Los segundos Juegos de la triatleta Eva Moral: ¡°Me tuvo que pasar el accidente para vivir todo lo que he vivido en estos diez a?os¡±.

A Eva Moral (Madrid, 1982) le cambi¨® la vida el accidente que sufri¨® en 2013, cuando perdi¨® el control de la bicicleta en una bajada. Recuerda que llov¨ªa, que fren¨® y que vol¨® por encima de un quitamiedos para caer de un barranco de siete metros. Ya nada iba a ser igual. Se qued¨® parapl¨¦jica de cintura hacia abajo y tuvo que reaprenderlo todo. C¨®mo ducharse y vestirse. C¨®mo subirse a la cama y cuidarse la piel de la que perdi¨® sensibilidad. Tambi¨¦n aprendi¨® a hacer deporte de otra manera. ¡°Yo ya hac¨ªa triatl¨®n, pero todo lo hac¨ªa con las piernas¡±, cuenta. Sus compa?eros le hablaron del triatl¨®n paral¨ªmpico y desde entonces no ha parado. ¡°Me tuvo que pasar el accidente para que yo viviera todo lo que he vivido en estos diez a?os¡±, afirma desde Par¨ªs, donde se clasific¨® despu¨¦s de ser madre y tras ganar un bronce en Tokio en 2021.

La triatleta tiene la frase Never give up (nunca te rindas) tatuada en la mu?eca derecha. Es su lema. Para la vida y para el deporte, su pasi¨®n. ¡°Soy muy tenaz. Es verdad que cuando tengo un objetivo, lucho mucho para conseguirlo o por lo menos hago todo lo que est¨¦ en mis manos. Es parte de mi personalidad, eso no me lo puedo quitar¡±, reconoce. El de ahora es conseguir un nuevo metal. Moral competir¨¢ en los Juegos de Par¨ªs, en la categor¨ªa de paratriatl¨®n en silla de ruedas (la final, este lunes, a las 8.20). La disciplina, introducida en los Paral¨ªmpicos de R¨ªo 2016, incluye nadar 750 metros, pedalear 20 km y correr 5km. Para ello usa su handbike, una bici en la que va tumbada y pedalea con las manos, y su silla de atletismo, donde se coloca de rodillas y doblada hacia delante.

Todo est¨¢ minuciosamente estudiado. En cada cambio de disciplina le asiste un handler, una persona que le ayuda a quitarse el neopreno, a subirse a la silla de atletismo o al triciclo manual. ¡°Te enga?ar¨ªa si te dijera que no he estado entrenando d¨ªa a d¨ªa para ser la mejor, para poder ganar una medalla¡±, se?ala la madrile?a. Su rutina la sigui¨® en la Villa Ol¨ªmpica: despertar a las siete, desayunar e ir a la piscina a las nueve. Luego entrenamiento con la bici y la silla de atletismo en un circuito cercano. Comida sobre las dos y vuelta a empezar.

El triatl¨®n le reconstruy¨® la vida. Ya lo practicaba antes del accidente, aunque entonces solo lo hac¨ªa en condici¨®n de amateur, muchas veces con su hermano. Lo compaginaba con los estudios y con su trabajo de abogada. En la oficina, a la hora de comer, cuenta que se iba a la piscina y a entrenar. El maletero lo ten¨ªa siempre lleno de zapatillas y ruedas de bici. Aficionada, pero persistente. Un rasgo de personalidad que no perdi¨®, incluso despu¨¦s de la tragedia, mientras estaba recuper¨¢ndose en el Hospital Nacional de Parapl¨¦jicos de Toledo.

¡°Momento de catarsis¡±

¡°El primer d¨ªa que entr¨¦ a la sala del fisio, me toc¨® y me dijo: t¨² no vas a mover las piernas, as¨ª que c¨¦ntrate en coger fuerza en los brazos, porque esa va a ser tu nueva vida¡±, rememora. ¡°Yo dije, bueno, pues esto es lo que hay que hacer. Y como deportista que soy, a trabajar¡±. Apost¨® por el triatl¨®n paral¨ªmpico, donde vio ¡°una motivaci¨®n extra para seguir adelante¡±. ¡°Me pod¨ªa haber salido mal, pero estaba en un momento de catarsis y me daba todo igual¡±, recuerda. Su palmar¨¦s, ahora, es extenso. Despu¨¦s de lograr un bronce en Tokio, se qued¨® embarazada y sigui¨® cosechando ¨¦xitos como el Campeonato de Europa de 2023.

Uno de sus mayores retos fue clasificarse para Par¨ªs tras ser madre. ¡°Yo no par¨¦ de entrenar durante el embarazo. Lo que pasa es que debes ir adaptando los entrenamientos, tienes que dar con personas que sepan, y no hay mucha informaci¨®n tampoco de entrenamientos para mujeres embarazadas¡±, explica. Moral tambi¨¦n habla del periodo posparto, donde el desgaste no solo era f¨ªsico sino mental, en un momento en que quer¨ªa clasificarse para Par¨ªs. ¡°Me influy¨® m¨¢s psicol¨®gicamente el hecho de quererme dar m¨¢s prisa de la cuenta¡±, se?ala, insistiendo en el apoyo que recibi¨® de su pareja y actual entrenador, ?ngel Salamanca, su familia y el Comit¨¦ Paral¨ªmpico. Lograr el campeonato europeo le devolvi¨® cierta esperanza y motivaci¨®n.

La conciliaci¨®n, admite, es dif¨ªcil. Pero no solo para ella. ¡°Yo creo que para todos los pap¨¢s y las mam¨¢s que trabajan, conciliar con la familia es muy complicado¡±. La diferencia en el deporte, recalca, es que no hay vacaciones y se trabaja de lunes a domingo. Recuerda que cuando se qued¨® embarazada, le preguntaron en entrevistas si pensaba retirarse. Nada m¨¢s alejado de lo que ella quer¨ªa. ¡°Creo que todav¨ªa se tiene ese concepto de que compaginar la maternidad y el alto rendimiento es algo que no se hace¡±, reflexiona. Pero cada d¨ªa se ve m¨¢s, a?ade. ¡°Eso es lo que hay que ver, pero claro, no a cualquier precio. Porque al final necesitamos apoyos, no solo econ¨®mico ¡ªque tambi¨¦n¡ª sino de una conciliaci¨®n real, no una conciliaci¨®n de hacer encaje de bolillos y de perdernos la vida de nuestros hijos por seguir nuestra carrera deportiva¡±.

Cuando se le pregunta qu¨¦ es lo que m¨¢s le cost¨® tras el accidente, no duda un segundo. ¡°La mirada de la gente¡±. Y a?ade: ¡°Las personas que tenemos discapacidad siempre hablamos de lo mismo, de la condescendencia con la que mucha gente te habla, la manera en la que te miran por la calle. A eso nunca te acostumbras, a que te miren con pena (...) porque t¨² no lo sientes as¨ª, as¨ª que no entiendes como los dem¨¢s te pueden mirar as¨ª¡±.

Puedes seguir a EL PA?S Deportes en Facebook y X, o apuntarte aqu¨ª para recibir nuestra newsletter.