Sainz termina segundo en Canad¨¢ tras una carrera muy apretada que gana Verstappen

A diferencia de lo que ha hecho Ferrari, Red Bull est¨¢ aprovechando el momento dulce por el que pasa tanto el equipo energ¨¦tico como Max Verstappen, el puntal de su proyecto en la F¨®rmula 1. La escuder¨ªa del b¨²falo rojo supo apretar los dientes a principio de curso, cuando toc¨® sufrir, para despu¨¦s, una vez superados los problemas de juventud de su monoplaza, encadenar una racha escandalosa y coger aire al frente del Mundial. El tir¨®n dado por la marca austr¨ªaca ha coincidido, adem¨¢s, con el hundimiento de Ferrari. Il Cavallino Rampante ha condenado a Charles Leclerc, su principal apues...

A diferencia de lo que ha hecho Ferrari, Red Bull est¨¢ aprovechando el momento dulce por el que pasa tanto el equipo energ¨¦tico como Max Verstappen, el puntal de su proyecto en la F¨®rmula 1. La escuder¨ªa del b¨²falo rojo supo apretar los dientes a principio de curso, cuando toc¨® sufrir, para despu¨¦s, una vez superados los problemas de juventud de su monoplaza, encadenar una racha escandalosa y coger aire al frente del Mundial. El tir¨®n dado por la marca austr¨ªaca ha coincidido, adem¨¢s, con el hundimiento de Ferrari. Il Cavallino Rampante ha condenado a Charles Leclerc, su principal apuesta para recuperar un t¨ªtulo que no celebra desde 2007 (Kimi Raikkonen), acribill¨¢ndole con aver¨ªas y fallos de estrategia, el peor combinado posible para plantarle cara a un animal competitivo como Verstappen.

En una carrera que tuvo de todo, el actual campe¨®n volvi¨® a demostrar en Canad¨¢ que no hay piloto en la parrilla m¨¢s competitivo que ¨¦l ni monoplaza m¨¢s afilado que el suyo. A pesar de no disfrutar de una carrera tan pl¨¢cida como algunas de las precedentes, el neerland¨¦s y su tropa fueron los m¨¢s r¨¢pidos y tambi¨¦n los m¨¢s listos, leyendo perfectamente la escena, la tremenda degradaci¨®n de los neum¨¢ticos y la irrupci¨®n del coche de seguridad, algo que se puede dar casi por descontado en el circuito de Gilles Villeneuve, un trazado rapid¨ªsimo y abrazado por muros, una de esas pistas que no perdona. Suma 175 puntos en la clasificaci¨®n de pilotos, por delante de Checo P¨¦rez (129) y Charles Leclerc (126).

Como de costumbre, Verstappen fue agresivo al arrancar, gestion¨® de maravilla el aire que fue creciendo a su espalda entre ¨¦l y Fernando Alonso. A mitad de camino recuper¨® el terreno y el liderato perdidos tras su primera (y temprana) visita a los garajes (noveno giro), y en las ¨²ltimas 15 vueltas, cuando el safety revitaliz¨® las opciones de Carlos Sainz, no se inmut¨® a pesar del acoso al que le someti¨® el madrile?o, que le achuch¨® tanto como pudo pero que en ning¨²n momento estuvo en condiciones de meterle el morro de su b¨®lido. El espa?ol hizo exactamente lo que ten¨ªa que hacer; esto es, llevar al l¨ªmite a su ex compa?ero de equipo para forzarle a cometer un error que no nunca lleg¨®.

Este triunfo supone el sexto de nueve posibles para Verstappen, que pone la directa y que ya dispone de un coj¨ªn de casi dos grandes premios de ventaja al frente de la tabla general de puntos sobre Checo P¨¦rez, su vecino de taller, que abandon¨® a las primeras de cambio (octava vuelta) tras romper el motor. La segunda plaza de Sainz le permite romper la inercia negativa que le llev¨® a salir de Bak¨² con un rosco. Lewis Hamilton volvi¨® a subirse al caj¨®n tres meses despu¨¦s de haberlo hecho en Bar¨¦in, en la primera parada del calendario, mientras que Alonso cruz¨® la meta el s¨¦ptimo. El asturiano, sin embargo, tras ser penalizado con cinco segundos por conducir de forma err¨¢tica, qued¨® en el noveno puesto.

¡°Empuj¨¦ todo lo que daba el coche y no dej¨¦ ni un mil¨ªmetro al pegarme al muro, pero nos falt¨® ese pel¨ªn de ritmo que me habr¨ªa permitido adelantar a Max¡±, convino Sainz despu¨¦s de acumular su quinto podio de la temporada. La buena noticia para la Scuderia es que el Ferrari es indudablemente r¨¢pido, algo que qued¨® rotundamente probado en Montreal. A Maranello hay que pedirle ahora que no se rompa. De lo contrario, ser¨¢ dif¨ªcil que el pulso entre las dos principales fuerzas de este 2022 se prolongue tanto como la hinchada desear¨ªa.

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