Palancas, sextete y Mundialito en globo

Palancas, as¨ª en plural, ha sido la palabra del verano para el barcelonismo. Para el Madrid es sextete, una ambici¨®n del club porque es un r¨¦cord que le falta y vive ansioso de ellos. El sextete re¨²ne Liga, Copa, Champions, las dos supercopas y el Mundialito, todo ello en serie. Lo consigui¨® el Bar?a con Guardiola y el Bayern con Flick; el Madrid lo ambiciona y se siente capaz de lograrlo, incluso en voz de su entrenador, Ancelotti, a despecho de la cautela general de su gremio a la hora de garantizar t¨ªtulos. Queda para las discusiones cu¨¢l es el punto de partida: si se trata de ganar los sei...

Palancas, as¨ª en plural, ha sido la palabra del verano para el barcelonismo. Para el Madrid es sextete, una ambici¨®n del club porque es un r¨¦cord que le falta y vive ansioso de ellos. El sextete re¨²ne Liga, Copa, Champions, las dos supercopas y el Mundialito, todo ello en serie. Lo consigui¨® el Bar?a con Guardiola y el Bayern con Flick; el Madrid lo ambiciona y se siente capaz de lograrlo, incluso en voz de su entrenador, Ancelotti, a despecho de la cautela general de su gremio a la hora de garantizar t¨ªtulos. Queda para las discusiones cu¨¢l es el punto de partida: si se trata de ganar los seis en una misma temporada, como fue el de aquellos casos, o si vale empalmar t¨ªtulos de dos temporadas distintas con lo que el Madrid ya llevar¨ªa trabajo adelantado. ?Las Supercopas corresponden a la temporada en que se logr¨® el t¨ªtulo que dio acceso a ellas o a la siguiente, en cuyas primeras fechas se juegan, con plantillas ya renovadas?.

Pero no es a eso a lo que yo iba, sino al limbo en el que mora una de las seis competiciones de la cadena, el Mundial de Clubes, coloquialmente el Mundialito, que todav¨ªa no se sabe cu¨¢ndo se va a jugar ni tampoco d¨®nde. Y ni siquiera la f¨®rmula, porque la FIFA pretend¨ªa haberlo ampliado para estas fechas a 24 equipos, cosa que ya ser¨¢ imposible.

El Mundialito gigante y el Mundial de selecciones bienal han sido los dos proyectos de Infantino para que su FIFA recaude m¨¢s y, a m¨¢s dinero m¨¢s poder, pudiera ensombrecer a la UEFA de Ceferin. Hoy por hoy, la FIFA tiene como ¨²nico gran ingreso el Mundial de selecciones cada cuatro a?os. La UEFA, adem¨¢s de Eurocopa cada cuatro a?os, Champions cada a?o. Nada que ver. De ah¨ª los planes de Infantino que hasta ahora van quedando en trastadas. Alent¨® la conspiraci¨®n de la Superliga como torpedo contra la Champions y cuando esta cay¨® en v¨ªa muerta se puso de perfil; concibi¨® su Mundial bienal engatusando a las confederaciones menores con lo que empuj¨® a la UEFA y la Conmebol a un conato de cisma cuyo germen a¨²n est¨¢ ah¨ª; y concibi¨® un Supermundial de Clubes (el de ahora no le da dinero) con 24, en el que tendr¨ªan cabida 12 europeos, de 4 a 6 suramericanos y el resto a repartir. Se formar¨ªan 8 grupos de 3 equipos cuyos ganadores se ir¨ªan cruzando luego hasta dar dos finalistas. Estaba en discusi¨®n el reparto por confederaciones y los m¨¦ritos para acudir (?ranking? ?clasificaci¨®n en los torneos continentales?) cuando irrumpi¨® la pandemia y aquello qued¨® flotando.

A d¨ªa de hoy la FIFA tiene firmado con China un primer Mundial de 24 equipos para febrero de 2023. Pero a estas alturas no hay el menor movimiento para cuadrar el sistema de elecci¨®n de los 24 y es dudoso que China admita sin m¨¢s el cambiazo a un Mundialito de 7, de m¨ªnimo inter¨¦s. Ya saben: a ¨¦l acuden los campeones de las seis confederaciones (una m¨¢s que continentes, porque Am¨¦rica tiene dos, Conmebol y Concacaf) m¨¢s el anfitri¨®n, que pasa una eliminatoria previa. Los campeones europeo y suramericano entran ya en la semifinal. Pocos partidos y de inter¨¦s muy menor salvo la final, casi siempre entre el europeo y el suramericano.

Esa frecuent¨ªsima final europea-suramericana remite al origen de todo, cuando naci¨® en 1960 como Copa Intercontinental, enfrentando al campe¨®n de la Copa de Europa y al de la Copa Libertadores, con victoria del Real Madrid sobre el Pe?arol. Ya entonces consider¨¢bamos al ganador campe¨®n del mundo, aunque no exist¨ªa tal t¨ªtulo oficial porque no lo permiti¨® la FIFA. Empez¨® con doble final, ida y vuelta, pero los suramericanos llegaron a pegar tanto que alg¨²n a?o no se celebr¨® y alg¨²n otro por Europa acudi¨® el subcampe¨®n (el Atl¨¦tico, que la gan¨®) por renuncia del campe¨®n. Aquello lo salvaron Jap¨®n y Toyota, organiz¨¢ndolo a partido ¨²nico durante muchos a?os. Eso mantuvo viva la llama hasta que la FIFA decidi¨® absorberlo dando entrada a otros continentes.

Pero este a?o se ha atragantado. V¨ªctima de ambiciones, confusiones, pandemia y Mundial de Qatar metido como un elefante en medio de la temporada, no sabemos qu¨¦ ser¨¢ del desdichado Mundialito. El pron¨®stico es modelo a 7 metido con calzador en febrero en alguna petromonarqu¨ªa que haga el quite. Pero a d¨ªa de hoy, con los campeonatos ya en marcha, no hay d¨®nde ni cu¨¢ndo ni c¨®mo. Y no falta quien piensa que no se har¨¢, en cuyo caso las discusiones del sextete resultar¨¢n bald¨ªas.

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