Una escuela para perros donde aprenden los humanos
Los arquitectos Enrique Espinosa y Lys Villalba han construido un lugar de convivencia entre animales y personas donde se ensaya c¨®mo recuperar el ecosistema
En los 300 metros cuadrados de la escuela Educan, en Brunete (a 30 kil¨®metros de Madrid), conviven perros y lechuzas, cern¨ªcalos y gorriones. Tambi¨¦n, claro, monitores y due?os de animales. Y es dif¨ªcil saber qui¨¦n est¨¢ aprendiendo m¨¢s.
El edificio, una nave de distribuci¨®n flexible y f¨¢cilmente alterable ideada por los arquitectos Lys Villalba y Enrique Es...
En los 300 metros cuadrados de la escuela Educan, en Brunete (a 30 kil¨®metros de Madrid), conviven perros y lechuzas, cern¨ªcalos y gorriones. Tambi¨¦n, claro, monitores y due?os de animales. Y es dif¨ªcil saber qui¨¦n est¨¢ aprendiendo m¨¢s.
El edificio, una nave de distribuci¨®n flexible y f¨¢cilmente alterable ideada por los arquitectos Lys Villalba y Enrique Espinosa, (de Eeestudio) es un marco verde, luminoso y l¨²dico prefabricado localmente a partir de seis contenedores que llegaron por mar, desde China.
Lys Villalba define al propio inmueble como multiespecie. ¡°Mientras parejas de perros y humanos practican agility o IPO en las dos aulas principales, las aves anidan en las fachadas-nido de la planta superior, con las vistas y orientaciones id¨®neas para ellas¡±.
Pero esa convivencia resulta f¨¢cil gracias al cuidado de los arquitectos ¨Cideando y orientando nidos especiales para cada una de las especies¨C y convirtiendo la escuela en una suma de aulas flexible. Es precisamente la convivencia de los animales lo que hace de esta escuela un centro educativo tambi¨¦n para adultos y, sobre todo, un espacio que cuida del ecosistema. ?C¨®mo lo hace? Facilitando la convivencia de las especies. Fomentando que aniden y convivan al pon¨¦rselo f¨¢cil. ¡°As¨ª, las peque?as rapaces se alimentan de roedores, manteniendo el equilibrio con cultivos y otras plantas¡±, cuenta Vilalba.
Explica que los murci¨¦lagos habitan en las letras de la fachada sur y limpian el aire de los mosquitos, que adem¨¢s de molestar a todos, portan algunas enfermedades caninas y, sin embargo, forman parte del ciclo de polinizaci¨®n de flores y plantas en los campos colindantes.
A este ecosistema planificado y dise?ado para que se autorregule se sumaron, extempor¨¢neamente, los gorriones que han anidado en los agujeros circulares que hay en las aristas de los contenedores.
Pero este ecosistema es mucho m¨¢s que un grupo bien avenido de animales y una nueva nave que recicla contenedores. Aqu¨ª los perros son los protagonistas, y el suelo est¨¢ adaptado a sus patas con c¨¦sped artificial homologado para el entrenamiento canino.
El hormig¨®n de las aulas para explicar teor¨ªa est¨¢ fabricado con ¨¢ridos y cantos rodados de r¨ªo. Y las paredes est¨¢n forradas de aislante de alta absorci¨®n ac¨²stica para facilitar la convivencia.
El agua de lluvia se recoge en los bebedores para perros y aves y los elementos de control bioclim¨¢tico como las contraventanas perforadas o las persianas enrollables se utilizan manualmente, a la carta.
En este proyecto hay estandarizaci¨®n ¨Cel uso de paneles industriales de chapa met¨¢lica¨C y precisi¨®n ¨Cen las juntas de madera laminada¨C. Hay trabajo artesano ¨Cen las entregas entre materiales o en las l¨¢mparas y bancos¨C y soluciones industriales.
Est¨¢ el peso de la cimentaci¨®n y el muro de hormig¨®n y la ligereza de los elementos met¨¢licos ensamblados en seco.
En la escuela Educan todos conviven. Y el lugar, el edificio y quienes lo utilizan se benefician, todos, de esa convivencia. Villalba apunta que ¡°Educan es tambi¨¦n un experimento que muestra que las arquitecturas agr¨ªcolas, habitualmente consideradas menores, pueden ser lugares de exploraci¨®n e innovaci¨®n¡±.