Nadal brilla a la ofensiva

Falta finura, mu?eca, adaptaci¨®n. L¨®gico. El desembarco en la gira indoor ha sido este a?o m¨¢s abrupto que nunca ¡ªdirectamente desde la tierra de Roland Garros, sin escala previa alguna sobre pista dura¡ª y los automatismos no se ganan de un d¨ªa para otro, pero Rafael Nadal va por el buen camino. Si el d¨ªa previo el balear jug¨® m¨¢s bien encogido ante Feliciano L¨®pez, al que tuvo que remontar con m¨¢s oficio que otra cosa, frente al australiano Jordan Thompson (6-1 y 7-6(3), en 1h 33m) dio un significativo paso hacia adelante. No tanto por el acabado final, m¨¢s que correcto, sino porque ap...

Falta finura, mu?eca, adaptaci¨®n. L¨®gico. El desembarco en la gira indoor ha sido este a?o m¨¢s abrupto que nunca ¡ªdirectamente desde la tierra de Roland Garros, sin escala previa alguna sobre pista dura¡ª y los automatismos no se ganan de un d¨ªa para otro, pero Rafael Nadal va por el buen camino. Si el d¨ªa previo el balear jug¨® m¨¢s bien encogido ante Feliciano L¨®pez, al que tuvo que remontar con m¨¢s oficio que otra cosa, frente al australiano Jordan Thompson (6-1 y 7-6(3), en 1h 33m) dio un significativo paso hacia adelante. No tanto por el acabado final, m¨¢s que correcto, sino porque aparc¨® el juego cohibido del estreno y propuso la versi¨®n incisiva que demanda un territorio lleno de minas e hist¨®ricamente adverso como el de Bercy.

En un intervalo de menos de veinticuatro horas, las que transcurrieron del primer duelo al segundo, Nadal disip¨® cualquier tipo de duda y ofreci¨® una imagen m¨¢s reconocible. De la noche al d¨ªa. A la expectativa en el debut, contra Thompson sac¨® las garras desde el principio y enfil¨® con decisi¨®n. En media hora se apunt¨® el primer parcial, con tres roturas y un formidable rendimiento con el servicio ¡ªcedi¨® solo dos puntos con el primer saque y tres con el segundo¡ª, y supo contener al intr¨¦pido australiano en la continuaci¨®n, con respuestas certeras cuando la situaci¨®n m¨¢s lo exig¨ªa.

Thompson, un tenista imaginativo que se desenvuelve con holgura en las canchas r¨¢pidas y disfruta y¨¦ndose hacia adelante, dispuso de una bola de set para igualar, pero Nadal fren¨® la ofensiva y puso las cosas en su sitio con una espl¨¦ndida r¨¦plica. Si ante Feliciano jug¨® con el freno de mano y con un patr¨®n un tanto timorato, ante el australiano (61? de la ATP) encontr¨® ritmo y toque, timing y control; argumentos m¨¢s que suficientes para sortear el segundo escollo y enfilar los cuartos de final, hoy (no antes de las 18.30, #Vamos) ante Pablo Carre?o.

¡°Creo he hecho un primer set bueno, he hecho muchas cosas bien¡±, expres¨® a trav¨¦s de una conferencia telem¨¢tica. ¡°En el segundo ¨¦l ha empezado a sacar mucho mejor y creo que no he estado del todo fino al resto, pero con el servicio he sufrido muy poco a lo largo de todo el partido. He sabido sufrir cuando ten¨ªa que sufrir, y rematar cuando ten¨ªa que rematar. He tenido algunos errores m¨¢s de los que deb¨ªa, pero en t¨¦rminos generales puedo irme satisfecho¡±, agreg¨® el de Manacor, que la jornada anterior hab¨ªa celebrado su victoria 1.000 como profesional.

El arre¨®n fue evidente e imprescindible, puesto que Nadal afronta en este broche final de la temporada un desaf¨ªo may¨²sculo, traducido en un estimulante aliciente. Doble, adem¨¢s. No ha ganado nunca en Bercy ¡ªel tope es la final que perdi¨® contra David Nalbandian en 2007¡ª ni tampoco el codiciado Masters, el ¨²nico honor rese?able que falta en su esplendoroso historial. Y pesa, tambi¨¦n, la losa de un formato que se le resiste como ninguno, ya que no gana un torneo disputado bajo techo y en dura desde que lo hiciera en el Masters de Madrid, de 2005.

De los 86 t¨ªtulos que ha conquistado en su prolongada trayectoria en la ¨¦lite, solo dos se produjeron a cubierto: el citado de Madrid, y el de S?o Paulo en 2013, aunque este ¨²ltimo sobre arcilla. En este sentido, Novak Djokovic suma 13 y Roger Federer abraza 26. En cualquier caso, poco tiene que ver aquel Nadal con el de hoy d¨ªa. Pervive el esp¨ªritu, pero cambia radicalmente la forma. Desde hace tiempo, el mallorqu¨ªn maneja los c¨®digos del juego indoor y si hay un a?o en el que llega fresco a la recta final es este, con solo 28 partidos en la cartilla como consecuencia de la pandemia.

Puede ser, pues, la hora de terminar con el maleficio de la ruta oto?al. Por eso, Nadal va con todo en este desenlace.