El vendaval de La Roja
Espa?a arroll¨® en todas las facetas a Alemania, v¨ªctima de un juego coral que en la selecci¨®n valoran como el punto de inflexi¨®n an¨ªmico de una generaci¨®n que precisaba un do de pecho
?Que salg¨¢is co?o!, grit¨® Luis Enrique durante una de las pocas circulaciones largas de bal¨®n que Alemania pudo completar el martes en el estadio de La Cartuja. La presi¨®n adelantada es el coraz¨®n del ideario con el que el seleccionador espa?ol trata de construir un grupo que sea capaz de volver a pelear por los t¨ªtulos. Desde esa asfixia al contrario se explica en gran parte la tunda hist¨®rica que La Roja le propin¨® a Alemani...
?Que salg¨¢is co?o!, grit¨® Luis Enrique durante una de las pocas circulaciones largas de bal¨®n que Alemania pudo completar el martes en el estadio de La Cartuja. La presi¨®n adelantada es el coraz¨®n del ideario con el que el seleccionador espa?ol trata de construir un grupo que sea capaz de volver a pelear por los t¨ªtulos. Desde esa asfixia al contrario se explica en gran parte la tunda hist¨®rica que La Roja le propin¨® a Alemania (6-0). ¡°No es f¨¢cil hacer una presi¨®n como la que hacemos. Se asumen muchos riesgos, pero los jugadores los aceptan porque tienen una fe ciega en la propuesta de Luis Enrique¡±, aseguran en la federaci¨®n, donde reina la satisfacci¨®n porque al fin la idea fue acompa?ada de un golpe en la mesa como el dado en La Cartuja. La paliza se interpreta en el seno federativo como un espaldarazo a la apuesta por Luis Enrique tras el fracaso del Mundial 2018 y al empe?o en su regreso hace un a?o por parte de Luis Rubiales, presidente federativo, y del director deportivo, el exportero Jos¨¦ Francisco Molina.
La trascendencia de la hist¨®rica victoria va m¨¢s all¨¢ de la goleada o de la clasificaci¨®n para la final a cuatro de la Liga de Naciones. Espa?a aplast¨® a la selecci¨®n del pa¨ªs que marca el paradigma futbol¨ªstico que se impone ahora, con el machac¨®n Bayern de M¨²nich como bot¨®n de muestra. Y lo hizo con conceptos que forman parte de ese nuevo f¨²tbol que se estila. La citada presi¨®n, bajo un ritmo agobiante, fue insufrible para los alemanes. Kroos (45 pases), G¨¹ndogan (43) y Goretzka (19) fueron devorados y desconectados del partido. Pau Torres, 126, y Rodrigo, 113, dieron m¨¢s pases que el tr¨ªo de centrocampistas alineado por L?w. El buen pie del central zurdo del Villarreal se ha convertido en una de las salidas naturales de la selecci¨®n. En los circuitos de bal¨®n llam¨® la atenci¨®n la conexi¨®n entre Rodrigo y Koke. En el tiempo que coincidieron en el Atl¨¦tico, no mezclaron tan bien. Koke se montaba mucho sobre la posici¨®n del ahora mediocentro del Manchester City. Ante Alemania se complementaron muy bien, conectaron en 22 ocasiones. En la direcci¨®n y en la intenci¨®n de ambos en los pases se reflej¨® el crecimiento de ambos. Rodrigo jug¨® mucho en vertical y en largo siete de sus ocho pases fueron buenos. ¡°La irrupci¨®n de Koke despu¨¦s de dos a?os ha sido espectacular. No solo se ha limitado a dar pases de seguridad. Los mejores minutos contra Holanda ya coincidieron con los dos en el campo¡±, relata un miembro de la expedici¨®n. La diferencia en la posesi¨®n describi¨® a una Espa?a (70%) activa y reactiva que desnaturaliz¨® a Alemania (30%). Desde que a principios de siglo la federaci¨®n alemana decidi¨® mutar su estilo desde una posesi¨®n m¨¢s fina y duradera para volver a ser una potencia, su selecci¨®n pocas veces hab¨ªa sido tan reducida y sometida. Mientras que Espa?a firm¨® 761 pases buenos, Alemania solo registr¨® 298.
Transiciones
L¨ªnea por l¨ªnea, los futbolistas de Joachim L?w vivieron una tortura que las estad¨ªsticas reflejaron de forma palmaria. Padecieron la tormenta perfecta. Tan llamativos fueron los seis goles marcados y los 23 disparos de Espa?a como los cero remates entre los tres palos que registr¨® una selecci¨®n que aline¨® en punta a Werner, Gnabry y San¨¦. Dos tiros, uno al larguero, este con 5-0 en el marcador, fue toda la producci¨®n ofensiva que pudo generar Alemania. Ferran (7) y o Koke (5) remataron m¨¢s que todo el conjunto alem¨¢n. La rotundidad del triunfo espa?ol tambi¨¦n tuvo una mezcla perfecta entre las transiciones vertiginosas y el control del juego tocando. En la primera versi¨®n, la figura de Unai Sim¨®n fue decisiva. ¡°Nuestro portero nos tiene que dar continuidad en el juego, es decir, nos tiene que generar superioridad¡±, explica Luis Enrique. El cuarto y el quinto gol, ambos obra de Ferran, nacieron en el inicio del juego con el pie del meta del Athletic. Fueron dos jugadas cortas, de 12 y siete toques con los que Espa?a rompi¨® la presi¨®n alemana y encontr¨® autopistas a la espalda de su defensa. ¡°Jugamos con el portero para provocar la presi¨®n del rival y una vez que la rompes, se generan muchos espacios¡±, explican desde Las Rozas. En esas transiciones, Morata fue clave. Luis Enrique le ha insistido para que baje mucho a recibir de espaldas y sea el apoyo sobre el que los jugadores que llegan de cara construyan los ataques. Tambi¨¦n los laterales fueron una parte fundamental del plan ofensivo. Tanto Sergi Roberto como Gay¨¢ se doblaron muy bien con Ferran y Olmo.
La media docena de goles aplac¨® las cr¨ªticas sobre la falta de punter¨ªa. Esta faceta ha sido el lastre al que Luis Enrique ha achacado a la falta de resultados mejores que ayudaran a consolidar y reafirmar su propuesta. En el cuerpo t¨¦cnico estaban convencidos de que como la idea de juego est¨¢ dise?ada para generar un alto volumen de situaciones de gol este tarde o temprano llegar¨ªa. Y cuando el gol no fue mediante el juego, aparecieron las jugadas de estrategia. Fabi¨¢n, tambi¨¦n clave en las transiciones, puso en el segundo palo la pelota del c¨®rner en el primer tanto. Busc¨® la superioridad en cent¨ªmetros de Morata sobre Gnabry. En el gol de Rodrigo, el 3-0, Fabi¨¢n ejecut¨® a la perfecci¨®n el saque. ¡°La estrategia se trabaja, los centros a veces no llegan por cent¨ªmetros, cuando salen bien y entran es una satisfacci¨®n por el trabajo que hay detr¨¢s¡±, dijo Rodrigo.