡±
Asegura que le obsesiona torear despacio y materializar delante del toro lo que bulle en su cabeza; que ha descubierto cualidades y defectos propios que desconoc¨ªa, y que es consciente de que la temporada de 2022 no ha sido la que ¨¦l hab¨ªa so?ado.
Habla como quiere torear, pausadamente; se sumerge en largos silencios a la b¨²squeda de la palabra correcta. Afirma que le gusta el an¨¢lisis y la reflexi¨®n. Se muestra sincero, no parece rehuir la realidad, y la imagen que ofrece no es la de un h¨¦roe temerario, sino la de un artista con una extensa vida interior, cuajado de limitaciones, pero ...
Asegura que le obsesiona torear despacio y materializar delante del toro lo que bulle en su cabeza; que ha descubierto cualidades y defectos propios que desconoc¨ªa, y que es consciente de que la temporada de 2022 no ha sido la que ¨¦l hab¨ªa so?ado.
Habla como quiere torear, pausadamente; se sumerge en largos silencios a la b¨²squeda de la palabra correcta. Afirma que le gusta el an¨¢lisis y la reflexi¨®n. Se muestra sincero, no parece rehuir la realidad, y la imagen que ofrece no es la de un h¨¦roe temerario, sino la de un artista con una extensa vida interior, cuajado de limitaciones, pero con el tarro del misterio entre sus manos.
Juan Ortega (Sevilla, 1990) tom¨® la alternativa en septiembre de 2014, y a finales de 2017 solo hab¨ªa participado en 11 festejos. En la temporada siguiente cort¨® una oreja en Madrid, y hasta la Feria de San Miguel de 2021 no pis¨® por vez primera el albero de La Maestranza. Para entonces, ya se hab¨ªa convertido en la gran esperanza a ra¨ªz de una art¨ªstica faena realizada el 30 de agosto de 2020 a un toro sobrero de Parlad¨¦ en la plaza de Linares.
Aquel d¨ªa resucit¨® Ortega, y la afici¨®n descubri¨® a un artista en el que deposit¨® toda su confianza. Desde entonces, ha salpicado los ruedos con gotas de un cautivador coraz¨®n torero, pero no ha acabado de cincelar la gran obra para la que parece llamado.
¡°Me considero la persona m¨¢s ambiciosa como torero, muy perfeccionista, que busca nuevas metas que me cuesta materializarlas en la cara del toro¡±
Este a?o estrena apoderado en la persona de Jos¨¦ Mar¨ªa Garz¨®n (¡°es un trabajador honesto, con una afici¨®n desmedida y con quien conect¨¦ r¨¢pidamente, afirma Ortega), y sigue al lado del torero retirado Pepe Luis Vargas (¡±he conocido a pocas personas con el amor y la pasi¨®n que el maestro profesa al mundo del toro¡±).
¡°Creo que, interiormente, he conseguido metas que a¨²n no hab¨ªa alcanzado en mi vida, como torear m¨¢s despacio de como lo hab¨ªa hecho hasta ahora, pero me ha faltado regularidad¡±, musita el torero.
No est¨¢ de acuerdo con que su actitud en los ruedos haya decepcionado a sus muchos seguidores.
¡°Quiz¨¢, decepci¨®n no sea la palabra correcta¡±, a?ade; ¡°el aficionado se puede sentir as¨ª cuando un torero cambia sus formas, pero si no materializa su toreo por alguna circunstancia lo que produce es enfado¡±.
Rechaza, asimismo, que le haya dominado la apat¨ªa o la falta de ambici¨®n. ¡°No. Me considero la persona m¨¢s ambiciosa en lo que busco como torero; me importan menos otros ¨¢mbitos de mi vida, pero no mi profesi¨®n. Me considero muy perfeccionista que busca constantemente nuevas metas y a quien le cuesta mucho esfuerzo materializarlas delante del toro; pero sigo con la convicci¨®n de que llegar¨¢ un d¨ªa en que lo consiga¡±.
¡°S¨¦ que hasta ahora no han encajado las piezas¡±, continua el torero. ¡°Y no s¨¦ explicar por qu¨¦. Sab¨ªa lo que quer¨ªa hacer delante del toro, pero no me sent¨ªa capaz de conseguirlo. No entend¨ªa la ecuaci¨®n¡±.
Reconoce Juan Ortega que la temporada del 2022 no empez¨® bien para ¨¦l. ¡°Hab¨ªa perdido el aire y el comp¨¢s delante de los toros. No materializaba lo que sent¨ªa en mi interior¡±.
Y recuerda que hubo un detalle que ¨¦l considera fundamental. A mitad del a?o recibi¨® una llamada del ganadero ?lvaro N¨²?ez del Cuvillo, y le dijo: ¡®Sabes lo que est¨¢ pasando? Que no apuestas a las virtudes de los toros; tienes que cambiar de mentalidad porque el toro perfecto no existe¡¡¯
¡°S¨ª, esa llamada la recib¨ª despu¨¦s de torear en Madrid y Jerez y no andaba yo bien. Al principio, no entend¨ª el mensaje, pero era una gran verdad: si te detienes en los defectos y no en las cualidades del toro, tu actitud y el planteamiento de la faena cambian por completo. Ese consejo me ayud¨® mucho, y comenc¨¦ a ver los toros de otra forma¡±.
A pesar de ese sentimiento tan personal, la temporada no acab¨® como se esperaba. Lo cierto es que en noviembre pasado rompi¨® relaciones con su apoderado, Sim¨®n Casas, y, a rengl¨®n seguido, el torero no ha aparecido en los carteles de San Isidro, que confecciona el empresario franc¨¦s.
¡°Me gusta analizar las cosas con serenidad y tomar decisiones en fr¨ªo. Y una de las m¨¢s importantes ha sido el cambio de apoderado. Y debo ser sincero: he estado casi cuatro a?os con Casas y Roberto Piles; ellos me dieron cobijo cuando no ten¨ªa nada. Supieron gestionar mi carrera y me trataron con cari?o. Al final, independientemente de lo que haya hecho en el ruedo, ten¨ªa la necesidad de cambiar de aires, necesitaba otros est¨ªmulos. No hubo conflicto alguno¡±.
¡°No quiero ser un torero de tardes puntuales ni a la b¨²squeda constante del toro bueno¡±
No lo hubo, insiste el torero, pero Juan Ortega no est¨¢ en la feria de Madrid, a pesar de que aclara que mantiene una buena relaci¨®n con el empresario.
¡°No creo que la ausencia de San Isidro est¨¦ relacionada con el curso de la temporada; si me hablaran de otra feria, pero en esa, con tantas corridas¡ Si opino como aficionado, dir¨ªa que hay faenas de toreros que valen m¨¢s que todas las orejas de otros. ?Qui¨¦n tiene m¨¢s m¨¦ritos para estar en Madrid? ?El que ha cincelado una faena que te ha ara?ado el coraz¨®n, o el que ha cortado orejas? No lo s¨¦¡±.
¡°No termino de entender por qu¨¦ no estoy en los carteles de San Isidro. Solo me ofrecieron una corrida y no hab¨ªa hueco para una segunda tarde. Intentamos buscar soluciones, pero desistimos ante la imposibilidad del acuerdo. No hay m¨¢s¡±.
Alguien puede pensar que la cotizaci¨®n art¨ªstica de Juan Ortega ha bajado, y que la inminente Feria de Abril se ha convertido en un complicado cara o cruz para el torero.
¡°Soy realista y mejor que nadie s¨¦ la importancia de Sevilla para mi carrera actual; pero mi gran preocupaci¨®n es mi expresi¨®n, lo que sea capaz de hacer ante el toro, mis miedos y mi ilusi¨®n por alcanzar metas. Eso es lo que busco. No s¨¦ lo que pasar¨¢ en la Feria de Abril, pero mi objetivo es materializar mi sue?o¡±.
Y vuelve Ortega a la perdida regularidad¡
¡°He encontrado muchos v¨¦rtices en mi toreo que ni siquiera sab¨ªa que exist¨ªan, y tambi¨¦n defectos y limitaciones, pero no he hallado la clave, la que me permita hacer realidad mi sue?o, y desconozco si alg¨²n d¨ªa la encontrar¨¦. Mientras tanto, mi reivindicaci¨®n es la regularidad. No quiero ser un torero de tardes puntuales ni a la b¨²squeda constante del toro bueno¡±.
Sea como fuere, el torero confiesa que es un hombre feliz. ¡°Lo soy¡±, apostilla, ¡°porque el toreo ha dejado de ser mi profesi¨®n para ser mi vida. Ese es el objetivo m¨¢s dif¨ªcil, el que m¨¢s esfuerzo me ha costado¡±.
S¨ªguenos en Twitter