Otro hist¨®rico Betis

Nada m¨¢s salir al campo en el minuto 82 Joaqu¨ªn mir¨® a sus compa?eros y les areng¨®. Un misil de Beb¨¦ hab¨ªa helado los corazones de los b¨¦ticos y, sobre todo, hab¨ªa puesto plomo en las piernas de los jugadores locales, con el miedo metido en el cuerpo por el golazo de un valiente Rayo, que hab¨ªa igualado la eliminatoria en el minuto 80. Joaqu¨ªn, a los 40 a?os, se sobrepuso al temor que recorr¨ªa cada rinc¨®n del Benito Villamar¨ªn. El capit¨¢n cogi¨® el bal¨®n a los 92 minutos y se lanz¨®...

Nada m¨¢s salir al campo en el minuto 82 Joaqu¨ªn mir¨® a sus compa?eros y les areng¨®. Un misil de Beb¨¦ hab¨ªa helado los corazones de los b¨¦ticos y, sobre todo, hab¨ªa puesto plomo en las piernas de los jugadores locales, con el miedo metido en el cuerpo por el golazo de un valiente Rayo, que hab¨ªa igualado la eliminatoria en el minuto 80. Joaqu¨ªn, a los 40 a?os, se sobrepuso al temor que recorr¨ªa cada rinc¨®n del Benito Villamar¨ªn. El capit¨¢n cogi¨® el bal¨®n a los 92 minutos y se lanz¨® sobre la defensa del Rayo para dibujar un pase a Canales. El c¨¢ntabro esquiv¨® la salida de Luca Zidane y Borja Iglesias remat¨® sobre la l¨ªnea de gol para hacer el 1-1. Incansable y eterno, la valent¨ªa de Joaqu¨ªn meti¨® al Betis en su quinta final de Copa. Estall¨® el templo del beticismo en una explosi¨®n de j¨²bilo que hac¨ªa mucho tiempo que no se viv¨ªa en Heli¨®polis. Joaqu¨ªn, mito en verdiblanco, sepult¨® las aspiraciones de un magn¨ªfico Rayo, valiente hasta el final pese al 1-2 de la ida en Vallecas. Andoni Iraola meti¨® toda su artiller¨ªa en el tramo final y Beb¨¦ hizo el 0-1. Se la jug¨® y no realiz¨® ning¨²n cambio para equilibrar a su equipo, demasiado alargado. Tampoco contaba con el esp¨ªritu de Joaqu¨ªn, que revivi¨® a su Betis cuando peor lo estaba pasando. El Betis llegaba as¨ª con mucho sudor a la final de Copa que se jugar¨¢ en el estadio de La Cartuja. El rival ser¨¢ el Valencia el pr¨®ximo 23 de abril.

Todo fue emotivo en un Benito Villamar¨ªn festivo. Desde el recibimiento de la afici¨®n b¨¦tica a sus jugadores al despliegue f¨ªsico de dos equipos que jugaron al f¨²tbol con una alt¨ªsima intensidad. En especial el Rayo. Un equipo con personalidad y atrevido, que ejerci¨® una presi¨®n alt¨ªsima y que supo cerrar las fuentes de distribuci¨®n del juego verdiblanco, en especial Fekir y Canales. Al Betis le cost¨® un mundo superar la t¨¢ctica vallecana, que se ejercit¨® tan bien en la presi¨®n que, eso s¨ª, apenas ten¨ªa fuerzas para llegar con soltura en ataque. Los de Pellegrini, un equipo que suele atacar en oleadas, no encontraba huecos salvo cuando emerg¨ªa la figura de William Carvalho. El internacional portugu¨¦s fue el ¨²nico b¨¦tico con jerarqu¨ªa para jugar sin ataduras. Con sus cambios de juego a las bandas llegaron las ¨²nicas opciones en ataque de su equipo. La primera acab¨® con un centro al ¨¢rea a los seis minutos que remat¨® Juanmi y detuvo bien Luca Zidane. La segunda fue una gran internada de ?lex Moreno con un pase atr¨¢s que Mario Su¨¢rez desvi¨® a su porter¨ªa. Fue en el minuto 36. El Betis era una nulidad en ataque, sostenido por sus centrales y por el equilibrio de Guido, vital en alguna acci¨®n para cortar los ataques del Rayo.

En ataque, los de Iraola no llegaron en un primer tiempo tormentoso, de alto ritmo, con algunos jugadores demasiado presionados por lo mucho que hab¨ªa en juego. Solo ?lvaro, siempre veloz, tuvo una buena opci¨®n en un centro al ¨¢rea que sac¨® Edgar en el minuto 17. Fue la jugada que buscaba el Rayo con asiduidad. El toque al espacio de Trejo y la internada del veloz extremo andaluz, quien no ha ocultado su militancia sevillista. Al Betis le val¨ªa el 1-2 de la ida, aunque llamaba la atenci¨®n su escasa presencia en ataque. Ni Juanmi ni Willian Jos¨¦, as¨ª como Canales y Fekir, eran capaces de sortear las marcas de sus rivales, en especial la de un incansable ?scar Valent¨ªn. El Rayo, sin colmillo, estaba siendo algo mejor que el Betis.

El Rayo supo jugar muy bien con el nerviosismo local en la segunda mitad. Sobre todo despu¨¦s de que el equipo verdiblanco desperdiciara sus opciones de ataque, que llegaron cuando el equipo madrile?o empez¨® a notar el cansancio. La mejor ocasi¨®n la tuvo Fekir, que solo en el ¨¢rea lanz¨® a las manos de Zidane. El Rayo insisti¨® y encontr¨® el empate en un golazo de Beb¨¦ de falta. El Betis, sin embargo, se vino arriba aprovechando la valent¨ªa de un Rayo que ten¨ªa en sus manos la pr¨®rroga. Balliu salv¨® bajo palos despu¨¦s de un disparo de Fekir que toc¨® Luca. El meta no pudo hacer nada en ese minuto 92 en que Joaqu¨ªn lanz¨® a su equipo. Marc¨® Borja y todav¨ªa el propio Joaqu¨ªn pudo hacer el segundo gol. Hubiera sido demasiado castigo para ese buen Rayo que jug¨® un gran partido, anulando las virtudes del Betis. Pero apareci¨® Joaqu¨ªn y el cielo se abri¨® para los b¨¦ticos.

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