Discretas bajas y falta de una tendencia definida

Las inc¨®gnitas sobre la evoluci¨®n en un futuro inmediato de los mercados nacionales de valores se mantuvieron a lo largo de las inanimadas reuniones que se celebraron ayer, en las que la desconfianza entre los principales inversores termin¨® siendo la causa de que los ¨ªndices generales expresasen breves diferencias negativas.La inactividad, como consecuencia del reducido n¨²mero de ¨®rdenes que concurrieron a las salas de contrataci¨®n, fue otra de las caracter¨ªsticas que marcaron esta aburrida sesi¨®n, donde s¨®lo destacaron las fuertes p¨¦rdidas de Dragados, la baja de Iberduero, y algunos peque?os recortes entre los valores del grupo bancario.

En este sector se observ¨® una acentuaci¨®n de las presiones vendedoras, ligeramente selectiva, y que incid¨ªa con especial determinaci¨®n en las acciones de Banesto. Este valor presentaba en el mercado madrile?o una diferencia entre las ¨®rdenes de compra y las de venta conocidas que ascend¨ªan a 45.745 acciones a favor de las ¨²ltimas. Entre sus compa?eros de sector, s¨®lo el Santander superaba la decena de millar de t¨ªtulos como saldo vendedor, concretamente 13.353 acciones, a pesar de que la entidad bancaria monta?esa decidi¨® repetir su cambio.

El Popular y Banesto fueron los ¨²nicos que aceptaron recortar los precios de sus acciones conforme les aconsejaban las posiciones del mercado. El resto de los grandes optaron por repetir sus cambios, a pesar de que las diferencias que separaban sus cotizaciones de los precios que recomendaba la caja eran bastante notables.

Dragados fue, quiz¨¢, el valor de todo el mercado que m¨¢s afectado se vio por la carcoma de las realizaciones de beneficios. Ayer circulaban por los parqu¨¦s dos tesis para explicar la p¨¦rdida de siete enteros que reflej¨® el valor en el mercado madrile?o. Por una parte, hab¨ªa quien aseguraba que el valor hab¨ªa sido objeto de las iras de alg¨²n inversor importante que hab¨ªa decidido hacer efectivas las mejoras que hab¨ªa experimentado el precio de este valor en las ¨²ltimas semanas, a la vez que provocaba un reajuste a la baja que podr¨ªa venir bien para el reinicio de una pr¨®xima mejora especulativa. Por otra parte, se defend¨ªa la posibilidad de que alg¨²n inversor extranjero de origen europeo, poco convencido de la fortaleza artificial de la peseta frente a algunas moniedas comunitarias, decidiera vender sus inversiones en Espa?a y canalizarlas hacia otros pa¨ªses cuyas monedas tuvieran unas perspectivas de evoluci¨®n m¨¢s positiva en los pr¨®ximos meses. Se,? cual sea la verdad, lo cierto es que la actividad en las bolsas result¨® absolutamente mortecina, y que en general los especialistas permanecen a la espectativa de la se?al que les ilumine. Mientras, lo l¨®gico es esperar que el mercado se mantenga dentro de los actuales cauces de escasa actividad, y diferencias m¨ªnimas en los, cambios de los valores punteros, siendo relegados los escarceos especulativos a valores de segunda fila y de f¨¢cil manipulaci¨®n.

La actitud de los bancos en las reuniones de ayer ha representado un jarro de agua fr¨ªa para los m¨¢s optimistas, y que los responsables de la evoluci¨®n burs¨¢til de estas entidades han mostrado un sinn¨²mero de prevenciones a acometer en solitario el proceso alcista, que parte de los especialistas calificaban hace menos de una semana de "l¨®gico y oportuno".