El PSG de Messi, Neymar y Mbapp¨¦ cae derrotado y sin tirar entre los tres palos en Rennes
Deformado por el individualismo y un mediocampo escu¨¢lido, el l¨ªder de la Ligue 1 pasa de imponerse al City por 2-0 a perder 2-0
¡°El primer responsable soy yo¡±, dijo Mauricio Pochettino, el entrenador del Paris Saint-Germain, que parece tener asumido su papel de culpable oficial, amortiguador, cortafuegos, pacificador y administrador de egos rutilantes en el proyecto m¨¢s espectacular y experimental que ofrece el f¨²tbol contempor¨¢neo. El t¨¦cnico habl¨® en Rennes, capital de Breta?a, inmediatamente despu¨¦s de que su equipo armado de todas sus figuras perdiera contra el cuadro local por 2-0.
¡°Ha sido una desgracia no poder concretar nuestras ocasiones¡±, lament¨® Pochettino. ¡°Encajamos dos golpes psicol¨®gicos, el gol q...
¡°El primer responsable soy yo¡±, dijo Mauricio Pochettino, el entrenador del Paris Saint-Germain, que parece tener asumido su papel de culpable oficial, amortiguador, cortafuegos, pacificador y administrador de egos rutilantes en el proyecto m¨¢s espectacular y experimental que ofrece el f¨²tbol contempor¨¢neo. El t¨¦cnico habl¨® en Rennes, capital de Breta?a, inmediatamente despu¨¦s de que su equipo armado de todas sus figuras perdiera contra el cuadro local por 2-0.
¡°Ha sido una desgracia no poder concretar nuestras ocasiones¡±, lament¨® Pochettino. ¡°Encajamos dos golpes psicol¨®gicos, el gol que nos marcaron antes del descanso y el gol que nos metieron despu¨¦s¡±.
El PSG hab¨ªa vivido su semana m¨¢s gloriosa desde que fich¨® a Messi en agosto. La victoria por 2-0 ante el Manchester City en la Champions, este martes en el Parque de los Pr¨ªncipes, hab¨ªa desatado la euforia en la afici¨®n, del club, y de los medios de comunicaci¨®n en Francia, notablemente entregados a la causa de la inversi¨®n catar¨ª en la industria del f¨²tbol. El entusiasmo del triunfo en la Champions se transmiti¨® al vestuario en el punto cr¨ªtico que constituye todo intervalo entre una jornada de gran noche europea con una ventana de competiciones de la FIFA. Metidos en la transici¨®n del estr¨¦s hacia la llamada de las selecciones, muchos jugadores aprovecharon los d¨ªas previos al viaje de Ligue 1 a Rennes para solazarse. Que lo hicieran bajo la lupa de las redes sociales revela una llamativa desconexi¨®n con la realidad.
El viernes por la noche la c¨¦lebre modelo francesa Cindy Bruna celebr¨® su 27? cumplea?os en Par¨ªs. A la fiesta acudieron invitados el multicampe¨®n de F¨®rmula 1 Lewis Hamilton entre otros deportistas, incluyendo Neymar J¨²nior, Marco Verratti y Kylian Mbapp¨¦, tres de las figuras m¨¢s importantes del PSG, acompa?ados de amigos como el Pocho Lavezzi, veterano del equipo parisino. Las fotos de la fiesta recorrieron el ¨¦ter sin freno.
Este domingo, cuando Neymar, Mbapp¨¦ y Verratti saltaron a jugar a Rennes, lo hicieron como si ante s¨ª tuvieran un rival irrelevante, un desgraciado equipo de mitad de tabla incapaz de resistir la ola de clase que le aguadaba. El PSG generoso, solidario y amalgamado que derrot¨® al City se transform¨® en un grupo de individualistas algo indolentes, menos atentos en las ayudas a los compa?eros, preocupados por el lucimiento personal, y, naturalmente, poco afortunados. El PSG remat¨® 13 veces, todas fuera del marco que defendi¨® Gomis, si se descuenta un palo de Messi a lanzamiento de tiro libre. El Rennes, que aprovech¨® las bandas descuidadas por su rival, contragolpe¨® y se plant¨® frente a Donnarumma con m¨¢s claridad. De sus 12 tiros, cuatro fueron entre los tres palos y dos pegaron en la red.
Di Mar¨ªa por Ander Herrera
La ¨²nica diferencia respecto a la alineaci¨®n del martes pasado fue el cambio de Ander Herrera por Di Mar¨ªa. Un diente m¨¢s al engranaje ofensivo rest¨® solidez al mediocampo. Sin Ander Herrera para hacer el trabajo oscuro de las coberturas y escoltar a Verratti junto a Gueye, el PSG perdi¨® consistencia en todos los aspectos.
Interrogado por Neymar, al que sustituy¨®, Pochettino se inculp¨® h¨¢bilmente: ¡°De la misma manera que cuando le ganamos al City fue por una cuesti¨®n colectiva, ahora tambi¨¦n, el primer responsable soy yo¡±.
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