La horca del Camp Nou
La directiva est¨¢ desorientada, el equipo se siente frustrado y ambas partes coinciden en cuestionar al entrenador, Quique Seti¨¦n
La crispaci¨®n aumenta en el Camp Nou desde el regreso de LaLiga. No ha habido un solo d¨ªa de respiro si se except¨²a el partido inicial de Mallorca. La sensaci¨®n es que la plantilla camina de empate en empate hasta la derrota final y la junta no sabe c¨®mo ponerle remedio despu¨¦s de que algunos jugadores y directivos discrepen del entrenador, Quique Seti¨¦n. El fichaje del c¨¢ntabro no es de momento la soluci¨®n despu¨¦s de c...
La crispaci¨®n aumenta en el Camp Nou desde el regreso de LaLiga. No ha habido un solo d¨ªa de respiro si se except¨²a el partido inicial de Mallorca. La sensaci¨®n es que la plantilla camina de empate en empate hasta la derrota final y la junta no sabe c¨®mo ponerle remedio despu¨¦s de que algunos jugadores y directivos discrepen del entrenador, Quique Seti¨¦n. El fichaje del c¨¢ntabro no es de momento la soluci¨®n despu¨¦s de constatar que el problema no era Ernesto Valverde. Ocurre que se impone buscar un culpable y, ante la falta de autocr¨ªtica, el t¨¦cnico es el ¨²nico punto de encuentro de dos partes tan distantes como son el vestuario y el palco del Camp Nou. Acabado el partido de Vigo, a Seti¨¦n le silbaban los o¨ªdos por los reproches de futbolistas y el desamparo de los miembros de un consejo preocupado por salvar las cuentas el pr¨®ximo martes 30.
Antes hab¨ªa descontento, despu¨¦s lleg¨® la frustraci¨®n y ahora se habla de impotencia en el Barcelona. El equipo ya no puede sostener al club, desorientado como est¨¢ el consejo de Josep Maria Bartomeu, cercado por el Bar?agate en v¨ªsperas de las elecciones de 2021. La pol¨ªtica deportiva e institucional depend¨ªa de Leo Messi y cuando el 10 ha dejado de marcar goles el Bar?a ha quedado a merced del Madrid. Y, en situaciones extremas, el barcelonismo se ha acostumbrado a los mensajes de Gerard Piqu¨¦. ¡°Recordad una cosa, somos el Bar?a y eso todav¨ªa no se acab¨®. Luchar hasta el final forma parte de nuestro ADN. La cabeza bien alta y el martes [reciben al Atl¨¦tico] iremos a por todas¡±, escribi¨® en las redes sociales en un mensaje contradictorio al enviado despu¨¦s del 0-0 de Sevilla: ¡°No creo que el Madrid pierda demasiados puntos. Va a ser muy dif¨ªcil ganar esta Liga¡±.
El desconcierto se expresa en Arthur Melo. Un futbolista que fue presentado como el sustituto de Xavi y que, con el tiempo se ha extraviado de la misma manera que tantos centrocampistas ¡ªTuran, Andr¨¦ Gomes, Coutinho, Denis Su¨¢rez, Rafinha, Paulinho, Vidal o Ale?¨¢¡ª y se ha convertido en el ¨²nico activo para que la directiva cuadre los n¨²meros, intente poner a salvo su patrimonio y no tenga que avalar el presupuesto r¨¦cord de los 1.000 millones del que presumi¨® Bartomeu.
El ejemplo de Arthur
Arthur ha sido obligado a renegar del Bar?a, humillado por jugar los ¨²ltimos minutos de Vigo, exigido para que viajara de noche a Tur¨ªn para firmar por la Juve, y ahora se le insta a que contin¨²e con la camiseta azulgrana hasta que acabe la temporada por si le necesita Seti¨¦n. Se siente despechado por la directiva y por el cuerpo t¨¦cnico despu¨¦s de que se le se?alara como un jugador sospechoso por su escasa relevancia en el campo desde que fue fichado del Gremio. Al brasile?o, y a varios jugadores, les revienta que el entrenador no pare de hablar sobre cuestiones t¨¢cticas y de rendimiento individual, como se apreci¨® en Vigo. El t¨¦cnico ha sido reprendido con las declaraciones a nivel p¨²blico de Luis Su¨¢rez y en l¨ªnea interna en el vestuario de Bala¨ªdos. El discurso de Seti¨¦n no cala en el grupo de Messi para desespero de Bartomeu. ¡°?Y si nos volvimos a equivocar de entrenador?¡±, coinciden en preguntarse en el Camp Nou. Los futbolistas se han distanciado de Seti¨¦n y buscan un t¨¦cnico a su medida sin reparar en que envejecen mal alrededor de Messi, que cumpli¨® 33 a?os y negocia su renovaci¨®n con Bartomeu.
¡°Todo el mundo est¨¢ con la soga al cuello, aqu¨ª nadie disfruta¡±, concluy¨® Seti¨¦n en una entrevista concedida al diario Ara. El t¨¦cnico es sospechoso y el presidente todav¨ªa no ha decidido c¨®mo expondr¨¢ la auditor¨ªa por el Bar?agate y que delata los problemas jur¨ªdicos y econ¨®micos de la directiva de la misma manera que el fichaje de Griezmann simboliza la fractura entre el vestuario y Bartomeu. Hay una sospecha sobre las gestiones de la junta y la direcci¨®n t¨¦cnica del Bar?a.
El desplome es estructural por la falta de una pol¨ªtica deportiva, condicionada, adem¨¢s, por las urgencias econ¨®micas que se agravaron con la covid-19. Ahora se se?ala a los entrenadores despu¨¦s de que se haya cambiado a la direcci¨®n deportiva y dimitieran los rectores del ¨¢rea econ¨®mica que encabezaba Enrique Tombas. A falta de liderazgo institucional y de sentido de equipo, no queda m¨¢s remedio que preguntar por Messi. La m¨¢quina trituradora, sin embargo, no tiene sentimientos y el 10 cada vez est¨¢ m¨¢s solo ante el reto de ganar al Atl¨¦tico y aguardar al N¨¢poles. Nadie se salva de la horca en el Camp Nou.