So?ar a distancia

El de Robert Lewandowski es uno de esos nombres que te llenan la boca. Llam¨¢ndose as¨ª puede uno aspirar a casi cualquier cosa: desde viajar al espacio hasta descubrir la cura definitiva contra el c¨¢ncer. Pero el polaco opt¨® por el f¨²tbol y en ese campo no ha tenido grandes problemas para tejer una carrera brillante que ahora, suponemos, aspira a prolongar en un club con la jerarqu¨ªa y sobreexposici¨®n del Bar?a. ¡°Haber trabajado con Guardiola me ha preparado para este momento¡±, asegura ...

El de Robert Lewandowski es uno de esos nombres que te llenan la boca. Llam¨¢ndose as¨ª puede uno aspirar a casi cualquier cosa: desde viajar al espacio hasta descubrir la cura definitiva contra el c¨¢ncer. Pero el polaco opt¨® por el f¨²tbol y en ese campo no ha tenido grandes problemas para tejer una carrera brillante que ahora, suponemos, aspira a prolongar en un club con la jerarqu¨ªa y sobreexposici¨®n del Bar?a. ¡°Haber trabajado con Guardiola me ha preparado para este momento¡±, asegura el nuevo delantero cul¨¦. Y no faltar¨¢ quien piense que haber trabajado, en general, ya es un buen comienzo en el en¨¦simo intento por reflotar a un equipo que abandon¨® la cultura del esfuerzo entre el consentimiento generalizado.

El hambre mueve m¨¢s monta?as que la fe, dice un viejo proverbio que me acabo de inventar. Y aunque la fe ¡ªo en este caso el m¨¦todo¡ª son muy importantes en una socialit¨¦ tan particular como la blaugrana, el peso de los grandes futbolistas y la suma de sus est¨®magos vac¨ªos podr¨ªan ser la f¨®rmula m¨¢s apropiada para llegar a un fin que, durante el ¨²ltimo lustro, se persigui¨® apenas con palabras. ¡°Las intenciones, como los millones, mejor sobre el campo que en el banco¡±, dir¨ªa Johan Cruyff si la muerte no fuese un invento netamente madridista. Y lo que hemos visto en esta pretemporada del Bar?a de Xavi ilusiona por cuanto tiene de tangible, alejado de unos mantras repetitivos que vician el debate y enturbian los objetivos: ya no se trata de insinuarse cruyffista, aragonesista o mandaloriano, sino de competir y ganar desde el m¨ªnimo respeto debido a una herencia que ya solo se discute desde el rencor.

A falta de tr¨¢mites burocr¨¢ticos como la inscripci¨®n de futbolistas ¡ªLaporta ha logrado el milagro de que tambi¨¦n las pretemporadas tengan su emoci¨®n¡ª, los ejecutivos parecen haber cumplido su parte del trato. Ahora ser¨¢ negociado de Xavi y los futbolistas confirmar esas buenas sensaciones que tienen a la parroquia cul¨¦ celebrando ¨¦xitos por anticipado en lujosos hoteles de Bora Bora, que para eso se inventaron las palancas aplicadas a la econom¨ªa familiar. La exigencia ser¨¢ m¨¢xima y las excusas no tendr¨¢n cabida en un proyecto que aglutina experiencia e ilusi¨®n en partes proporcionales.

El presente ya no depende en exclusiva de diminutivos estampados en la camiseta. Y el futuro bien podr¨ªa conjugarse con apellidos polacos a prueba de corrosi¨®n, una mampara protectora que permitir¨¢ madurar a los j¨®venes por el camino directo hacia el gol, que bueno es cuando el juego no aparece. Ese mismo planteamiento parece haberlo comprado Pep Guardiola tras el fichaje de Erling Haaland, con la diferencia de que el hoy entrenador del City no tiene que demostrar las bondades de sus procesos. Por el contrario, a Xavi Hern¨¢ndez le queda un largo camino por recorrer en esta nueva aventura y nunca est¨¢ de m¨¢s contar con ese atajo grandilocuente que desatasca partidos y rebaja tensiones.

Firmar a un futbolista como Haaland es una inversi¨®n casi perfecta. Es joven, capaz y exagerado. En el peor de los casos, forzar¨¢ alg¨²n tipo de salida en unos a?os y el City recuperar¨¢ toda su inversi¨®n, mientras que el fichaje de Lewandowski se integra en una apuesta forzada al rojo, al todo o nada, pues el paso del tiempo lo acerca cada vez m¨¢s a la retirada. ¡°Aspiro a ofrecer toda una experiencia¡±, dice Tamara Falc¨® sobre su restaurante en el ¨²ltimo reality de Netflix. ¡°?Y qu¨¦ experiencia es esa de irse a comer a una hora de Madrid?¡±, protesta su madre. En ese punto se encuentran, ahora mismo, Xavi y los suyos: antes de so?ar, habr¨¢ que recortar las distancias.

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