La vieja guardia rescata al Chelsea
Superada la eliminatoria con el Dortmund, el mayor problema al que se enfrenta Graham Potter es la falta de adaptaci¨®n al f¨²tbol de la Premier de las nuevas incorporaciones
El blanco impoluto de la pronunciada dentadura de Graham Potter reluc¨ªa en cada una de las felicitaciones que dedicaba a sus jugadores tras consumarse ayer la remontada al Borussia Dortmund. El hombre acababa de salvar el descalabro deportivo, econ¨®mico y reputacional que hubiese supuesto la eliminaci¨®n del Chelsea en los octavos de la Champions. Por primera vez desde que se hizo cargo del Chelsea tras relevar a Thomas T¨¹chel en septiembre, Potter sinti¨® en la noche del martes que hab¨ªa cumplido con las expectativas depositadas en ¨¦l y en el proyecto de 600 millones de euros en fichajes que tiene entre sus manos. Ataviado con una bufanda con los colores del equipo que le daba un aire de fan¨¢tico, Todd Boehly, el potentado banquero estadounidense que adquiri¨® el club por unos 3.000 millones de euros tambi¨¦n luc¨ªa sus amarfilados dientes incisivos en el palco.
Nada para lucir palmito para los millonarios propietarios de nuevo cu?o que han desembarcado en la Premier League como el boato de las grandes noches de Champions saldadas con triunfos. En sus megal¨®manas inversiones hay una parte de retorno destinado a consolidar su imagen como triunfadores y levantadores de emporios econ¨®micos desafiando al l¨ªmite el endiablado binomio capital-riesgo. Perfiles como el de Boehly parecen no temer a las m¨¢s retorcidas aleatoriedades que puede deparar un juego como el f¨²tbol, donde el negocio fluct¨²a bajo la caprichosa premisa de que la pelota entre o no. Por lo que dijo en la sala de prensa, esto es justo lo que atormentaba a Graham Potter antes del duelo a todo o nada que tuvo que afrontar ante el Dortmund. ¡°Tuvimos que responder contra el Leeds, jugamos un buen partido contra el Dortmund en la ida, pero perdimos: nadie quiere escuchar que jugaste bien, tuviste oportunidades y perdiste¡±, se desahog¨® el t¨¦cnico ingl¨¦s.
Eludido el topetazo de no haberse clasificado para los cuartos de final de la Liga de Campeones, la realidad de la Premier League dice que el Chelsea est¨¢ a once puntos de la cuarta plaza que da acceso a la pr¨®xima Champions y que ha sido eliminado de los torneos coperos dom¨¦sticos. La preocupaci¨®n interna por este devenir en las competiciones era latente entre el n¨²cleo duro de la caseta. Seg¨²n fuentes pr¨®ximas al vestuario, los m¨¢s veteranos han detectado que los jugadores contratados entre el mercado invernal y el veraniego a¨²n no se han adaptado al exigente ritmo de juego que demandan los partidos de la Premier League. Ni Mudrik (70 millones de euros m¨¢s 30 en variables), que lleva dos partidos sin intervenir, ni Jo?o F¨¦lix (11 por la cesi¨®n), ni Madueke (35) o incluso algunas de las incorporaciones m¨¢s maduras, como el central Koulibaly (40) han terminado por acoplarse a la fren¨¦tica ida y vuelta de los encuentros ingleses. De los llegados de ligas extranjeras, solo Enzo Fern¨¢ndez (120) parece haber pasado el corte de la fren¨¦tica ida y vuelta que impera en la Premier League. La juventud de los fichajes concuerda con la l¨ªnea de trabajo impuesta por Chistopher Vivell, el nuevo director deportivo reclutado de la factor¨ªa de cazatalentos de Red Bull y se?alado como el hombre que llev¨® a Erling Haaland al Salzburgo. La falta de callo competitivo tambi¨¦n se ha echado en falta y se explica internamente como otro de los puntos que han propiciado que el Chelsea solo haya ganado tres de sus ¨²ltimos diez partidos en la Premier tras el par¨®n por el Mundial de Qatar.
Esa falta de horas de vuelo en muchas de las adquisiciones ya provoc¨® inquietud en el vestuario cuando se confirm¨® la marcha de Jorginho al Arsenal y se acentu¨® cuando estuvo a punto de concretarse la de Ziyech al PSG durante la ¨²ltima ventana de mercado. Esta no se consum¨® y en ello tuvo que ver el rechazo de parte del plantel, que hizo todo lo posible por frenarla. La resoluci¨®n de la eliminatoria con el Dortmund apunt¨® en esa direcci¨®n. Fueron los futbolistas m¨¢s veteranos o los m¨¢s adaptados los que resultaron decisivos. Los laterales Reece James y Chilwell, Cucurella, Kovacic, Kai Havertz y Sterling llevaron el peso del partido.
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