El Madrid tira lo m¨ªnimo

Tres meses y un confinamiento despu¨¦s, el Madrid se enchuf¨® de nuevo a la competici¨®n con una versi¨®n de bajo consumo. Ning¨²n dato lo expres¨® mejor que su n¨²mero de remates: apenas seis, cinco de ellos a puerta, la cifra m¨¢s baja en toda su Liga. Sin embargo, aplic¨® el mazo que en ocasiones no encuentra. No necesit¨® m¨¢s. En los dos primeros intentos ya hab¨ªa abatido al Eibar, que a partir de la media hora de juego se sinti¨® derrotado por m¨¢s que en la segunda parte se le abriera una rendija y su e...

Tres meses y un confinamiento despu¨¦s, el Madrid se enchuf¨® de nuevo a la competici¨®n con una versi¨®n de bajo consumo. Ning¨²n dato lo expres¨® mejor que su n¨²mero de remates: apenas seis, cinco de ellos a puerta, la cifra m¨¢s baja en toda su Liga. Sin embargo, aplic¨® el mazo que en ocasiones no encuentra. No necesit¨® m¨¢s. En los dos primeros intentos ya hab¨ªa abatido al Eibar, que a partir de la media hora de juego se sinti¨® derrotado por m¨¢s que en la segunda parte se le abriera una rendija y su estad¨ªstica de disparos alcanzara los nueve.

Hasta este domingo, el m¨ªnimo de tiros blancos en el torneo dom¨¦stico proced¨ªa de sus peliagudas visitas al Pizju¨¢n (siete) y Getafe (9), ambas resueltas con victoria. Esta vez, interpret¨® que, al inicio de un calendario extenuante, economizar energ¨ªas (Lucas V¨¢zquez estar¨¢ entre dos y tres semanas de baja por una lesi¨®n muscular en el s¨®leo de la pierna derecha) era una prioridad si las circunstancias lo permit¨ªan, como as¨ª fue, lo que no debi¨® entusiasmar a Zidane, que desliz¨® en rueda de prensa su fastidio por ello. ¡°Igual nos relajamos¡±, dijo.

Nadie sufri¨® m¨¢s la escasez de disparos que Benzema, que por primera vez en este curso en Liga se qued¨® sin lanzar a porter¨ªa. El partido retrat¨® su momento. El franc¨¦s sigui¨® cosiendo el juego, particip¨® en los tres tantos de su equipo (incluso cuando se atropell¨® con el bal¨®n, como en el 1-0), pero la diana le qued¨® demasiado lejos. El delantero, m¨¢ximo goleador del equipo (19) y segundo en la tabla de Pichichi (14), solo acumula tres desde mediados de diciembre, un descenso que, sin embargo, no deval¨²a su aportaci¨®n al equipo. El franc¨¦s se encuentra en una de esas fases en las que, si fuera un jugador de baloncesto, ejercer¨ªa m¨¢s de base que de escolta killer, m¨¢s de Campazzo que de Carroll. Todos le siguen buscando.

Los tantos que ¨¦l no acumula en los ¨²ltimos meses los va compensando el conjunto blanco con su veta coral: contra el Eibar anotaron dos defensas (Marcelo y Ramos) y un centrocampista (Kroos). Ning¨²n vestuario de los cinco grandes torneos europeos suma tantos goleadores diferentes (19) en sus competiciones caseras, tres m¨¢s que Barcelona y Liverpool, seis que el PSG, y ocho que Atl¨¦tico, Juventus y City.

Los siete pases de Bale

Con el contador de goles de Benzema atascado, al Madrid no le queda otra que tirar del fondo de armario de medios y defensas, que se han apuntado la mitad de tantos del equipo, porque el resto de delanteros no chutan. Si sumamos todas las competiciones, Ramos lleva ocho; Kroos, seis (su r¨¦cord en Espa?a); Modric, cinco; y Casemiro, cuatro. El tiempo decidir¨¢ si este argumento resulta suficiente para levantar un trofeo, pero de momento es la ¨²nica salida hallada al apag¨®n de los hombres de arriba a la hora de perforar el marco contrario.

La esperanza y el gran margen de mejora es Hazard, que volvi¨® tras la lesi¨®n y se asoci¨® bien con Benzema y Marcelo partiendo desde la izquierda, aunque tambi¨¦n se le not¨® algo afligido cuando recibi¨® un golpe en la primera parte. Los blancos siguen echando de menos sus 15 goles de media con el Chelsea.

Del resto de atacantes que desfilaron este domingo en Valdebebas, poca cosa. Rodrygo fue rescatado de la trastienda (desde enero hab¨ªa disputado 14 minutos en Copa), y su paso result¨® muy silencioso. Suyo fue uno de los dos disparos a puerta que no acabaron en gol, y nada m¨¢s. Bale ¨²nicamente dio siete pases buenos en la media hora que disput¨®, y todos ellos fueron con defensas y centrocampistas. Vinicius se qued¨® en cuatro, aunque a¨²n busc¨® alguna arrancada hacia adelante. En el banco esper¨® su oportunidad Asensio, tambi¨¦n de regreso, y en la grada lo contemplaron dos ajenos al gol esta campa?a, cada uno por sus circunstancias: Jovic y Mariano. Ante el Eibar, al Madrid no le hizo falta m¨¢s. Otros d¨ªas se qued¨® a cero tirando 20 veces. Esta vez le sobr¨® con seis para hacer tres.