Alc¨¢cer y Gerard Moreno someten a un inexistente Alav¨¦s (3-1)

El f¨²tbol da inmediatas oportunidades de redenci¨®n. Mario, se?alado en la goleada sufrida tres d¨ªas atr¨¢s ante el Bar?a, se col¨® como protagonista, sumando una asistencia y siendo objeto de un penalti, en la fiesta goleadora de Alc¨¢cer y Gerard Moreno, con dos tantos el primero y otro del catal¨¢n, que certificaron un triunfo incontestable del Villarreal ante un inexistente Alav¨¦s que en La Cer¨¢mica mostr¨® todas sus debilidades y ninguna fortaleza, sometido por el arm¨®nico juego amarillo, sostenido por Iborra, con el esteta Trigueros y un dulce Parejo sincronizados a los mandos, edulcorado con ...

El f¨²tbol da inmediatas oportunidades de redenci¨®n. Mario, se?alado en la goleada sufrida tres d¨ªas atr¨¢s ante el Bar?a, se col¨® como protagonista, sumando una asistencia y siendo objeto de un penalti, en la fiesta goleadora de Alc¨¢cer y Gerard Moreno, con dos tantos el primero y otro del catal¨¢n, que certificaron un triunfo incontestable del Villarreal ante un inexistente Alav¨¦s que en La Cer¨¢mica mostr¨® todas sus debilidades y ninguna fortaleza, sometido por el arm¨®nico juego amarillo, sostenido por Iborra, con el esteta Trigueros y un dulce Parejo sincronizados a los mandos, edulcorado con la movilidad y los pies del ambidiestro Moi G¨®mez. El conjunto de Emery comienza a mostrar sus virtudes. El de Mach¨ªn, sus miserias.

Los delanteros puros se distinguen por sus movimientos en el ¨¢rea, su oportunismo y el remate de primeras certero. Alc¨¢cer es de esa estirpe de punta, poco dado a arabescos, efectivo cara al marco rival como pocos. Con un desmarque al primer palo y un sutil toque de derecha que cruz¨® toda la l¨ªnea de gol de Pacheco, Alc¨¢cer, antes de llegar al cuarto de hora, adelantaba al Villarreal. Una acci¨®n de precisi¨®n m¨¢xima que inici¨® Parejo con un pase profundo para Mario que convirti¨® en asistencia el capit¨¢n para el tanto del delantero. Una jugada que desmontaba el engranaje defensivo del Alav¨¦s.

El conjunto vitoriano no encontraba respuesta al despliegue del Villarreal, que asediaba una y otra vez a la porter¨ªa de Pacheco. Sin descontar un digno ataque, el Alav¨¦s cant¨® bingo en una acci¨®n b¨¢sica, un despeje-pase a seguir desde el lateral izquierdo de Deyverson, con toda la ventaja para Asenjo, que no supo medir el bote del esf¨¦rico que le pas¨® por encima. Edgar M¨¦ndez, agradecido con el regalo, marc¨® el gol m¨¢s sencillo de su vida. El Alav¨¦s, cuando asomaba el descanso, devolvi¨® el obsequio con un penalti de Leujene sobre Mario. Convirti¨® Gerard Moreno. Y el delantero catal¨¢n, ya en la segunda mitad, fabric¨® el tercer gol que remach¨® Alc¨¢cer tras recoger el rechazo del palo. El Alav¨¦s apenas existi¨®.