Un l¨ªder solvente y m¨¢s ruido
El Madrid se impone con firmeza al Mallorca con un gol de Vinicius precedido de una probable falta de Carvajal y un golazo extraordinario de Ramos de falta
Un gol muy pol¨¦mico y un golazo sostuvieron a otro Madrid al frente de LaLiga. Otro Madrid porque ante el Mallorca Zidane envid¨® con un regimiento de delanteros y apenas un par de volantes. Y un golazo porque al toque terminal de Vinicius respondi¨® Sergio Ramos con un golpeo espl¨¦ndido, a la altura de los mejores lanzadores de faltas de la historia. El tanto de Ramos mereci¨® todos los honores. El inicial descorche de Vinicius traer¨¢ cola: previamente Carvajal pareci¨® atropellar a Dani Rodr¨ªguez sin que el colegiado y los vares se dieran por enterados.
A Zidane se le tiene por un ...
Un gol muy pol¨¦mico y un golazo sostuvieron a otro Madrid al frente de LaLiga. Otro Madrid porque ante el Mallorca Zidane envid¨® con un regimiento de delanteros y apenas un par de volantes. Y un golazo porque al toque terminal de Vinicius respondi¨® Sergio Ramos con un golpeo espl¨¦ndido, a la altura de los mejores lanzadores de faltas de la historia. El tanto de Ramos mereci¨® todos los honores. El inicial descorche de Vinicius traer¨¢ cola: previamente Carvajal pareci¨® atropellar a Dani Rodr¨ªguez sin que el colegiado y los vares se dieran por enterados.
A Zidane se le tiene por un buen gestor de vestuario. Sea por el peritaje f¨ªsico y an¨ªmico del plantel o porque eche m¨¢s de un ojo a la pizarra, lo cierto es que baraja al equipo ante cada reto. Contra el Mallorca tom¨® nota: el peor visitante de LaLiga (solo cinco puntos en la pen¨ªnsula) y el equipo m¨¢s goleado. Soluci¨®n, los tanques al asalto de Valdebebas. No estaba Casemiro ¡ªsancionado¡ª, pero el t¨¦cnico api?¨® a Valverde y Modric en los fogones del brasile?o y descamis¨® al Madrid en ataque. Vinicius a la izquierda, Bale a la derecha y Hazard como escolta de Benzema.
No son pocas las veces que el Real se desentiende del gobierno en el medio campo. No le va la mera formalidad del toque-toque, no es un equipo para trastear sin m¨¢s con el bal¨®n. Lo suyo son las ¨¢reas, sobre todo la propia. Nada le import¨® que el Mallorca ¡ªcomo han hecho otros adversarios¡ª se manejara con soltura en la periferia de Courtois. Ramos y Varane echaron el cierre y los cuatro atacantes pidieron pista.
Flu¨ªa con fogueo el cuadro balear al que hace gravitar el prometedor Kubo. La tralla era cosa de los blancos. Avisaron Benzema y Bale con sendos remates bloqueados por Reina. Y la tuvo Baba, con un disparo tremendo resuelto de maravilla por Courtois. Jugaban los de Vicente Moreno, intimidaban m¨¢s los de Zidane.
Hasta que lleg¨® el tanto de Vinicius. Otro litigio para la controversia de estos d¨ªas. M¨¢s ruido. La jugada se origin¨® con una probable falta de Carvajal a Dani Rodr¨ªguez en el c¨ªrculo central. Valverde reba?¨® la pelota, conect¨® con Modric y el croata cit¨® a Vinicius con el gol. Esta vez, el brasile?o resolvi¨® como un ¨¢ngel con una picadita sobre la salida de Reina. El ¨¢rbitro no revis¨® el monitor y los colegas del VAR validaron su interpretaci¨®n. A la gente le cuesta entender que los ¨¢rbitros no indaguen con m¨¢s asiduidad ante la tele a su disposici¨®n y se aferren a que solo examinan cuando el error es flagrante.
A¨²n estaba contrariado el Mallorca cuando Hazard tacone¨® para Benzema, que filtr¨® un pase geom¨¦trico para Vinicius. El extremo de nuevo hizo la palanca a la pelota. El larguero evit¨® otro disgusto a Reina.
Con el gol a favor el Real pareci¨® anestesiarse. Es costumbre que d¨¦ carrete a sus rivales en algunos tramos de los partidos. No hubo excepci¨®n ante los bermellones. Carvajal pas¨® m¨¢s de un mal trago ante Lago J¨²nior, pese a que en esta ocasi¨®n Bale no dimiti¨® en el auxilio. En lo suyo, la ofensiva, pas¨® de puntillas. Todo lo contrario que el alegre Vinicius, cada d¨ªa m¨¢s confiado. Tambi¨¦n revolv¨ªa Kubo, pero al chico todav¨ªa le falta picante, cuajo para sacar la estaca. Tiene personalidad y no le faltan virtuosismos, pero a¨²n aparenta m¨¢s de lo que amenaza.
Al Madrid ni siquiera le hizo falta mucho volumen. Da la sensaci¨®n de saber que tendr¨¢ sus momentos, sin que necesariamente tengan que ver con el juego en general. Espera que te espera lleg¨® otro golazo. Este sin discusi¨®n alguna. Un toque genial del segundo m¨¢ximo goleador blanco. Tan poco convencional es este Madrid que se trata de Sergio Ramos, un defensa central. Un futbolista tan bizarro que cuando tiene el gol a tiro es m¨¢s optimista que un mill¨®n de delanteros. Cabecea con estruendo, tira los penaltis como el que come pipas y no desde?a las faltas desde que no est¨¢ CR. Bale es otra cosa.
Con el bal¨®n parado en el balc¨®n del ¨¢rea, el capit¨¢n madridista amortigu¨® el tobillo derecho y ejecut¨® un golpeo perfecto sobre el flequillo de la barrera. Reina pidi¨® socorro a Dani Rodr¨ªguez para tapar la escuadra derecha, pero su compa?ero lleg¨® tarde y no pudo evitar el octavo gol liguero del andaluz. Ramos para todo. Con ¨¦l a la corneta el Madrid sigue l¨ªder con ZZ baraja que baraja. Un d¨ªa James, otro Asensio. Una jornada Bale, otra Rodrygo. Y siempre Ramos.
Y como cierre, un d¨ªa inolvidable para el mallorquinista Luka Romero, el debutante m¨¢s joven en la historia de LaLiga: 15 a?os y 219 d¨ªas.