Otro jaque a la gimnasia
Las gimnastas brit¨¢nicas dan un paso adelante para denunciar abusos de los entrenadores durante a?os tras el documental sobre el m¨¦dico del equipo estadounidense
Jennifer Sey fue una de las mejores gimnastas estadounidenses de los a?os 80, cuando Estados Unidos no era la m¨¢quina de campeonas que es hoy. Sey no gan¨® ninguna medalla en un mundial ni estuvo en los Juegos Ol¨ªmpicos. Dej¨® el deporte asqueada y lo puso por escrito en un libro hace a?os. Es ahora cuando est¨¢ viviendo su mayor ¨¦xito: es una de las productoras de Athlete A, el documental de Netflix sobre los abusos sexuales del m¨¦dico del equipo ol¨ªmpico Larry Nassar, que ha provo...
Jennifer Sey fue una de las mejores gimnastas estadounidenses de los a?os 80, cuando Estados Unidos no era la m¨¢quina de campeonas que es hoy. Sey no gan¨® ninguna medalla en un mundial ni estuvo en los Juegos Ol¨ªmpicos. Dej¨® el deporte asqueada y lo puso por escrito en un libro hace a?os. Es ahora cuando est¨¢ viviendo su mayor ¨¦xito: es una de las productoras de Athlete A, el documental de Netflix sobre los abusos sexuales del m¨¦dico del equipo ol¨ªmpico Larry Nassar, que ha provocado un se¨ªsmo en el mundo de la gimnasia.
Porque este trabajo va mucho m¨¢s all¨¢ del gigantesco esc¨¢ndalo Nassar: se adentra de lleno en las miserias de este deporte, describe entornos abusivos donde reina el miedo, el castigo f¨ªsico y mental y un poder casi absoluto sobre deportistas que son ni?as. Habla de miedos, de des¨®rdenes alimentarios, de lesiones ignoradas y de traumas dif¨ªciles de superar. De una federaci¨®n que deb¨ªa velar por el bienestar de las deportistas, que ¡ªno olvidemos¡ª son menores de edad en su mayor¨ªa, y prefiri¨® mirar para otro lado e incluso tapar las denuncias. La cinta se ha convertido en el detonante de un movimiento global, que ha llevado a decenas de gimnastas a denunciar abusos en las redes sociales y en los medios de comunicaci¨®n y a pedir un cambio en la ¡°cultura del miedo¡± que, afirman, rige este deporte. Entre ellas est¨¢n algunas de las mejores deportistas brit¨¢nicas.
Impactadas
El movimiento empez¨® hace un par de semanas, cuando la inglesa Jennifer Pinches ¡ªol¨ªmpica en Londres 2012, que luego pas¨® por la gimnasia universitaria estadounidense¡ª y algunas compa?eras empezaron a mover una declaraci¨®n tras quedar impactadas por el documental. ¡°Athlete A detalla comportamientos desgarradores que nunca deber¨ªan haber sucedido¡±, comienza el comunicado. Y tras mostrar su apoyo a las v¨ªctimas, y rechazar la cultura del miedo y el silencio que hab¨ªa permitido a Nassar actuar impunemente durante d¨¦cadas sobre centenares de v¨ªctimas menores de edad, exig¨ªan un cambio profundo.
El texto empez¨® a difundirse por redes sociales, impulsado por otras ol¨ªmpicas como Hannah Whelan, tambi¨¦n retirada; Danusia Francis, que ahora compite por Jamaica; y por las hermanas Becky y Ellie Downie, las dos grandes estrellas de la gimnasia brit¨¢nica (Ellie fue campeona de Europa en 2017 y subcampeona al a?o siguiente y ambas formaron parte del equipo que logr¨® el bronce mundial en 2015).
Lo que empez¨® como una declaraci¨®n se transform¨® en una ola de decenas de testimonios del horror sobre abusos mentales y f¨ªsicos de todo tipo en los entrenamientos y un hashtag que lo un¨ªa todo: #gymnastalliance. Catherine Lyons, de 19 a?os y ya retirada de la competici¨®n, afirm¨® a ITV News que de ni?a la hab¨ªan obligado a entrenarse lesionada, que le gritaban a menudo y, a veces, la golpeaban, pero que el maltrato tambi¨¦n era mental. Lisa Mason fue humillada por su peso y la obligaron a competir lesionada. Charlie Fellows subi¨® un pelda?o al pedir la dimisi¨®n de la presidenta de la federaci¨®n porque ¡°sab¨ªa todo lo que estaba pasando y no hizo nada durante a?os¡±. Ellie Downie reconoci¨® que la hab¨ªan presionado siempre para adelgazar. Y su hermana mayor, Becky, que la hab¨ªan obligado a entrenarse m¨¢s de lo necesario hasta lesionarse.
La estela ha seguido durante d¨ªas en Twitter, tambi¨¦n con muchos testimonios an¨®nimos. Y ha trascendido al Reino Unido, con quejas que llegan de Francia, de Suiza¡ y que muestran que el problema es general.
Investigaci¨®n independiente
El movimiento recibi¨® aplausos de algunas de las mejores gimnastas de EE UU, como Aly Raisman, v¨ªctima de Nassar. Y a ¨¦l se unieron gimnastas de otras disciplinas. Como Louis Smith, el primer medallista ol¨ªmpico de la gimnasia brit¨¢nica: ¡°La gimnasia es un deporte muy duro y los entrenadores deben ser capaces de sacar lo mejor de nosotros. Pero cuando eres joven, a veces la l¨ªnea entre lo que es un entrenador duro pero bueno y otro abusivo, se desdibuja¡±, afirm¨® en Instagram. Y volvi¨® a se?alar a la federaci¨®n brit¨¢nica: ¡°Si tienen un problema, quiz¨¢s no sepan a qui¨¦n dirigirse para resolverlo, especialmente sin sufrir consecuencias en futuras competiciones¡±.
Ese es otro de los problemas, se?alados en el documental y que parece generalizado: las federaciones. La brit¨¢nica ha sido una de las m¨¢s exitosas de la ¨²ltima d¨¦cada, con medallistas mundiales y ol¨ªmpicos en casi todas las categor¨ªas de la gimnasia. La federaci¨®n ha anunciado una investigaci¨®n independiente. ¡°Los comportamientos que hemos escuchado en los ¨²ltimos d¨ªas van en contra de nuestras normas y no tienen cabida en nuestro deporte¡±, ha afirmado la organizaci¨®n en un comunicado.
Queda un a?o para los Juegos de Tokio. Y no paran las sacudidas en la gimnasia, el gran deporte ol¨ªmpico junto con la nataci¨®n y el atletismo.