La baronesa Thyssen planea abrir un museo en Barcelona

La baronesa Thyssen, Carmen Cervera, opta a abrir un nuevo museo en Barcelona, que albergar¨ªa parte de su colecci¨®n de arte. Para ello ha realizado, junto al fondo de inversi¨®n Stoneweg, una oferta a los propietarios del antiguo cine Comedia, que la est¨¢n estudiando junto a otras ofertas, seg¨²n ha avanzado el diario La Vanguardia y ha confirmado EL PA?S. El edificio, en la esquina de la Gran V¨ªa con paseo de Gr¨¤cia, se convertir¨ªa en un museo que alojar¨ªa parte de su colecci¨®n privada de arte, as¨ª como diversas actividades cultur...

La baronesa Thyssen, Carmen Cervera, opta a abrir un nuevo museo en Barcelona, que albergar¨ªa parte de su colecci¨®n de arte. Para ello ha realizado, junto al fondo de inversi¨®n Stoneweg, una oferta a los propietarios del antiguo cine Comedia, que la est¨¢n estudiando junto a otras ofertas, seg¨²n ha avanzado el diario La Vanguardia y ha confirmado EL PA?S. El edificio, en la esquina de la Gran V¨ªa con paseo de Gr¨¤cia, se convertir¨ªa en un museo que alojar¨ªa parte de su colecci¨®n privada de arte, as¨ª como diversas actividades culturales.

El proyecto es uno de los finalistas para el uso del edificio. Sus propietarios, las familias Pla y Plan¨¤s, han transmitido que la decisi¨®n a¨²n no est¨¢ tomada, que no se tomar¨¢ en un plazo breve y que hay otras propuestas culturales que tambi¨¦n est¨¢n sobre la mesa y que se est¨¢n considerando. Los due?os han recibido una decena de opciones sobre el posible uso del inmueble.

¡°Estoy muy ilusionada con este proyecto, con el que puedo dejar un legado a la ciudad que me vio nacer¡±, contaba esta ma?ana Carmen Cervera a EL PA?S. Especificaba que, de salir adelante, el museo contendr¨ªa ¡°obras del siglo XIX, XX, XXI¡±, adem¨¢s de intercambios recurrentes con museos nacionales e internacionales. ¡°Dentro del espacio, aspiramos a que haya programas de educaci¨®n muse¨ªstica, y proyectos con las ¨²ltimas innovaciones tecnol¨®gicas¡±, sosten¨ªa.

El Ayuntamiento de Barcelona mantiene que al tratarse de una ¡°relaci¨®n entre privados¡± poco tiene que opinar sobre la operaci¨®n de instalar en el antiguo cine Comedia un museo Thyssen. Aun as¨ª, fuentes del Consistorio destacan: ¡°Estamos en contacto con la propiedad y la acompa?amos para garantizar que las propuestas se ajusten a la calificaci¨®n [equipamiento cultural] y uso del edificio y con una vocaci¨®n cultural. Confiamos que habr¨¢ un desenlace beneficioso para la ciudad¡±.

Fuentes del Museo Nacional Thyssen-Bornemisza aseguran a EL PA?S que el proyecto es una ¡°iniciativa privada¡± de Cervera, sin relaci¨®n con la sede madrile?a. La baronesa Thyssen ya ha levantado museos en M¨¢laga, Sant Feliu de Gu¨ªxols (Girona) y Andorra, donde se exhiben parte de sus cuadros.

¡°Llevamos tiempo detr¨¢s del proyecto y creemos que puede ser un impulso importante para la ciudad¡±, dice, por su parte, Jaume Sabater, Director General del fondo Stoneweg, muy implicado durante los ¨²ltimos a?os en actividades culturales de la regi¨®n, como el Museo Palau de Martorell o el hub cultural en la f¨¢brica God¨® i Trias en L¡¯Hospitalet de Llobregat. Tambi¨¦n es el grupo inversor detr¨¢s de la Copa Am¨¦rica de vela que se celebrar¨¢ en verano en la capital catalana. ¡°No podemos adelantar mucho m¨¢s porque el proyecto no est¨¢ firmado, y queremos ser muy prudentes. Pero es una realidad que existe esta voluntad. Hay posiciones en las que se avanza, y seguimos trabajando en ello¡±, explica Sabat¨¦.

¡°Tengo el museo de Sant Feliu, el de M¨¢laga, el de Andorra, mi propia sala en el Thyssen con mi colecci¨®n...¡±, enumeraba Carmen Cervera en una entrevista con este diario en octubre de 2023. La baronesa Thyssen lleva d¨¦cadas desarrollando un negocio paralelo al del Museo Thyssen de Madrid. Inaugura sedes en distintas partes de Espa?a en las que despliega parte de su colecci¨®n personal. Centenares de obras que no est¨¢n bajo la protecci¨®n del Estado. Es decir, que no forman parte del contrato de alquiler millonario (97,5 millones de euros durante los pr¨®ximos 15 a?os por el alquiler de su colecci¨®n de arte y la de su hijo Borja) que firm¨® en febrero de 2022 con el entonces ministro de Cultura, Miquel Iceta, y que acab¨® con m¨¢s de dos d¨¦cadas de negociaciones.

A falta de m¨¢s detalles, la coleccionista siempre ha defendido que el lugar en el que iba a exponer sus obras de pintura catalana de los siglos XIX y XX es el museo de Sant Feliu de Guixols, cerca de la residencia donde falleci¨® el bar¨®n. Este edificio neocl¨¢sico del siglo XVII dispone de 3.000 metros cuadrados, de los cuales 1.500 se destinan actualmente a la exposici¨®n permanente con unas 120 piezas. El resto, hasta completar las 350 que cedi¨® Cervera, est¨¢n en sus almacenes. Si saldr¨¢n de este lugar para llenar las salas un futuro museo en el centro de Barcelona es, por el momento, una inc¨®gnita.

En mayo de 2021, la baronesa y la Diputaci¨®n provincial de Alicante tambi¨¦n anunciaron la posibilidad de que se abriera un espacio en esta ciudad del Levante en 2022. Finalmente, no se lleg¨® a un acuerdo.

La ¨²nica sede que Cervera ha abierto en el extranjero es una sala de unos 300 metros cuadrados en la planta baja del antiguo Hotel Valira, en la parroquia de Escaldes, un edificio construido en los a?os 30 del siglo pasado, de Andorra. Este lugar, gestionado por su sobrino Guillermo Cervera (Barcelona, 1969), alberga 26 fondos de la colecci¨®n personal de Cervera.

Con m¨¢s de un mill¨®n de visitas anuales, el Thyssen-Bornemisza de Madrid es uno de los museos m¨¢s visitados de Espa?a. Creado en 1992, exhibe la mayor parte de la colecci¨®n privada reunida durante siete d¨¦cadas por la familia Thyssen-Bornemisza. Tras la muerte en 2002 del bar¨®n Hans Heinrich von Thyssen-Bornemisza, su viuda, Carmen Cervera, sigui¨® su propia colecci¨®n privada, ya como baronesa Thyssen.

La mayor parte de la colecci¨®n privada de Carmen Cervera se exhibe en el museo nacional Thyssen-Bornemisza de Madrid, que pertenece al Estado, con quien la Baronesa Thyssen firm¨® en 2022 un acuerdo de alquiler de sus obras que pueden verse en un anexo del edificio del paseo de la Castellana de Madrid. Ese acuerdo tiene una duraci¨®n de 15 a?os, por el cual el Estado paga alrededor de seis millones de euros anuales.