La divisi¨®n de los partidos desluci¨® la celebraci¨®n del D¨ªa de la Patria Gallega

Bajo un sol espl¨¦ndido que ilumin¨® la ciudad de Compostela, demasiado calor y enorme alegr¨ªa de fiesta, se celebr¨® ayer el D¨ªa da Patria Galega. No ha habido la afluencia tur¨ªstica propia de estas fechas, pero la pasi¨®n pol¨ªtica y las banderas partidistas colorearon las viejas ruas de un modo inusitado. En el aire de la pol¨ªtica gallega qued¨®, sin embargo, un sentimiento de frustraci¨®n, al menos para algunos partidos que tampoco este a?o vieron cumplidos los eternos deseos de Galicia de ofrecer su d¨ªa de forma unitaria, firme y coherente. Escribe nuestro corresponsal en Santiago, Perfecto Conde.

Una vez m¨¢s, el Bloque Nacional Popular Galego ha sido la organizaci¨®n pol¨ªtica que se llev¨® el gato al agua con sus 20.000 manifestantes, que pidieron a gritos poder popular para Galicia.La presencia de Telesforo Monz¨®n a la cabeza de la manifestaci¨®n y las palabras que dirigi¨® al p¨²blico el l¨ªder vasco en la plaza de la Quintana, sita en los aleda?os de la catedral compostelana, fueron una de las notas m¨¢s destacadas de la jornada. Monz¨®n levant¨® su voz para dirigirse a su antiguo amigo gallego Alfonso Castelao. ?T¨² tuviste que so?ar?, invoc¨® Monz¨®n a Castelao, ?para que nosotros vi¨¦ramos nuestro sue?o realidad?.

Se refiri¨® m¨¢s tarde, en medio de grandes aplausos, a la situaci¨®n vasca con estas palabras: ?Afirmo solemnemente que en nuestro pueblo existe la persecuci¨®n, la c¨¢rcel y el exilio con m¨¢s crueldad que en los peores momentos de la dictadura?, A?adi¨® que tra¨ªa, sin embargo, a Galicia el saludo de la esperanza de Euskadi. ?No queremos?, manifest¨®, ?estatutos de limosna ca¨ªdos de la Puerta del Sol. En lo que a nosotros respecta, la paz todav¨ªa es posible, pero no con migajas ca¨ªdas del reloj de la Puerta del Sol.?

Monz¨®n: "embajador de Euskadi en Galicia"

Otro pasaje aplaudido de su discurso correspondi¨® al momento en que asegur¨® que ?los gudaris de ETA de hoy, como los gudaris de ayer, no son terroristas?. Termin¨® su intervenci¨®n, que fue la m¨¢s influyente de toda la jornada, diciendo: ?Desde aqu¨ª saludo a los futuros embajadores de nuestros pueblos, a los embajadores de Euskadi en Galicia y de Galicia en Euskadi.?

Bajo las mismas consignas y formando a la cola de la manifestaci¨®n del Bloque, marcharon la Liga Comunista Revolucionaria, el Movimiento Galicia Ceibe y el Partido Galego do Proletariado (PGP). Con estos ¨²ltimos camin¨® el l¨ªder del PCOE, Enrique Lister. Precisamente sobre los nacionalistas del PGP cay¨® la ¨²nica intervenci¨®n policial que registr¨® la jornada gallega, al cargar con virulencia la Polic¨ªa Nacional en el momento en que celebraban un mitin pol¨ªtico en la plaza de Fonseca. Entre los contusionados estuvo el hijo de L¨ªster, y fueron detenidos los profesores Jos¨¦ Luis M¨¦ndez Ferr¨ªn y Carlos Campoy, as¨ª como una se?ora que no interven¨ªa en el acto.

En el mitin de Unidade Galega participaron unas 2.500 personas, de las que cerca de quinientas se retiraron para protestar por la prohibici¨®n de que hablara en el acto el Partido del Trabajo. Domingo Merino, alcalde de La Coru?a, declar¨® que el 25 de julio no ser¨¢ un d¨ªa de fiesta sino de lucha hasta que Galicia no consiga ?su liberaci¨®n social y nacional?. Camilo Nogueira manifest¨® que no se puede admitir que ?los partidos estatales firmen en Galicia recortes al Estatuto que ellos no han admitido en otros pa¨ªses del Estado?.

En la concentraci¨®n de Unidade Galega hablaron tambi¨¦n Luis Sobrado y Abelino Pousa Antelo (por el Partido Galeguista), Rub¨¦n Fereiro¨¢ (por el Partido Obreiro Galego), Claudio L¨®pez Garrido (por el Partido Socialista Galego), Jos¨¦ Miguel G¨®mez Herrero y Marina de Paz (por el PNV), Joaqu¨ªn A. Freixenet y Jos¨¦ Rahola (por Esquerra Republicana de Catalu?a) y Luis Mar¨ªa Xirinacs.

Paralelamente, el Movimiento Comunista de Galicia celebr¨® tambi¨¦n su propia manifestaci¨®n, al igual que hizo el PCE (m-l). La nota heterodoxa de la jornada fue puesta por una escasa participaci¨®n anarquista, que tom¨® con buen humor la tarea de poner el contrapunto a la euforia nacionalista citando en pancartas a Carlos Edmundo de Ory para decir que ?todos somos extranjeros?. A pesar de todo, tambi¨¦n algunos anarquistas se sumaron a la manifestaci¨®n, sin identificarse con ning¨²n grupo, pero pidiendo independencia para Galicia.

El contraste de la jornada estuvo, sin duda, en el hecho de que la realidad del d¨ªa desinfl¨® los optimismos previsorios. Se esperaba algo m¨¢s de afluencia. Y se qued¨® todo a un paso corto, para atr¨¢s, de lo que el nacionalismo gallego consigui¨® el a?o pasado. El Bloque mejor¨® su incidencia en cuanto al n¨²mero y a la popularidad de los invitados, pero no hizo avances, no obstante, en cuanto a movilizaci¨®n se refiere, y en eso tambi¨¦n contrastan ahora sus versiones excesivamente optimistas de que acudieron a Santiago entre 50.000 y 60.000 manifestantes.

En cuanto a Unidade Galega, podr¨ªa hablarse incluso de cierto fracaso movilizador. Algunos de los partidos que la componen, el Partido Obreiro Galego, celebr¨® la misma fecha del a?o pasado bajo otra denominaci¨®n y con consignas diferentes, al lado de UCD, PCE y PSOE. Esta vez la coalici¨®n levant¨® claramente la bandera de la autodeterminaci¨®n y puede extra?ar, aparentemente al menos, la comprobaci¨®n de que una agrupaci¨®n electoral que obtuvo ¨¦xitos muy notables en las municipales haya movilizado en el D¨ªa de la Patria Galega menos de 3.000 personas.

El resto del espectro pol¨ªtico gallego apenas se enter¨® de que Galicia tiene su propio d¨ªa nacional desde 1920. UCD y CD no quisieron exponerse a un nuevo fracaso como el que sufri¨® el entonces presidente Ros¨®n el a?o pasado, al ser abucheado por los manifestantes de su propia convocatoria. El PCE y el PSOE, el segundo con menos entrega que el primero, celebraron la fiesta por su cuenta y conjuntamente. L¨ªderes comunistas como Gregorio L¨®pez Raimundo, Roberto Lertxundi, Rafael Pillado y otros participaron en m¨ªtines de escasa concurrencia y en algunas fiestas populares de clara orientaci¨®n pol¨ªtica.