Irureta: ¡°Yo marqu¨¦ a Pel¨¦¡±

A Javier Irureta (Ir¨²n, 72 a?os), los jugadores del Racing, al que entrenaba en la temporada 1993-94, le regalaron en la cena de final de curso una foto enmarcada de Pel¨¦. ¡°M¨¢s de una vez les hab¨ªa insistido en lo mismo. Cuando alguno se sent¨ªa intranquilo con alg¨²n rival al que ten¨ªa que vigilar, le repet¨ªa que yo una vez hab¨ªa marcado a Pel¨¦ y no nos hab¨ªa metido ning¨²n gol¡±, recuerda hoy el exfutbolista y ext¨¦cnico. Para Jabo, el brasile?o era el jugador al que m¨¢s admiraba. ¡°Cuando era ni?o, mis ¨ªdolos eran de Ir¨²n, del Real Uni¨®n. No hab¨ªa visto otra cosa¡±, afirma. Fueron sus primeros h¨¦r...

A Javier Irureta (Ir¨²n, 72 a?os), los jugadores del Racing, al que entrenaba en la temporada 1993-94, le regalaron en la cena de final de curso una foto enmarcada de Pel¨¦. ¡°M¨¢s de una vez les hab¨ªa insistido en lo mismo. Cuando alguno se sent¨ªa intranquilo con alg¨²n rival al que ten¨ªa que vigilar, le repet¨ªa que yo una vez hab¨ªa marcado a Pel¨¦ y no nos hab¨ªa metido ning¨²n gol¡±, recuerda hoy el exfutbolista y ext¨¦cnico. Para Jabo, el brasile?o era el jugador al que m¨¢s admiraba. ¡°Cuando era ni?o, mis ¨ªdolos eran de Ir¨²n, del Real Uni¨®n. No hab¨ªa visto otra cosa¡±, afirma. Fueron sus primeros h¨¦roes, aquellos del Stadium Gal, a unos metros de la frontera con Francia: ¡°Hab¨ªa un futbolista que se llamaba Del Campo, que ven¨ªa de la Real Sociedad, un interior peque?o y habilidoso; Gallastegi, con el que combinaba muy bien; y Zapirain. Subieron de Tercera a Segunda. Eran categor¨ªas muy duras, y para m¨ª era lo ¨²nico que pod¨ªa ver, cuando no hab¨ªa televisi¨®n¡±, revive.

Pero Jabo le¨ªa los peri¨®dicos. ¡°Y me maravillaba saber que hab¨ªa un jugador brasile?o de 17 a?os que hab¨ªa sido la figura del Mundial de Suecia 58, y lo hab¨ªa ganado tan joven. Me parec¨ªa algo excepcional¡±, afirma. Irureta se enrol¨® en el Atl¨¦tico de Madrid en 1967. ¡°Entonces descubr¨ª que el mundo era mucho m¨¢s grande de lo que yo hab¨ªa visto hasta entonces¡±, cuenta. Se le abri¨® otro panorama. Se encontr¨® en aquel vestuario a gente muy diversa. ?l, que era miembro de una familia numerosa de siete hermanos, y que hab¨ªa compaginado el f¨²tbol con la carrera de ingeniero t¨¦cnico, se encontr¨® con personajes indescriptibles, como aquel compa?ero que repart¨ªa tarjetas de visita en las que debajo de su nombre figuraba como ¡°ingeniero industrial¡±, para ligar, a pesar de que no hab¨ªa pasado de la educaci¨®n primaria.

All¨ª coincidi¨® tambi¨¦n con Luis Aragon¨¦s, Adelardo y Armando Ufarte, que hab¨ªa emigrado con sus padres a Brasil en 1954 y comenz¨® a jugar al f¨²tbol en las categor¨ªas inferiores del Flamengo. ¡°Debut¨® all¨ª en Primera Divisi¨®n, despu¨¦s se fue al Corinthians y otra vez volvi¨® al Flamengo, con el que gan¨® varios t¨ªtulos. Sol¨ªamos hablar del f¨²tbol brasile?o, y yo le dec¨ªa que para m¨ª Pel¨¦ era el mejor, aunque Ufarte me contaba maravillas de Garrincha. Le encantaba, porque era un regateador¡±.

A Irureta le decepcion¨® que Pel¨¦ no pudiera brillar en el Mundial de Inglaterra, en 1966, en el que cay¨® lesionado ante Portugal, pero todav¨ªa no sab¨ªa que se iba a cruzar en su camino. ¡°Fue en el homenaje a Feliciano Rivilla [un partido de despedida tras 10 a?os en el Atl¨¦tico]¡±, dice sobre aquel encuentro del 17 de septiembre de 1969 en el Vicente Calder¨®n. ¡°Jugamos contra el Santos, el equipo de Pel¨¦. Yo sal¨ª como titular y el m¨ªster, Marcel Domingo, me dijo que yo le marcar¨ªa¡±, rememora Irureta. El exguardameta franc¨¦s que dirig¨ªa al Atl¨¦tico, apunta Jabo, insist¨ªa mucho en los marcajes. ¡°Usted s¨ªgalo de cerca¡¯, me dec¨ªa. Y luego, durante el partido, me gritaba: ¡®?De cerca, Irureta, de cerca!¡¯. Perdimos, 3-1, pero Pel¨¦ no marc¨® ning¨²n gol¡±, se enorgullece el exfutbolista. Aquel encuentro impresion¨® a Jabo, que m¨¢s de 50 a?os despu¨¦s, a¨²n lo recuerda. ¡°Me sent¨ª afortunado por jugar contra ¨¦l. ?Y qu¨¦ fuerte era! Ten¨ªa unos m¨²sculos enormes. ?C¨®mo saltaba! S¨®lo con estar cerca de Pel¨¦ estaba contento¡±. En aquel partido tambi¨¦n se qued¨® Javier Irureta con la estampa del extremo zurdo de aquel Santos, Jon¨¢s Eduardo Am¨¦rico, conocido como Edu. ¡°Cuando entrenaba al Depor, hablaba de ¨¦l con Mauro Silva y con Donato. Me contaban que era un espect¨¢culo verle lo que hac¨ªa con la pelota en la playa, ya mayor, y con una barriga enorme¡±.

Irureta ingres¨® en el Atl¨¦tico de Madrid en el que jugaban futbolistas muy carism¨¢ticos como Adelardo o Luis Aragon¨¦s, a los que tambi¨¦n admir¨® durante toda su carrera, pero ¨¦l se decantaba m¨¢s por el f¨²tbol brasile?o. ¡°Luis era un t¨ªo con car¨¢cter ganador, como demostr¨® despu¨¦s cuando entrenaba. Como futbolista era un gran recuperador en medio campo y adem¨¢s ten¨ªa una gran vena goleadora. Pas¨® de ser mi compa?ero a mi jefe, cuando en mi ¨²ltima temporada antes de fichar por el Athletic, destituyeron a Juan Carlos Lorenzo y le pusieron a ¨¦l como entrenador¡±, recuerda.

Ya retirado, en su domicilio de Getxo, Javier Irureta aprovecha los horarios que le brinda la desescalada del confinamiento para pasear con su mujer hasta Las Arenas o hasta el faro de Arriluze, pero sigue atento a todo lo que pasa en el f¨²tbol. ¡°?Que si es mejor Messi que Pel¨¦? Son diferentes¡±, apunta. ¡°Pel¨¦ era un tipo de jugador con una contextura f¨ªsica impresionante. Era complicado tirarle. Messi tiene otras cualidades en un f¨²tbol que es mucho m¨¢s dif¨ªcil de jugar que el de antes. Leo tiene todo el equipo en la cabeza¡±.