¡°Todos copian nuestro modelo de juego¡±
Antonio Percassi, exjugador y ahora empresario y presidente del Atalanta de B¨¦rgamo, explica el funcionamiento del club revelaci¨®n del f¨²tbol europeo, rival del PSG
Se abre una discret¨ªsima puerta de hierro forjado y el visitante pasa al jard¨ªn de Villa Schubiger, joya del art nouveau bergamasco. De negro riguroso, el anfitri¨®n parece desconcertado mientras sus peque?os ojos de zorro proyectan una mirada escrutadora. ¡°Yo no suelo dar entrevistas¡±, dice, ¡°quien administra el club es mi hijo Luca¡±. Fiel a su pertinaz costumbre provinciana, a sus 67 a?os Antonio Percassi se resta importancia. Pero este patriarca de una larga saga de empresarios locales es el primer responsable de la revoluci¨®n m¨¢s asombrosa del f¨²tbol europeo en los ¨²ltimos a?os. La e...
Se abre una discret¨ªsima puerta de hierro forjado y el visitante pasa al jard¨ªn de Villa Schubiger, joya del art nouveau bergamasco. De negro riguroso, el anfitri¨®n parece desconcertado mientras sus peque?os ojos de zorro proyectan una mirada escrutadora. ¡°Yo no suelo dar entrevistas¡±, dice, ¡°quien administra el club es mi hijo Luca¡±. Fiel a su pertinaz costumbre provinciana, a sus 67 a?os Antonio Percassi se resta importancia. Pero este patriarca de una larga saga de empresarios locales es el primer responsable de la revoluci¨®n m¨¢s asombrosa del f¨²tbol europeo en los ¨²ltimos a?os. La epopeya que desde 2010 ha llevado al Atalanta de B¨¦rgamo de la Serie B a los cuartos de la Champions con el f¨²tbol m¨¢s atrevido, alegre y goleador del continente. La eliminatoria que este mi¨¦rcoles (21.00, Movistar LC) jugar¨¢ con el PSG confrontar¨¢ dos modelos antag¨®nicos.
El calendario
Cuartos
1. Atalanta-PSG. Este mi¨¦rcoles. Est¨¢dio da Luz.
2. Leipzig-Atl¨¦tico. Este jueves. Jos¨¦ Alvalade.
3. Barcelona-Bayern. Viernes 14. Est¨¢dio da Luz.
4. Manchester City-Lyon. S¨¢bado 15. Jos¨¦ Alvalade.
Semifinales
Ganadores 1-2. Martes 18. Est¨¢dio da Luz.
Ganadores 3-4. Mi¨¦rcoles 19. Jos¨¦ Alvalade.
Final
Domingo 23. Est¨¢dio da Luz.
Todos los partidos, a las 21.00 (Movistar LC).
¡°Nosotros siempre hemos puesto el acento en el desarrollo de los sectores juveniles; es nuestro fundamento¡±, se?ala Percassi cuando le preguntan por la clave de su ¨¦xito. Lo dice como si, en el fondo, no hubiera ning¨²n secreto que descubrir. Pero habla con conocimiento de causa. ?l mismo jug¨® en el primer equipo del Atalanta en la posici¨®n de central antes de retirarse en 1978 para emprender una carrera empresarial que le llev¨® a vincular los negocios inmobiliarios con la industria de la moda a trav¨¦s de sociedades con Luciano Benetton, Ralph Lauren o Amancio Ortega. En 2010 asumi¨® la presidencia del Atalanta, coloc¨® a su hijo Luca, otro exjugador de la cantera, como administrador delegado, y dej¨® que Giovanni Sartori, el viejo director deportivo, se ocupara de la captaci¨®n de talentos con una red de 30 ojeadores que act¨²an en todo el mundo, con el foco en la llanura padana.
¡°Lo m¨¢s importante son los buenos ojeadores¡±, advierte. ¡°Despu¨¦s necesitas entrenadores, estructura. Somos un club provincial pero en la formaci¨®n de jugadores estamos a la vanguardia de casi todos los campeonatos. Desde los alevines al equipo reserva pasando por los sub-16 y sub-18. Esta es nuestra historia. Yo y mi hijo nos hemos formado como futbolistas en la cantera del Atalanta. Sabemos mejor que nadie lo importante que es en un club como el nuestro¡±.
¡°Haber sido jugador profesional es una ventaja para m¨ª¡±
La contradicci¨®n salta a la vista. Del cuadro titular que gole¨® al Valencia en Mestalla en marzo, solo el portero, Sportiello, y un central, Caldara, son canteranos. Los dem¨¢s son extranjeros adquiridos en el mercado. Por unos precios inauditos si se los compara con lo que han pagado por sus plantillas los rivales que le acompa?an en Lisboa en la disputa de la Champions: Djimsiti (libre), Gosens (900.000 euros), Palomino (4,5 millones de euros), Freuler (1,9 millones), De Room (1,3), Hateboer (1,4), Pasalic (prestado), Ilicic (6) y Papu G¨®mez (4,5). En total, 19 millones de euros.
¡±Nosotros no podemos gastar como los grandes clubes¡±, dice el dirigente, que apunta al balance presupuestario m¨¢s brillante de la Serie A. ¡°Solo podemos invertir en un jugador de cierto tipo; y si pasamos de 15 millones en un fichaje es porque se presenta una oportunidad [como Duv¨¢n Zapata]. Pero la ley es tener los pies en la tierra, apostar por los chicos y por los jugadores con proyecci¨®n. Para reforzar el equipo hemos vendido j¨®venes y hemos invertido bien en extranjeros¡±.
Adiestrados en la moderna ciudad deportiva de Zingonia ¡ªantiguo proyecto ut¨®pico de la arquitectura industrial de los 60¡ª los canteranos Cristante, traspasado a la Roma por 21 millones; Bastoni y Gagliardini, traspasados al Inter por 50; Conti, traspasado al Milan por 24; y Caldara, traspasado a la Juve por 19, son algunas de las operaciones m¨¢s importantes del Atalanta en el ¨²ltimo lustro. Eje de una compleja red de intercambios, desde 2015 el Atalanta traspas¨® o prest¨® a 370 jugadores, la mayor¨ªa salidos de sus categor¨ªas inferiores, italianos y extranjeros. A cambio ingres¨® 283 millones de euros, seg¨²n el portal Transfermarkt, y lo e mple¨® en fichar futbolistas por 203 millones. Con el remanente, el club compr¨® su propio estadio.
¡°Llev¨¢bamos una vida pensando en adquirir el estadio en propiedad; y por fin hace cuatro a?os lo compramos al Ayuntamiento y hemos comenzado a remodelarlo¡±, confiesa Percassi de la refundaci¨®n del viejo estadio comunal de los a?os 30, que considera su gran logro. ¡°Se convertir¨¢ en una joya. Entre adquisici¨®n y restauraci¨®n nos costar¨¢ 45-50 millones. Hemos terminado la primera fase. Ahora haremos la tribuna lateral y el a?o que viene la otra curva. En dos a?os todo nuevo¡±.
¡°Somos un club provinciano; Gasperini nos cambi¨® la mentalidad¡±
Desde la crisis financiera de 2008 ning¨²n gran club europeo ha sido capaz de construir un nuevo estadio y al mismo tiempo sostener la evoluci¨®n deportiva de su equipo. El Atalanta lo ha conseguido desde la discreci¨®n de un liderazgo mucho m¨¢s complejo de lo que parece.
¡°La ventaja de haber sido futbolista profesional es que entiendes de f¨²tbol¡±, dice el empresario. ¡°Entiendes c¨®mo funciona un vestuario. Entiendes c¨®mo afrontar los momentos dif¨ªciles, y esto es importante porque a lo largo de un campeonato siempre encuentras dificultades. Tenemos la suerte de saber c¨®mo es la cabeza de un jugador. Qu¨¦ debes decirle, y c¨®mo abordarlos de la mejor manera para recuperarlos. Tenemos un buen feeling, pero nuestra relaci¨®n es simple. Si hablo, que sea lo justo. Hablar mucho a los jugadores es romperles los cojones. El ambiente en Zingonia es familiar. Para nosotros este ambiente es fundamental. Somos un club de provincias. El trato tiene que ser directo, simple, familiar, apasionado, de aficionado. Aqu¨ª los seguidores comprenden autom¨¢ticamente si est¨¢s aqu¨ª porque quieres el club o porque quieres hacer negocios¡±.
¡±Hay dirigentes muy importantes que han hecho historia con su gran fuerza econ¨®mica¡±, observa. ¡°En cambio nosotros, con nuestra diferencia hemos conseguido resultados extraordinarios gracias al hecho de haber encontrado un entrenador buen¨ªsimo que est¨¢ haciendo historia¡±.
Porque sabe c¨®mo funciona un vestuario, Percassi se esfuerza por situarse al margen de los que se?ala como protagonistas. Si atribuye la sostenibilidad econ¨®mica del proyecto a la cantera y sus ojeadores, no duda en responsabilizar al entrenador, Gian Piero Gasperini, del ¨¦xito deportivo. ¡°Gasperini nos cambi¨® la mentalidad¡±, afirma. ¡°Nuestro objetivo siempre fue salvarnos. Seguir en Serie A. Yo no sab¨ªa si este tipo de f¨²tbol tan ofensivo que propon¨ªa el t¨¦cnico pod¨ªa desarrollarse en un equipo de provincias. Hab¨ªa un riesgo. Ahora cumpliremos diez a?os en Serie A. Esto es un r¨¦cord en la historia del club. No nos esper¨¢bamos una transformaci¨®n as¨ª. Con un tipo de f¨²tbol que se ha convertido en algo revolucionario. Un modelo que ahora nos est¨¢n copiando todos. Estamos en la l¨ªnea internacional de proyecci¨®n del f¨²tbol¡±.