Un desesperante y dolorido Bar?a incapaz de pasar del empate ante el Athletic
Los suplentes del equipo de Valverde reducen a un conjunto azulgrana deprimente y afectado por las lesiones de De Jong y Pedri en un partido que se supon¨ªa clave para la Liga
El Bar?a se qued¨® mudo en San Mam¨¦s. Jug¨® como si no se hubiera enterado del empate del Madrid ni de la derrota del Girona. No pareci¨® interesado en la Liga. Y puede que se haya complicado tambi¨¦n la vuelta contra el N¨¢poles en la Champions. Pedri y De Jong salieron lesionados de un partido destensado...
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El Bar?a se qued¨® mudo en San Mam¨¦s. Jug¨® como si no se hubiera enterado del empate del Madrid ni de la derrota del Girona. No pareci¨® interesado en la Liga. Y puede que se haya complicado tambi¨¦n la vuelta contra el N¨¢poles en la Champions. Pedri y De Jong salieron lesionados de un partido destensado y desinteresado por m¨¢s que se jugara en Bilbao. Los suplentes del Athletic se batieron con suficiencia m¨¢s que con grandeza ante un Barcelona anestesiado y afligido por m¨¢s enfadado que pareciera Xavi.
La condici¨®n de invicto en cancha ajena ¨²nicamente sirve a efectos de inventario porque los azulgrana descontaron dos puntos m¨¢s en una noche en que se supone aspiraban a situarse a seis del Madrid. El Bar?a no encuentra el hilo de la Liga. No tuvo ambici¨®n ni tampoco autoridad para acreditar su condici¨®n de campe¨®n ante el Athletic, que ni tuvo necesidad de chutar al arco de Ter Stegen ni tampoco sufri¨® por arropar a Unai Sim¨®n, espectador de la noche en San Mam¨¦s.
Alcanzada la final de Copa, el Athletic aspira a llegar a la zona Champions de la Liga. Las rotaciones se imponen por necesidad y por obligaci¨®n, sobre todo cuando los partidos son tan seguidos y los rivales exigentes como el Betis y el Atl¨¦tico. Valverde cambi¨® a m¨¢s de medio equipo de jueves a domingo para recibir a un expectante Bar?a. Xavi insisti¨® en el plan que tan bien le sali¨® ante el Getafe con la novedad de Pedri por Joao F¨¦lix. Los azulgrana renunciaban a un tercer delantero para ganar un cuarto centrocampista mientras en el banquillo continuaba Lamine Yamal.
No pareci¨® que el contexto apremiara m¨¢s al Barcelona que a un Athletic sin futbolistas de la talla de Nico Williams y Sancet. Nadie protest¨® en la fragua de San Mam¨¦s por el juego regulador del plantel de Valverde. Los decibelios en la grada se rebajaron y la intensidad en la cancha disminuy¨® sin que ni jugadores ni aficionados se desentendieran nunca de un partido con el que no sab¨ªa que hacer el Barcelona.
La posesi¨®n era cansina, sin profundidad ni malicia, f¨¢cil de defender para el Athletic. Los porteros eran espectadores de una cita desbravada y que, sin embargo, se cobr¨® muy pronto un lesionado ilustre como De Jong. El holand¨¦s se fastidi¨® el tobillo derecho en un salto con Unai G¨®mez y fue sustituido por un volante (Ferm¨ªn) y no por Yamal. La noche pasaba sin pena ni gloria en la Catedral.
No se cont¨® ni una jugada de m¨¦rito hasta el minuto 31. G¨¹ndogan habilit¨® a Ferm¨ªn y Unai Sim¨®n evit¨® el gol del interior en un mano a mano que tuvo continuidad en el rechazo con un excelente disparo a media distancia de Cancelo. Volvi¨® a aparecer el portero y con la ayuda de Yeray evitaron el 0-1. Apenas hab¨ªa noticias en cambio de Pedri. El tinerfe?o volanteaba para encontrar el sitio sin De Jong cuando se rompi¨® ante la desesperaci¨®n colectiva y el silencio de San Mam¨¦s. Pedri se retir¨® desconsolado por una dolencia muscular que se repite por tercera vez en una temporada para desespero de Xavi. El t¨¦cnico ya no sab¨ªa como recomponer al grupo y acab¨® por recurrir a Yamal.
Las lesiones castigaron a un equipo sin tensi¨®n competitiva, pasivo e impreciso, m¨¢s cansado que el Athletic, insensible a una jornada que le invitaba a pelear por la Liga. El absentismo y la fatalidad barcelonista envalentonaron al Athletic. Las p¨¦rdidas se suced¨ªan en cancha azulgrana para alimentar las transiciones de I?aki Williams y Berenguer. El repliegue acostumbra a ser lento y la presi¨®n no siempre es sincronizada en el Bar?a. Los azulgrana se empantanaban mientras los rojiblancos mejoraban con la entrada de titulares como Sancet y De Galarreta. Yamal era un verso suelto que se peleaba con y sin bal¨®n en campo del Athletic con la ¨²nica ayuda de Ferm¨ªn.
La rueda de cambios no modific¨® el panorama para el Barcelona. Al equipo le pudo el miedo a perder, m¨¢s aplicado en defensa que atrevido en ataque, dolorido por la p¨¦rdida de De Jong y de Pedri. No tuvo recambios de calidad para desequilibrar un partido que exig¨ªa la victoria para mantener sus aspiraciones en la Liga. A falta de juego, tampoco tuvo pasi¨®n sino que vivi¨® anestesiado en San Mam¨¦s.
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