El Madrid de Laso, de la excelencia al precipicio

Hace tan solo 63 d¨ªas, en el Gimnasio Ibirapuera de S?o Paulo, el Real Madrid de baloncesto se coronaba campe¨®n del mundo tras derrotar en un enfrentamiento a doble partido al Bauru brasile?o para completar un rep¨®ker in¨¦dito en la historia del club blanco. El colof¨®n a la temporada perfecta coincid¨ªa, sin descanso, con el inicio de un nuevo curso que el conjunto de Laso afrontaba bajo un h¨¢ndicap: la imposibilidad de mejorar la perfecci¨®n. Sin embargo, en un santiam¨¦n, la excelencia no solo no se ha mantenido sino que ha quedado contra las cuerdas en el escenario continental tras la peor secuencia competitiva de los madridistas en el ¨²ltimo lustro. Con nueve derrotas en los 19 partidos disputados desde el 26 de septiembre (el a?o pasado tardaron siete meses en sumar esa cifra), los campeones de todo est¨¢n al borde del precipicio en la Euroliga despu¨¦s de un periplo ciclot¨ªmico de ¨¦xtasis, descompresi¨®n, exceso de confianza y angustia sobrevenida.

Tras perder el pasado viernes en el Pionir de Belgrado ante el Estrella Roja y sumar su quinta derrota en siete partidos europeos, el Madrid est¨¢ obligado a vencer los tres partidos restantes del grupo (Fenerbah?e, Bayern y Estrasburgo) para no quedar fuera del top 16; un batacazo hist¨®rico que le convertir¨ªa en el primer campe¨®n que cae eliminado en la primera fase de la competici¨®n en su defensa del t¨ªtulo. Incluso ganando los tres encuentros, existen dos combinaciones que descabalgar¨ªan a los blancos de la pelea: si empatan en la cuarta plaza s¨®lo con el Estrasburgo y pierden la diferencia de puntos con los franceses, que defender¨¢n un +7 en Madrid; y en caso de cu¨¢druple empate a cinco victorias con Estrasburgo, Estrella Roja y Khimki (en todos los triples empates se contabilizar¨ªa la suma de victorias-derrotas entre los implicados y el Madrid quedar¨ªan tambi¨¦n fuera). ¡°Estamos en una situaci¨®n l¨ªmite¡±, reconoce sin remilgos Laso. ¡°En la Liga estamos bien y hemos ganado los seis ¨²ltimos partidos de forma consecutiva, pero en la Euroliga no estamos compitiendo como nos gustar¨ªa. Sab¨ªamos que est¨¢bamos en un grupo duro y complicado y ahora nos quedan tres partidos sin margen de error para alcanzar el pase al top 16¡±, explica el entrenador de los pentacampeones.

En la Liga Endesa, el Madrid comparte el segundo escal¨®n clasificatorio junto a Bar?a y Baskonia tras ganar al Bilbao Basket (92-99) y se maneja con solvencia liderando las estad¨ªsticas de puntos a favor (91,5 de media), rebotes (38,5), asistencias (19,3) y valoraci¨®n (109,5). Sin embargo, en la Euroliga, se ha quedado sin defensa ni argumentos. Los blancos son el tercer mejor ataque del torneo (con 84,4 puntos de media por partido); pero encajan m¨¢s puntos que nadie en la competici¨®n (86,1). La peor marca de los 24 participantes, muy lejos de los 66,4 del Lokomotiv, los 68,7 de Olympiacos o los 69,14 del Bar?a. Los sucesivos problemas f¨ªsicos de Rudy, Taylor, Llull y Thompkins; el desenfoque de Maciulis y Nocioni, encargados de la cuota de car¨¢cter; la ausencia de un p¨ªvot especialista en el rol defensivo; y las estrecheces de una rotaci¨®n reducida a 10 piezas por la aportaci¨®n testimonial de Doncic (clave en Miribilla con 15 puntos, 6 rebotes y 22 de valoraci¨®n), Radoncic y Hernang¨®mez dan forma a las tribulaciones del Madrid. El juego coral deviene a menudo en individualismo, abuso del lanzamiento desde el triple y confusi¨®n entre el v¨¦rtigo y las prisas. Apenas Felipe y Ay¨®n se acercan a sus mejores prestaciones.

¡°La evoluci¨®n va a depender de la adaptaci¨®n de los nuevos¡±, explicaba Nocioni hace dos semanas. ¡°Los que ya est¨¢bamos tenemos el deber de mostrarles el camino, el lugar en el que est¨¢n y c¨®mo hay que hacer las cosas. Hay que dar al proyecto la energ¨ªa y la contundencia que tuvimos el a?o pasado. En el baloncesto todo suma¡±. Pero la suma no cuadra por el momento. La plantilla ha sufrido cinco modificaciones con respecto a la temporada pasada, alguna de ellas involuntaria. Taylor lleg¨® para suplir la baja de KC Rivers, que no pudo resolver el problema de su pasaporte; Doncic, la joya de la cantera que se pas¨® el verano machac¨¢ndose en California a las ¨®rdenes del especialista en tiro Mike Penberthy, se hizo con la plaza de Campazzo, cedido al Murcia de Katsikaris; Thompkins y Hern¨¢ngomez llegaron para aportar musculatura, rebote y puntos para mejorar la decadente producci¨®n de Bourousis y Mejri; pero nadie cubri¨® la vacante dejada por el intenso y carism¨¢tico Marcus Slaughter, que acept¨® en verano la mareante oferta del Dar¨¹??afaka turco y dej¨® al equipo sin el especialista que apretaba las tuercas en defensa en los momentos cr¨ªticos.

¡°Toca bajar el culo atr¨¢s para volver a ser lo que fuimos¡±, proclam¨® Llull tras caer ante el Khimki. ?l fue uno de los cinco internacionales espa?oles ¨Cjunto a Sergio Rodr¨ªguez, Rudy Fern¨¢ndez, Felipe Reyes y Willy Hern¨¢ngomez-, que, con el lituano Jonas Maciulis disputaron la final del Eurobasket y, sin descanso, se subieron hace dos meses a un vuelo transatl¨¢ntico de 11 horas rumbo a Brasil, donde el Madrid prepar¨® la final del Mundialito en apenas cuatro entrenamientos. La falta de descanso y la ausencia de pretemporada lastra desde entonces a los pentacampeones que ahora apelan al esp¨ªritu de la selecci¨®n espa?ola en el Eurobasket para rearmarse en el fun¨¢mbulo. "Que conf¨ªen en nosotros. Vamos a empezar a hacer cosas nuevas para disfrutar como en a?os anteriores", anunci¨® Carroll tras ganar en Miribilla.