Nadal contra la historia
El espa?ol busca ser el m¨¢s joven en completar el Grand Slam y el primero en ganar seguido la tierra de Roland Garros, la hierba de Wimbledon y el cemento de EE UU
La semana previa al Abierto de Estados Unidos reflej¨® el ¨¢nimo de los favoritos: escondidos bajo el techo de las pistas cubiertas, muchos maldijeron las negras nubes y la lluvia, que impidi¨® que se acostumbraran a las circunstancias de juego y convirtieron cada jornada en un penoso ejercicio de espera. Hoy, cuando arranca el ¨²ltimo grande del a?o, ya bajo un sol inclemente, ninguno de los mejores tenistas del mundo llega en plenitud de facultades.
"Mucha gente, incluido yo, creemos que ahora es la mejor oportunidad de Nadal para ganar el Abierto", afirma John McEnroe antes de que arranque el torneo. "Algunas veces hay siete semanas entre Wimbledon y el Abierto de Estados Unidos y otras veces hay ocho. Este a?o hay ocho semanas, y eso le permite estar cinco semanas parado. Parece una situaci¨®n prometedora para ¨¦l". El n¨²mero uno, sin embargo, se enfrenta a un reto may¨²sculo: ganar el ¨²nico grande que le falta, convertirse a los 24 a?os en el m¨¢s joven que nunca complet¨® el Grand Slam y ser el primero que doma en el mismo a?o la tierra de Roland Garros, la hierba de Wimbledon y el cemento de Nueva York.
Es Nadal contra la historia. Hay una circunstancia que delata sus pensamientos: el espa?ol se est¨¢ entrenando 2h15m todos los d¨ªas. Eso se?ala que sus golpes no est¨¢n a¨²n donde quiere, especialmente el rev¨¦s. Eso habla de su deseo. Y eso, cuando arde Nueva York bajo m¨¢s de 30 grados de temperatura, es una mala se?al para el ruso Gabashvili, contra el que debutar¨¢ probablemente el martes.
No es el espa?ol el ¨²nico favorito que cavila y cavila alrededor de sus preocupaciones. Ausente Juan Mart¨ªn del Potro, el campe¨®n lesionado, Roger Federer argumenta frente al mundo que si se ha atrevido a imitar a Guillermo Tell en un anuncio (el saque en lugar del arco, una pelota por flecha y un cubo por manzana), es porque est¨¢ sobrado de confianza (y cuando hay que anunciar eso, es porque no sobra). Andy Murray, el n¨²mero cuatro, se felicita porque Alex Corretja le acompa?e durante esta semana, porque no tiene entrenador, despedido como est¨¢ Miles Maclagan. Y Novak Djokovic, a¨²n a la b¨²squeda de su saque perdido, observa con desconfianza un cuadro por el que amenazan Robin Soderling, Marin Cilic, Andy Roddick, Marcos Baghdatis o Nicolay Davydenko.
Esto es el Abierto de Estados Unidos. Este es el ¨²ltimo grande del a?o. Y esto es, bajo el calor del d¨ªa o el fr¨ªo de la noche, un batallar continuo: un pu?ado de favoritos luchan por un ¨²nico t¨ªtulo.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.