En Sur¨¢frica se asegura que peligra el G. P. de Espa?a
Seg¨²n declaraciones de Barnnie Eclestone en Kyalami, donde hoy se disputa el Gran Premio de Sur¨¢frica, podr¨ªa anularse el Gran Premio de Espa?a si el Real Autom¨®vil Club no accede a las pretensiones de la Asociaci¨®n de Constructores de F¨®rmula 1 que el exigente brit¨¢nico representa. M¨®naco correr¨ªa la misma suerte por id¨¦nticas razones.Como es costumbre casi obligada, saludo a Barnnie Eclestone y esta vez le cuento los cambios habidos al frente de nuestra federaci¨®n. Le hago saber que el RACE ha enviado especialmente a Bernard Tramont a fin de hacer conclusiones en Sur¨¢frica para que sirvan a la organizaci¨®n de nuestro Gran Premio y antes de terminar de hablar me corta con su sonrisa ?made in England? para decirme que no habr¨¢ Gran Premio de Espa?a si los organizadores no firman un contrato por tres a?os. Al principio creo que me lo dice de broma, pero pronto salgo del error, ya que contin¨²a. ?He tratado de obtener respuesta del RACE, sin conseguirlo. Si no hay contrato que nos deje tranquilos los pr¨®ximos tres a?os, no habr¨¢ carrera ... ? Le hago saber de la ilusi¨®n puesta por todos en la carrera del pr¨®ximo 8 de mayo y de los esperanzadores vientos que corren en nuestro renovado automovilismo.
?Ellos, contin¨²a Eclestone, dicen que no me localizan; tengo tres telex en Londres y siete tel¨¦fonos de los que nunca me alejo m¨¢s de media hora?. Me encarga adem¨¢s que transmita a la organizaci¨®n a mi vuelta lo que aqu¨ª exactamente escribo sin quitar ni una coma.
?No se trata de dinero, la cantidad est¨¢ pactada?. Conociendo a Eclestone y sus sistemas, no. puedo creerle. Pero esta es por el momento la alarmante noticia recibida en exclusiva y por sorpresa.
Mala organizaci¨®n
Cuando a veces criticamos lo nuestro, quiz¨¢s conviniera reflexionar sobre lo que ocurre en pa¨ªses como este y otros a los que se presupone modelos de organizaci¨®n. Aqu¨ª ni siquiera se puede hablar de ella, porque simplemente no existe. S¨®lo un reducido grupo de periodistas asiste a esta carrera. Las facilidades son m¨ªnimas. A nuestro Gran Premio acuden m¨¢s de setecientos periodistas de todos los pa¨ªses y si alg¨²n capitoste de segunda fila de las organizaciones internacionales no es recibido en Barajas con banda y m¨²sica pone el grito en el cielo.Cuando acaban los ¨²ltimos entrenamientos del jueves, los altavoces del circuito dan seguro el mejor tiempo para la parrilla de salida de hoy a Jochen Mass, con 1.15.94., y as¨ª lo anotamos. Quince minutos m¨¢s tarde aseguran que est¨¢n en discusi¨®n oficial los tiempos de Carlos Pace y James Hunt para el segundo y tercer puesto. Media hora m¨¢s tarde resulta que el tiempo de Mass est¨¢ equivocado. Nos aseguran que Pace es el m¨¢s r¨¢pido; se organiza una fuerte discusi¨®n en la torre en la que intervienen Barnnie Eclestone, Tedy Mayer y los hombres de Ferrari, ya que Lauda tiene el tercer puesto. Una hora despu¨¦s surge la sorpresa. James Hunt es primero con 1.115.94, Pace, segundo y Lauda, tercero. Al final uno acaba pensando que en vez de electr¨®nica han estado utilizando relojes de arena.
Hoy a las 14,30, Hunt y Pace deben llegar los primeros al final de la recta.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.