Nuevos incidentes y manifestaciones en Roma
El ministro del Interior, Francesco Cossiga, dio cuenta ayer en la C¨¢mara de Diputados de los episodios de violencia que anteayer perturbaron el centro de Roma, y causaron la muerte de la joven de diecinueve a?os Giorgina Masi, hija de un peluquero de se?oras.
Mientras el ministro condenaba por en¨¦sima vez la violencia, en el barrio Trionfale, donde viv¨ªa la joven, unos quinientos estudiantes de instituto se manifestaron para protestar por la muerte de Giorgina, asaltando unas oficinas del Movimiento Social Italiano y de la Democracia Cristiana. Un joven result¨® herido. Al mismo tiempo, una reuni¨®n programada en la facultad de Derecho se celebr¨® sin incidentes.De madrugada, un artefacto, lanzado contra el parque de autom¨®viles del Ministerio del Interior, inutiliz¨® unos quince veh¨ªculos. M¨¢s tarde, la polic¨ªa intercept¨® un autom¨®vil cargado de explosivos.
Manifestaciones prohibidas
El ministro Cossiga reiter¨® en la C¨¢mara la prohibici¨®n de manifestaciones p¨²blicas hasta el 31 de mayo. El primero de mayo -dijo- se hizo una excepci¨®n por el significado social de la fiesta. Seg¨²n el ministro, no se trata de suprimir la libertad de asociaci¨®n, sino de impedir provocaciones que atenten contra las instituciones democr¨¢ticas. Cossiga reconoci¨® que la pol¨ªtica de los radicales se inspira en la no violencia, pero critic¨® sus gestos desmesurados y sus palabras, que alientan -asegur¨®- a los que emplean las bombas ?molotov?. Los comunistas, a su vez, tanto en la C¨¢mara como en un documento de la direcci¨®n del partido, deploran los atentados que ponen en peligro las conquistas democr¨¢ticas logradas tras tantos a?os de lucha, pero se oponen a la prohibici¨®n de las manifestaciones. Tambi¨¦n los obispos, reunidos en su conferencia nacional, achacan los episodios de violencia a ?la erosi¨®n de los valores morales?.El lider radical Marco Panella mantuvo ayer una conferencia de prensa para dar cuenta a la opini¨®n p¨²blica de los graves episodios del d¨ªa anterior. Prometiendo un ?libro blanco? sobre lo ocurrido, Panella neg¨® que fueran los aut¨®nomos y los extraparlamentarios ?ultra? de Democracia Proletaria y Lucha Continua los provocadores del caos. El responsable, seg¨²n Panella, es el mismo Gobierno a quien le interesa la estrategia de la tensi¨®n.
Entretanto, en medio del puente Garibaldi, en el coraz¨®n de Roma, alguien ha colocado una gran piedra cubierta de flores y una bandera roja. Ayer la polic¨ªa motorizada no consigui¨® aligerar el tr¨¢fico. La gente, sobre todo estudiantes de las escuelas secundarias de la misma edad de Giorgina, acuden a recordarla.
Su muerte ocup¨® ayer la primera p¨¢gina de todos los peri¨®dicos. Giorgina, acompa?ada de su novio, se dirig¨ªa a la manifestaci¨®n radical de plaza Navona para firmar la propuesta de los ocho ?referendums? pedidos por los radicales. La guerrilla urbana le impidi¨® entrar en la plaza y, mientras trataba de pasar el puente sobre el T¨ªber, un tiro de pistola le alcanz¨® en el abdomen. La manifestaci¨®n radical trataba de ser pac¨ªfica, incluso una fiesta popular para conmemorar la victoria de hace un a?o sobre la propuesta de derogaci¨®n de la ley de divorcio. Como otras, la manifestaci¨®n degener¨® en guerrilla urbana.
El tema del orden p¨²blico es el primero y fundamental sobre el que esta semana est¨¢n tratando de concertar su programa los partidos pol¨ªticos y para cuyo logro el Gobierno propuso ayer reformar el C¨®digo Penal agravando las penas por los atentados contra la Magistratura, las fuerzas del orden, los abogados, y el sistema de comunicaciones de la polic¨ªa.
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