La primera vez en el Everest

Perm¨ªtanme una licencia familiar ¡ªespero que el libro de estilo de EL PA?S tambi¨¦n est¨¦ de acuerdo¡ª para felicitar al FC Barcelona femenino por su victoria en la Champions League. La primera, esa especial primera vez, ese d¨ªa muchas veces so?ado y otras tantas veces tan lejano, tan imposible como un Everest futbol¨ªstico inalcanzable.

Y les pido su permiso porque, esta educaci¨®n lo condiciona todo, no s¨¦ si est¨¢ bien felicitar a tu hijo desde estas l¨ªneas pero, tras superar todos los p...

Perm¨ªtanme una licencia familiar ¡ªespero que el libro de estilo de EL PA?S tambi¨¦n est¨¦ de acuerdo¡ª para felicitar al FC Barcelona femenino por su victoria en la Champions League. La primera, esa especial primera vez, ese d¨ªa muchas veces so?ado y otras tantas veces tan lejano, tan imposible como un Everest futbol¨ªstico inalcanzable.

Y les pido su permiso porque, esta educaci¨®n lo condiciona todo, no s¨¦ si est¨¢ bien felicitar a tu hijo desde estas l¨ªneas pero, tras superar todos los pudores, creo que el acontecimiento lo merece. Por tanto, felicidades, Markel. Y les explico que Markel es el director deportivo del FC Barcelona femenino. Nuestro hijo mayor.

Y dicho esto, Markel, perm¨ªteme compartir contigo, con todos ustedes, un par de reflexiones.

La primera est¨¢ referida a mis tiempos de jugador, de portero. El 20 de mayo es una fecha escrita en oro en la historia del FC Barcelona. Wembley, el 92 ol¨ªmpico, los sue?os se cumpl¨ªan y nos d¨¢bamos el derecho a so?ar en grande. Y pens¨¢bamos que a aquella primera Orejona le seguir¨ªan muchas m¨¢s. Es lo m¨ªnimo que se pod¨ªa esperar de un equipo definido como Dream Team. Pero la realidad, el f¨²tbol, vino a visitarnos en septiembre de ese mismo 92 ya postol¨ªmpico y, tras empatar en Mosc¨² y llegar al descanso del partido de vuelta en el Camp Nou con un 2-0 claro en el marcador, el CSKA de Mosc¨² nos dej¨® fuera de la fase de grupos con tres goles en la segunda parte (vaya, lo de las segundas partes terribles parece que no es de hoy). De campeones a eliminados en cuatro meses. Tambi¨¦n eso fue un r¨¦cord.

La segunda reflexi¨®n tiene que ver con mi paso por los despachos y esa extra?a mezcla de enorme satisfacci¨®n por la victoria y ese rinc¨®n de la mente que te empieza a hablar de la gesti¨®n del futuro, de los dosieres a tratar, de las decisiones que hay que seguir tomando para que el ¨¦xito no paralice los proyectos, eso que solemos decir que es gestionar la felicidad para que perdure. Todas esas cosas que se suelen llevar en el cerebro de un director deportivo y que hacen que quienes trabajan con nosotros se extra?en de que la sonrisa no sea completa (ahora puede que las mascarillas permitan disimularlo mejor) porque la felicidad del ahora se mezcla con los grises de las decisiones futuras.

Y gestionar el ¨¦xito en estos tiempos de pandemia, crisis econ¨®mica e inestabilidad se convierte en un enorme reto para el que no hay experiencias anteriores con las que te pueda ayudar. Esta es una situaci¨®n nueva que necesita respuestas para esta nueva normalidad.

El ¨¦xito de seguir vivos

Mientras escribo lo anterior pienso en Atl¨¦tico y Real Madrid, que llegan a esos ¨²ltimos 90 minutos de Liga para ganarse el derecho a disfrutar de esa maravillosa incertidumbre asociada al ¨¦xito y que ellos estar¨¢n, seguro, encantados de sufrirlas. Como dir¨ªan los cl¨¢sicos, entre primero y segundo qued¨¦monos con la primera opci¨®n y ya hablaremos de c¨®mo, luego, lo gestionamos. Aunque, no se crean, que tambi¨¦n saldr¨¢ alguna voz, siempre al grito de ¡°Es la econom¨ªa, est¨²pido¡±, que preferir¨¢ la segunda plaza, con la Champions asegurada, sin ning¨²n impacto directo en las taquillas por la ausencia de p¨²blico y un incierto incremento que llegue desde el marketing y que compense las primas y premios que el ganador deber¨¢ abonar por ese t¨ªtulo.

Y qu¨¦ les voy a decir de Huesca, Elche y Valladolid, que se juegan seguir en Primera, seguir en la ¨¦lite y poder seguir en el f¨²tbol de primer nivel con lo que eso supone para el prestigio y la econom¨ªa sus clubes y de sus ciudades, clubes de Primera en ciudades de Primera. Esos s¨ª que est¨¢n dispuestos a darlo todo, hasta su alma, para conseguir el ¨¦xito de sobrevivir. Y punto.

Porque en estos tiempos que vivimos tanto ¨¦xito es acabar primero como seguir vivos.

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