Maniqu¨ªes en las gradas en la ¨²nica liga en juego
El preparador f¨ªsico Franc Balaguer cuenta c¨®mo el f¨²tbol sigue en Bielorrusia
Antes de irse a casa, varios jugadores del Dynamo Brest, de Bielorrusia, le preguntan por su familia en Espa?a. ¡°?C¨®mo lo llevan, est¨¢n bien?¡±. Franc Balaguer (Borriol, Castell¨®n; 37 a?os) asiente y se mete en el coche. Apenas sale para hacer la compra en el s¨²per y se va del trabajo a casa, de la ciudad deportiva a su hogar en Brest. Balaguer es el preparador f¨ªsico del equipo, todav¨ªa en competici¨®n porque la liga bielorrusa es la ¨²nica que se mantiene en pie entre las 51 bajo el paraguas de la ...
Antes de irse a casa, varios jugadores del Dynamo Brest, de Bielorrusia, le preguntan por su familia en Espa?a. ¡°?C¨®mo lo llevan, est¨¢n bien?¡±. Franc Balaguer (Borriol, Castell¨®n; 37 a?os) asiente y se mete en el coche. Apenas sale para hacer la compra en el s¨²per y se va del trabajo a casa, de la ciudad deportiva a su hogar en Brest. Balaguer es el preparador f¨ªsico del equipo, todav¨ªa en competici¨®n porque la liga bielorrusa es la ¨²nica que se mantiene en pie entre las 51 bajo el paraguas de la UEFA. El presidente del pa¨ªs, Alexandr Lukashenko, asegura que no hay muertes por el coronavirus y que como precauci¨®n ¡°hay que lavarse las manos con vodka¡±. ¡°En los ¨²ltimos d¨ªas se ha visto un incremento de mascarillas por la calle, pero no tantas, nada alarmante. Se podr¨ªa decir que la gente hace vida m¨¢s o menos normal por aqu¨ª¡±, resuelve Balaguer.
El t¨¦cnico se inici¨® en el Villarreal y pas¨® luego por el Muangthong United de Tailandia como preparador y tambi¨¦n como director de metodolog¨ªa de la escuela del Castell¨®n. Llegar al Dynamo Brest era la oportunidad de estar en un equipo que estar¨ªa en la previa de la Champions. Pero el coronavirus le ha girado el rumbo, sobre todo porque esperaba encontrarse con Patri, su mujer, en un par de meses al acabar ella sus estudios. Ya no sabe cu¨¢ndo podr¨¢n verse. ¡°Lo vemos imposible, las fronteras estar¨¢n cerradas, la cuarentena¡¡±, admite.
¡°?Hay que lav¨¢rselas primero!¡±, le dijeron hace unos d¨ªas cuando tendi¨® la mano a un trabajador de la ciudad deportiva. Ahora, nada m¨¢s llegar, les hacen pasar a todos por el cuarto de ba?o de la entrada y despu¨¦s se las roc¨ªan con l¨ªquido antis¨¦ptico. ¡°Y en caso de que alguien note el menor s¨ªntoma de fiebre o malestar, avisa al doctor y se queda en casa¡±, cuenta Balaguer, que desvela que el utilero y un jugador se tomaron un par de d¨ªas como precauci¨®n pero ya est¨¢n a pleno rendimiento. ¡°Nos entrenamos normal¡±, se?ala, ¡°y, de momento, los jugadores no est¨¢n contrariados con la idea de jugar porque se lo toman como una oportunidad para ellos, para que esta liga sea m¨¢s conocida¡±. Y a?ade: ¡°Esto puede ser beneficioso para todos, en especial para aquellos jugadores j¨®venes con gran proyecci¨®n. As¨ª que mientras consideren que es seguro para nuestra salud, seguiremos saliendo ah¨ª a intentar hacer disfrutar a la gente que nos ve e intentar que se olviden un poco del mal trago que est¨¢ viviendo todo el mundo¡±.
Han desaparecido los tenderetes, los puestos improvisados y hasta el payaso que amenizaba el tiempo antes de los partidos en los aleda?os del estadio. ¡°En casa la afluencia de p¨²blico ha ca¨ªdo dr¨¢sticamente. Nuestro estadio tiene una capacidad de 10.200 personas y en el ¨²ltimo encuentro creo que no llegamos ni a 600, cuando el a?o pasado pr¨¢cticamente todos los partidos rondaba los 9.000 espectadores¡±, especifica Balaguer, que tambi¨¦n explica que al p¨²blico se le toma la temperatura antes de entrar en el campo. ¡°Supongo que la sociedad est¨¢ concienciada¡±, conviene. Por eso el club, como respuesta y para que los partidos no parezcan a puerta cerrada, ha decidido poner maniqu¨ªes en las gradas.